LOVEDTALE: Las Semillas De La Muerte

Primera Parte

Nada, lo único a comentar es que en las aclaraciónes explico algo importante sobre la estructura de la historia, así que si la saltaron, léanla.
Disfruten.

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PROLOGO

Pueblo de Snowdin
15 de Junio, 16:04

P.O.V GENERAL

Podemos observar a los protagonistas de este universo alternativo, Chans y Sara, sentados a la orilla del río. Veían aburridos como pasaba el agua fría debajo de sus pies. Realmente no tenían nada que hacer, nada nuevo con que jugar, nada nuevo que ver, nadie con quien hablar... Nada que matar.

Sans se acercaba a lo lejos, aunque haya estado viviendo en ese lugar por tanto tiempo, viendo siempre las mismas cosas, todavia sentía nostalgia, principalmente por la desaparición de casi todo ser vivo en el subsuelos, todo gracias a ella, todo gracias a su esposa, por así llamarla.
Nunca estuvo enamorado de ella y sentía que ella tampoco, él esqueleto creía que eso que ella sentía era únicamente una enfermiza obsesión.

A pesar de todo, Sans no negaba que sentía cierto cariño hacia Chara, pero todo ese apreció venía de dos cosas. Primero, lo mucho que le recordaba físicamente a su antiguo amor, Frisk, una mujer que le demostró el mejor lado del ser humano... Aunque ella haya provocado todo eso. La segunda cosa era sus nuevos luces en su vida, sus nuevas esperanza... Sus hijos. Podrían parecerse mucho a Chara, pero eso no quita que Chans y Sara sean su hijos y por eso mismo no los podria odiar nunca, y como su padre, los educaria para que sean los más buenos posibles.

Sans después de reflexionar un poco sobre toda su vida desde el comienzo del gran genocidio, finalmente llegó hasta sus hijos, ellos estaban sentados a la orilla del río, ese mismo río donde alguna vez había un barquero desconocido y la única conexión con hotland actualmente. Sans noto el aburrimiento de sus hijos, era razonable, los únicos seres vivos que llegaban a ver diariamente eran el mismo Sans y Chara, y de vez en cuando a la doctora Alphys o Grillby en su bar. Lógicamente no hay muchas cosas que hacer en el día a día, Sans se acercó lentamente a sus hijos y habló.

- Heya, ¿Qué pasa? Los veo CHANS-ados -Soltó un pequeño chiste referenciando a su hijo mayor, ambos niños soltaron una pequeña carcajada seca, aun que no duraron mucho por lo poco original que era aquell dichoso juego de palabras.

- Ha... Sabes que más que cansados estamos aburridos. -Chans hablo para dar un pequeño suspiro de pesadez y siguió hablando- Desde hace tiempo no hay nada nuevo que hacer, no tenemos ganas de entrenar, ya vimos mas de una decena de veces las únicas series que tenemos disponibles, y ni hablar de los videojuegos. Sabes, creo que necesitamos algo nuevo. -Hablo el hijo mayor de la genocida con un rostro que demostraba completo desinterés, se quedó callado un momento y volteo a ver a su hermana.- ¿Y tu? ¿Alguna idea de que hacer Hermanita? -Termino de hablar haciendole una pregunta a Sarah, la menor de la familia Skeleton. Esta lo pensó un poco mientras era observada por ambos hombres y se le ocurrió algo.

- ¿Cómo se conocieron tu y mamá? -Si, la típica pregunta que le hace un hijo a algunos de sus padres en algún momento de sus vidas. Y si, Sara estaba tan desesperada y se queria entretener con cualquier cosa medianamente nueva, aun que a su hermano no le emociónaba nada la idea, por el contrario, su rostro ahora tenía una cara de desagrado total.

- ¿Se te podría haber ocurrido una idea más aburrida? De todas las cosas que se te podía ocurrir ¿elijes eso? -Incluso sabiendo sobre la condición de aislamiento que tenían de la mayoría de monstruos, del masivo genocidio provocado por su madre y el extremo odio de todas las criaturas a su familia, Chans pensaba que sería un historia muy Cursie o algo del estilo, sin pensar mucho en que ambas historias estarían relacionadas.