*Terminada* Valentina Carvajal, es una chica de dieciocho años, que a los diez años sus padres la enviaron a vivir a Italia con su abuela, por que no podían encargarse económicamente de ella.
Valentina volverá a reencontrarse con su familia luego d...
Abro los ojos lentamente, por que la luz del sol en la mañana es bastante fuerte.
Bostezo, miro a mí alrededor y las veo a todas durmiendo ya sea en la cama o en el suelo, miro a mi lado y veo a Valentina dormida profundamente.
Es tan tierna, me acerco y le doy un beso de esquimal, sonríe y abraza mi cintura haciendo que esté delante de ella.
Abre su ojo izquierdo, sonrió y reímos en silencio.
-Buenos días! Bebe -susurra y me sonrojo.
Su voz ronca por las mañanas me encanta.
-Buenos días! -le digo tímida.
-Porque sigues siendo tan tímida? -susurra acercándose a mí y me vuelvo a sonrojar- Después de todo lo que ha pasado, deberías ser más atrevida -dice picara y se muerde el labio inferior.
-Cállate! -susurro avergonzada y se ríe en silencio.
-Voy a desayunar -se levanta de la cama y mi vista va al bulto entre sus piernas- Quieres una foto?... -dice burlona, tapo mi cara con la almohada y escucho como se acerca a mi.
Veo de reojo el otro lado de la cama, salto al otro lado para que no me agarré y esquivándola salgo de la habitación entre risas de las dos.
Bajo las escaleras con Valentina pisándome los talones, entro en la cocina pero me atrapa entre sus brazos y en mi trasero siento su bulto.
-Te atrapé! -susurra en mi oído, haciendo que me estremezca.
Me remuevo lentamente, sintiendo como su pene se va poniendo más y más duro... mmmmmm... pero qué me pasa?! Yo jamás he sido así! Pero con ella no puedo evitarlo.
-Esos movimientos no ayudan, sabes? -dice agarrando mis caderas y dándome la vuelta quedando cara a cara.
-Me lo paso bien -hace una mueca graciosa y me rió.
-Quien eres tú? y que hiciste con la inocente Juls? -me encojo de hombros y mueve su lengua haciendo que sonría- La puedo invitar a cenar señorita Valdez? -levanta una ceja.
-Hoy no puedo... -hace un puchero- Pero...el sábado, si... -baja la cabeza.
-Hoy es miércoles... tendré que esperar tanto? -resopla y asiento con una sonrisa- Bien, lo hago por ti... -me señala y asiento.
Me atrapa entre sus brazos, levanto la cabeza conectando sus ojos azules con los míos y me da un beso.
Le doy un abrazo de koala sin detener el beso y mi coño toca su pene por encima de la tela, sintiendo como de erecto se encuentra.
Nunca estuve tan así con Sergio cuando éramos novios, algunas veces sí quería obligarme a que tuviéramos sexo pero yo me negaba o las chicas aparecían gracias a que las llamaba.
Hundo mis manos en su sedoso cabello, ella pone sus manos en mi cintura sin tocar nada todavía y eso significa que me respeta y no quiere incomodarme... me encanta.
Me sienta en la encimera, se acomoda entre mis piernas y coloco mis piernas alrededor de su espalda.
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Aun con los ojos cerrados veo un flash y nos separamos rápidamente viendo a las chicas y a Vera mirando su teléfono.
-La tengo perras! -dice emocionada.
-Casi tienen sexo en la encimera por dios -dice Eva entrando en la cocina y veo como Renata se hace la señal de la cruz.
-Por dios, no sean exageradas, está todo controlado... -dice Valentina, todavía entre mis piernas (no piensen mal).
-Díselo a tu erección hermanita... -dice Eva señalando la entrepierna de Valentina y esta se la tapa rápidamente con las manos, pero me dio tiempo a ver que no es nada pequeño.
-Quiero ver! -dice Vera y la miro seria- No te pongas celosa Juli -dice restándole importancia.
-Voy al baño -susurra Valentina y sale corriendo.
-Como besa? -pregunta Marcela, enseguida que Valentina sale de la cocina.
-Eso es confidencial -me bajo de la encimera de un salto ante sus miradas curiosas- Mis labios están sellados -me siento en una silla y pongo mis brazos en la mesa.
-Ya se encarga Valentina de abrírtelos -dice Carlota y abro los ojos.
-Carlota! -le digo y se encoge de hombros.
-Es verdad! -las chicas se ríen y ruedo los ojos.
-Vamos dinos Juli... -dice Renata y la miro sorprendida.
-Tú también? -le pregunto y asiente- Bien, besa demasiado rico... -dan un gritito asustándome.
-Se han dado un beso francés? -susurra Vera esperanzada.
-Si... -susurro y dan otro grito de emoción- Tienen que gritar? -asienten.
