Una ciudad misteriosa

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Leila y Jessica acababan de mudarse de España a Madrid a Lost, un pueblo misterioso que según sus padres era tranquilo y podía tener un buen negocio así que se fueron.

Cuando llegaron, se pararon frente a una cabaña, la cabaña no se veía bien. Leila miró a su padre y dijo

Leila: Papá, ¿estás seguro de que este lugar es el indicado? Se ve bien. Creo que puedes mirarlo, no lo es.

Papá de Leila: Sabes que esta es tu oportunidad para socializar, no estar solo con Jess, mira hija, al menos Jess está contigo.

Leila: Tienes razón, le daré una pequeña oportunidad. 

Por otro lado, Jess estaba un poco feliz, por lo general es ella quien le da positividad, siempre en los primeros días que pasaron recorriendo el pueblo.                                                                                         

Jess: Podríamos tener una historia como Crepúsculo, solo sabes que no va a ser un triángulo amoroso, sería una foto de amor, tú te quedas con el vampiro y yo con el lobo.

Leila: Sabes que tal vez no fueron amables, totales agresivos, no niego que pude ver chicos guapos, y también me ayudarían a olvidar a Ethan.

Jess: Mira, haré todo lo posible para que te guste este lugar, ¿de acuerdo?

Leila: Bueno, si la semana que viene vamos a la maldita escuela

Jess: Idioma

Leila: Bueno, de todos modos, no vas a evitar mi sarcasmo y por cierto, vete al infierno.

Jess: Vas a hacer esto (empieza a perseguirla)

Leila: Maldita sea

 Las semanas pasaban Jess veía el lugar cada vez más positivo y Leila lo odiaba cada vez más de todos modos.

 Un día antes de ir a la escuela Leila estaba caminando en el bosque , vio a un niño acostado con una sudadera, primero la asustó después de que se acercó a ella

Dylan: Perdón por asustarte, mi nombre es Dylan

Leila: Bueno, Dylan, ¿qué hacías en el bosque? 

Dylan caminando relajándose por cierto eres nueva verdad como te llamas

Leila: Leila espero verte en la escuela o ya la abandonaste

Dylan. Me veras en la escuela

Dylan escucha algo pero leila no lo escucha                         

Leila: Dylan estas bien 

Dylan: Sí ... me voy, fue un gusto conocerte

 Leila: Bueno, es extraño

 Entonces Leila fue a la cabaña y tomó su cuaderno y comenzó a dibujar Leila era una gran fanática del dibujo y la lectura para una chica así A todos les parecía extraño que le gustara hacer eso, en cambio, a Jess le gustaba jugar y leer

Jess: ¿Qué dibujas?

Leila: esto no es nada

Leila: esto no es nada

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Jess: Conociste a alguien

Leila: Si un chico era lindo, un poco raro.

Jess: Bueno, no he tenido suerte, vemos películas mañana vamos a la escuela

 así que se quedará toda la noche viendo películas pero Leila todavía se preguntaba por qué Dylan se escapó, algo andaba mal o era ella o esos pensamientos sobre ella. la estaban volviendo loca

El amor hoy en dia espera esto es amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora