Capítulo 1.

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Aizawa Shouta es un hombre ocupado. Es profesor –aunque no trabaja mucho porque ha expulsado a toda su clase este año–, es padre de muchos gatitos; un montón de bastardos desagradecidos, y es un insomne que adora acurrucarse en su saco de dormir amarillo y gruñirle a todo el que intente molestarle.

Sí, bien, no parece que esté muy ocupado... Pero en realidad lo está. Aizawa Shouta también es un héroe. No un héroe como los que salen en la televisión, como –dios no quiera– All Might o Endeavor. Es un héroe clandestino, sin rankings de popularidad, sesiones de modelaje ni mocosos gritando su nombre para obtener un autógrafo.

Como héroe clandestino, Aizawa patrulla por las noches. La mayoría de los villanos a los que enfrenta no son tan llamativos como los que enfrenta All Might. No hay hombres gigantes o mujeres aladas, esos son los que quieren llamar la atención sembrando el caos, los que atacan a la luz del día. Él enfrenta a ladrones y violadores, aquellos que acechan en callejones y esperan a sus víctimas a la luz de la luna.

A veces, Aizawa también captura justicieros.

Entonces, Aizawa Shouta es un hombre ocupado, pero aparentemente es el menos ocupado de todos los héroes clandestinos en este momento. Es por eso por lo que se encuentra en la comisaría de policía un miércoles en horario escolar.

"Ah, Aizawa-kun, gracias por venir", el rostro del detective Tsukauchi rezuma cansancio. "Necesito que estés pendiente de alguien. Es nuevo y a veces sale durante el día pero en su mayor parte trabaja durante la noche."

"¿Un mercenario?", Aizawa recibe una carpeta de manila con el nombre de 'Broken Bones'.

Tsukauchi sacude la cabeza. "No ha matado a nadie, no. Es un justiciero."

El héroe profesional contiene un gemido. Los justicieros pueden llegar a ser incluso más peligrosos que los villanos. Al menos los villanos, en su mayoría, saben que lo que hacen está mal aunque traten de justificarlo. Los justicieros, sin embargo, creen firmemente que su trabajo es correcto cuando todo lo que hacen es estorbar a los héroes.

"¿Huesos Rotos?", pregunta.

El detective suspira profundamente. "Tiene... un largo historial de huesos rotos, de ahí su nombre. Aún no sabemos cómo sigue haciendo eso."

Aizawa suelta un bufido mirando al hombre cansado. ¿Qué es lo que aún no saben? Según su experiencia, no es muy difícil romper los huesos de tus enemigos. Imagina que este justiciero es un tipo fuerte, probablemente con un quirk potenciador basándose en su fama de romper huesos. Él asiente y se levanta con la carpeta en la mano.

"Le echaré un vistazo antes de mi patrulla de hoy."

"Gracias, Aizawa-kun", dice el detective. "Hasta ahora, este justiciero ha hecho más bien que mal pero con esta cantidad de heridas... Deberíamos detenerlo antes de que pase algo peor."

El azabache arquea una ceja y da un último asentimiento. Aunque no tenga una clase a la que enseñar, debe volver a UA. Aizawa no se arrepiente de haber expulsado a todos sus alumnos y agradece el tiempo libre que tiene ahora, pero no puede evitar pensar en lo aburrido que es ser profesor cuando no tienes nadie a quien enseñar. Solo espera que la clase del año que viene sea menos problemática.

Los exámenes de ingreso fueron hace un par de semanas y Aizawa ya tiene la lista de alumnos de su nueva clase. Tiene al chico que quedó en primer lugar en el examen, que no obtuvo ningún punto de rescate. Eso ya de por sí pone banderas rojas por todo el expediente aparentemente impecable de su futuro alumno. Tiene al hijo de Endeavor, y tiene mucho que decir al respecto después de verlo en el examen de recomendación. Hay otros con habilidades memorables, pero nada que destaque positivamente para el criterio de Aizawa.

Broken BonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora