Gay Panic ─ Yiren & Aisha (Everglow)◞♥︎

» siete

Luego de que Yoorim y Yiren se hubiesen quedado solas en aquel centro comercial que se supone que estarían con sus amigas, decidieron pasear y ver uno que otro local del lugar, llamando la atención uno en específico que vendía álbumes y claro, estaba el grupo favorito de ambas.

─¿Entramos a esta tienda, cariño?─ dijo Yoorim agarrando la mano de Yiren.

─C-claro...

─Está mi grupo favorito ahí─ dijo la mayor señalando un álbum de blackpink.

─Yoorim─ dijo la menor girando del brazo de la otra para llamar su atención.

─¿Si, cielo?─ dijo poniéndole toda su atención.

─Uh... Blackpink son unas de mis grupos favoritos también─ dijo sonrojándose bastante.

─¿D-de verdad?─ dijo la otra bastante emocionada.

─S-si...

─Bien entonces, ¿quieres casarte conmigo?─ Sonrió.

─Yoorim no somos novias...

─Pero lo seremos─ susurró.

─¿Qué dijiste?

─Nada─ dijo mientras acariciaba la mejilla de la menor.

─Bueno ya que sabes que mi grupo favorito también es Blackpink...

─¿Quieres un álbum de ellas?

─¿Q-qué? No, no puedo recibir eso...

─Oh vamos, así tal vez pueda pedirte de una vez que seamos novias─ dijo Yoorim haciendo su mejor intento por susurrar lo último, lográndolo claro.

─Uh... ¿Quién es tu bias?─ dijo la menor intentando cambiar el tema.

─Jennie, ¿y la tuya?

─Lisa

Ambas chicas sonrieron, tal vez había sido una gran coincidencia que tuvieran el mismo grupo favorito y que también les gustaba el mismo álbum al parecer, porque tal y como lo había dicho Yoorim le iba a comprar el álbum que quisiera a Yiren y esta decidió The Álbum.

─Quiero este─ dijo Yiren avergonzada, puesto que realmente le daba algo de pena que Yoorim le comprara un álbum de su grupo favorito y más aún que podía elegir cualquiera.

─¿The Álbum? Ese es mi álbum favorito─ sonrió.

─¡No! ¿En serio?─ gritó Yiren dando pequeños saltitos pareciendo una niñita emocionada.

─Sip, es mi favorito.

Bueno, si la mente de Yiren no fallaba entonces sentía que tenía los mismos gustos de la chica que le gustaba y pensaba que era su alma gemela.

La mente de Yoorim tenía los mismos pensamientos que la de la menor, realmente ambas sentían que ellas eran almas gemelas que debían estar juntas quisieran o no.

─Bien, vamos a la caja a pagar tu álbum, pequeña─ sonrió.

─¡Sí!─ gritó sonrojada.

Luego de haber comprado el álbum, las dos chicas decidieron pasar por una tienda de peluches, pues la mayor sabía que a Yiren le encantaba coleccionar peluches y quería regalarle uno.

─Esta vez voy a decidir por ti─ dijo la chica tocando suavemente la naricita de la menor.

─Está bien─ sonrió ─Te esperar afuera, no quiero dañar la sorpresa─ rió.

─Bien, espérame aquí sentadita─ sonrió la mayor y entró a aquella tienda de peluches.

Realmente le fue complicado escoger uno, todos eran preciosos y tan solo imaginar a Yiren abrazando a alguno de ellos para dormir se le hacía la imagen más tierna de todas.

Decidió llevar un perrito que para Heo fue el más tierno de todos, pagó por él y le dijo al chico que la estaba atendiendo que por favor lo empacara con una bolsa de regalo; Yoorim tenía pensado dárselo para pedirle ser su novia porque ya después de analizarlo tanto había tomado la decisión de que era hora, de que luego de haberle provocado tantos gay panic a la pobre chica, pedirle ser su novia.

Yiren se veía demasiado tierna ahí sentadita, sin hacer absolutamente nada, porque vamos siendo sinceres, Yiren se veía hasta tierna sin hacer nada y se veía aún más tierno si hacía aegyo o si tenía a un peluches a su lado; la menor sonrió cuando vio Yoorim con una bolsa de regalo y también con la bolsa de la tienda donde habían comprado el álbum.

─Bien, vámonos pastelito─ sonrió la mayor agarrando la mano de la otra mientras la llevaba a una parte donde no estuviese tanta gente, era hora de llevar a cabo su pequeño plan.

─¿A dónde iremos, Yoorim?

─Sólo sígueme, prometo que no te haré nada malo.

─Ajá, a veces me das miedito porque puedes llegar a provocar un gay panic así de la nada.

─Lo sé, pero confía en mí esta vez.

─Está bien, lo haré.

Las dos chicas encontraron un lugar donde había muy poca gente o hasta se podría decir que sólo estaban ellas dos ahí, era una pequeña azotea que era bastante hermosa y se les hacía un poco raro que estuviese sola porque normalmente habían bastantes personas allí, pero igualmente no le tomaron importancia.

El momento había llegado y Yoorim debía preguntar lo que había estado rondando en sus pensamientos en todo ese tiempo que estuvieron juntas.

─Te traje aquí porque quiero preguntarte algo.

─C-claro, ¿Qué sucede?

─Yiren, sé que todo este tiempo te he causado muchísimos gay panic pero creo que con el tiempo me he dado cuenta de que me flechaste aquella vez que Serim nos presentó y sentía la necesidad de provocarte aquellas cosas, primero te pido perdón por eso─ Sonrió ─Ahora... Siento que está saliendo mal pero... Ya no quiero que seamos solamente amigas, me gustaría pedirte si...─ tomó una pausa─ ¿Quisieras ser mi novia?

─Y-yoorim yo...

─¿Qué dices?

─Sí, sí quiero─ dijo la menor besando aquellos labios que siempre había querido probar.

Aquel beso hizo que el tiempo se detuviera porque ahora, una pareja destinada estaba junta y se amarían como nunca lo habían hecho antes con otra persona, porque ellas dos eran como almas gemelas.