IV

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Luke Chiva-aree había pensado que las palabras del joven Win era una broma, pero después de que su hijo le explicara la situación supo que el muchacho estaba hablando muy en serio. En cuatrocientos ochenta y dos años de existencia, nunca... jamás... ni un solo mortal le había solicitado tan descabellada plegaria. ¿Qué acaso Metawin Opas-iamkajorn no conocía las leyendas populares de los de su especie? Pues aunque la mayoría no eran verdad, algunas sí eran lo suficientemente aterradoras para asustar a los mortales.

Pero ese chico parecía desesperado por ser como ellos. Y aunque entendía que todo aquello era para curar su enfermedad y de paso realizar el montón de cosas que se había perdido por tener que estar postrado en cama, pudo darse cuenta de que su hijo había logrado cautivarlo de una forma muy atípica. Era consciente de que su pequeño "Bright", sobrenombre dado durante sus primeros meses como "neófito", era capaz de encantar y seducir a cualquiera: mortales, seres vivos, y vampiros. Pero el brillo en los ojos de aquel niño que no dejaba de observarlo era uno que no había visto nunca en un mortal.

(Neófito: Persona que se ha adherido recientemente a una causa, una ideología, una colectividad, un partido político, etc.)

- ¡Me parece una idea maravillosa! - se puso de pie y junto sus manos cerca del pecho aprobando la transformación de Win.

- ¿Qué has dicho? - preguntó Bright. Sabía que Luke era impredecible pero no esperaba que aceptara a la primera y tan fácilmente, es más, deseaba con todas sus fuerzas que no aceptara nunca aquella conversión.

- Se lo agradezco mucho señor Chiva-aree - a Win le traicionaron sus lágrimas al escuchar la respuesta del rey de los vampiros.

- Llámame Luke querido, después de todo pronto serás parte de nuestra familia.

- Esto es lo más insensato que has hecho en años - alegó Bright.

- Querido Bright... - susurró su padre con singular alegría.

- ¿Bright? - la sola mención del sobrenombre de aquel atractivo vampiro llenó a Win de una emoción que no pudo descifrar de inmediato pero el apodo del vampiro más guapo de todos, según él, le gustaba mucho.

- Tanto tiempo esperando un compañero para ti y por fin ha llegado a nosotros - Luke ignoró la pregunta de Win.

- No estarás hablando en serio - expresó Bright con una mezcla de confusión y enojo.

- Jamás he hablado tan en serio como ahora Bright...

Un silencio ensordecedor se hizo presente en aquella sala. La agitada respiración de Bright Vachirawit Chiva-aree fue lo único que interrumpía dicha calma. Era evidente su rotundo desacuerdo en la transformación de "Winnie" y dicha disconformidad aumentó cuando su padre le dijo que ese chico sería su compañero. ¡No, no y no! se negaba a aceptarlo, prefería mil veces que lo convirtiera en cenizas que someterse a la voluntad que Luke tenía designada para él.

Contrario a los sentimientos de Bright, Win era un manojo de nervios, entusiasmo y felicidad. No todos los días se recibía la noticia de que dejaría de ser un mortal para transformarse en una criatura perpetua e infinita y todo para de alguna manera salvar su vida.

Dejaría las incómodas y cansadas visitas al hospital, podría salir de casa sin la preocupación de sentirse enfermo o fatigado en cualquier momento. Conocería el mundo y... a Bright...

- No quiero un compañero – alegó Bright.

- No te estoy preguntando querido — respondió su padre con cordialidad. No iba a iniciar una pelea con su primogénito delante de las visitas.

- Señor Luke - Win llamó su atención - yo me comprometí con el señor Chiva-aree en ser su leal sirviente a cambio de que me diera la oportunidad de no morir, al menos no aún, y pienso cumplir mi palabra.

Carmesí - BrightWin [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora