"HERMANA SUICIDA"

Único Capítulo.

Me levanté de la cama por culpa de un sonido que provenía de mi móvil.
Alguien me estaba llamando.

-Anne te necesitamos en la comisaría, ¡ya!- exclamó Ashton.

-Ash, estoy de vacaciones, no entraba en mis planes ir a trabajar, como comprenderás. -Dije mirando la hora que marcaba la pantalla de mi móvil.

7:30,
de la mañana,
un sábado,
¡EN VACACIONES!

Ya podía ser importante.

-Tu deberías comprender que se trata de algo grave, más concretamente de un secuestro, es urgente. - mencionó sin más, como si fuera la cosa mas normal del mundo.

-Con más razón para no ir, ¡Yo nunca he trabajado en ningún caso así! -dije asustada.

-Te vienes ya para aqui, rápido. -Ordenó y segundos después ya había colgado.

Debía hacerle caso, ya que no sólo era mi amigo, si no que también era mi jefe.

Llegé a la oficina. Cuando entré a aquel lugar, algo hizo que me tensara, mientras que un escalofrío recorrió todo mi cuerpo algo que no sabía que era exactamente, pero que sabía que me estaba avisando de que no estaba segura, algo así como el sentido arácnido de Spiderman.
No le hize mucho más caso y me adentré en la comisaría, donde encontré a Holly, nuestra secretaria, la cual saludé.
A su derecha se encontraba Ash, dirigiendo (como de normal) a todo el mundo.
Aún que se me hacía muy familiar todo el ajetreo que se había formado, creo que nunca antes había notado a todos mis compañeros tan concentrados en hacer su trabajo.

Debía de tratarse de algo extremadamente serio y peligroso.

Se notaba una tensión constante en el ambiente.

Y mi mente lo sabía, quería alejarme de ello.

Una voz me sacó de mi trance.

-Holly, los informes de la situación. -Pidió Ash mientras se abrochaba un chaleco, el cual no me gustaba nada, no por la estética, ni por el diseño, si no porque sabía que significa ese chaleco, y no traía nada bueno con el.
Holly le entrego unos papeles.
-Ponte esto.- me dijo uno de mis compañeros, pasándome otro chaleco.
Sabía que el se encontraba a mi lado, sin embargo su voz sonaba lejana, en mi cabeza.

-Antes de nada, dime. -Hize una pausa para poder pensar bien las palabras que iba a decir y ordenándolas para formar una frase con sentido.- ¿Por qué tengo que ayudar a liberar a un rehén? -Pregunté. Es decir, se que había sonado egoísta, pero... bueno, yo, yo esta de vacaciones.

-Anne Brucks, eres policía, da igual que estés de servicio o no, tu deber es proteger la ciudad, y más si hay vidas en peligro. -me dijo con un tono autoritario que hizo replantearme si merecería la pena llevarle la contraria.

-En fin. Dame información sobre el secuestrado o algo de eso que hagáis vosotros para encontrar a los ''malos''. -dije poniendo comillas con mis dedos. He de decir que llevo de policía desde los 18 (ahora tengo 25) y, en ninguno de estos años, me habían mandado alguna misión parecida a esta, lo único que se, es gracias a que, en mis descansos, veo gente en las oficinas hablando y pasándose datos y cosas así.
En C.S.I Miami, obviamente, aquí no solemos hacer ese tipos de trabajos, o bueno, solíamos, hasta este momento.

-El secuestrado se llama Kylan, tiene 29 años. Ha sido secuestrado por un ajuste de cuentas, por lo que hemos averiguado, es en venganza de algo que pasó hace mucho tiempo.
Tenemos dos sospechosos,
Mathew, el que seria el jefe, y Jack, su ayudante. -Me informó Holly.