Mi Arrogante C.E.O. (SAMPLE)

Capítulo 2- Christopher

NOTA: Si ya leíste este capítulo en Después de ti, puedes continuar al siguiente.

Retrospectiva Christopher:

He pasado mi vida, mirando cómo las cosas que creías se vuelven mentira, la razón por la cual no quería tener hijos en primer lugar, era para evitar que pasaran por todo este dolor, perder lo que más quieres, ver cómo las personas de este mundo se vuelven cada día más perversas.

Lorena, fue mi primer amor, estuvo conmigo por 2 años, puedo decir que la amaba con todo mi ser, cuando desapareció por 4 meses, me desespere la busqué sin cesar, hasta que un día apareció por sí sola, acusando a Anthony, mi mejor amigo de que la había violado y que él era el padre de su bebé. Lo peor es que le creí, me mostró un video de ambos teniendo relaciones, me fui en contra de mi él e inicie mi propia guerra, que terminó en mi propia miseria. al fin y al cabo él se acostó con ella.

Anthony, con los meses logró desenmascarar, no solo eso me demostró lo mentirosa que era, sino el teatro que armó para culpar a mi amigo de su embarazo, ambos terminaron su disputa luego que nació el bebé. Lore resultó ser una trepadora, una arribista que quería que alguien le resolviera su vida, usar una criatura tan pequeña para sus deseos egoístas es algo muy bajo para una mujer, como sus planes no funcionaron, ella abandonó a su propia hija.

Luego conocí a Alana, ella era como un ángel, desde el momento que mis ojos la vieron por primera vez, no pude dejarla sola. Ella no lo sabe, pero en ese momento me salvó de mi propio infierno y alegró mis días.

Ava, era su amiga, nunca quiso compartir su contacto telefónico conmigo, mi hermana alegaba que yo no podía salir con sus amigas, que en cuanto terminara con ellas, no iba a tener con quién estudiar. Así que esperé, aguardé el momento exacto, fue una tarde en casa de mis padres, en lo que la vi sola aproveche, y le pedí su número, la invite a salir y como ella no quería tener problemas con mi hermana se negó muchas veces, me dijo que no, que mi hermana le había dicho que no podía acercarse a mí.

La convencí de salir en secreto, total era una salida; no tenía nada que perder, estuvimos saliendo sin decirle nada a nadie por 4 meses, hasta hacerlo oficial, mi familia estaba feliz, La reacción de mi hermana fue de lo peor, estaba hecha una furia, pasó semanas sin hablarnos.

Todos se portaban bien al frente de Alana, la única que siempre hacía comentarios despectivos de mi novia era Ava, de una forma inteligente mencionaba cosas que me molestaban, intrigas y rumores, mi hermana sabe las cosas que me molestaban y trataba de transgiversar la verdad para hacerla quedar mal. En tantas oportunidades le creí, ahora me arrepiento tanto, nunca debí escucharla.

El día que nació Hanna, me llamó Ava, diciendo que Alana iba a la casa de mis padres, que había continuado con el embarazo, que les contó a mis padres y los manipuló para que le creyeran. No puedo creer lo idiota que fui, la maestra de la manipulación era ella y yo era su victima voluntaria.

Hace unos meses mi mamá, después de tanto tiempo decidió abrirme los ojos, ella me dijo lo que mi propia hermana hacía. La confronte y su respuesta fue tan idiota, diciendo que ella quería lo mejor para mí y que Alana no era una buena mujer. Su cara me dió todas las respuestas, ella solo le tenía envidia y celos.

Luego de que Cassie perdiera el bebé, me hice la promesa de esperarla y respetarla, si el destino me daba la oportunidad de regresar con mi Lana, de que vuelva a corresponder mi amor, no la dejaría ir nunca más.

Las semanas pasan, pero nada de eso ocurre, estoy esperando a Hanna, hoy la voy a ver después de sus vacaciones:

—Papi, papi ¿cómo estás? te extrañe muchísimo.

—¡Hola princesa! yo tambien te extrañe, quieres contarme como te fue —La abrazo como si mi vida dependiera de ese abrazo.

—Si papi, estoy muy feliz, Luke y mi mami se van a casar. —Puedo sentir como mi cara palidece, drenando toda la sangre. Me duele escuchar que ella siguió con su vida, mientras yo estoy atascado, sin poderla olvidar.

¿Por qué no tuvo más paciencia? ¿Por qué se le acabó el amor? Yo sé que es mi culpa, pero aceptando mis errores, no hará que el dolor se quite de mi pecho.

3 meses después (presente)

Hoy es el matrimonio de Alana y Luke, estoy desde afuera viendo como todos llenan el jardín, la decoración es simple y ella sale con un vestido de princesa, mis ojos se llenan de lágrimas, ella no deja de mirar a Lucas, "la perdí" dice mi corazón abatido.

Quiero pararme al frente y detener este matrimonio, lo voy hacer, esta es mi última oportunidad para recuperar a la mujer que amo, empiezo a caminar con dirección a la entrada y recibo una llamada de un número desconocido:

—Hermano no me cortes, por favor no. Estoy en casa con mi mamá, sabemos donde estás, por favor te lo pido no lo hagas. —está suplicando que la escuche— .Hace unos días vi a Alana y está embarazada; no le arruines el matrimonio, te prometo que no es mentira.

—Pon a mi mamá al teléfono. —escuchó vacilar entre las voces de fondo y ella termina diciendo:

—Mamá, Chris quiere hablar contigo. —La voz de mi mamá ahora es la que habla.

—Hijo, lo que dice tu hermana es verdad, regresa ya no le hagas más daño a Alana, piensa en qué va pensar tu hija si te ve así. —No espere a que digan otra cosa, corte la llamada.

Camine hasta donde deje el auto que alquile, y me fui directo a Roma, necesito un trago y con suerte una mujer para desquitarme la furia que tengo.

Este es el tercer trago que me sirve el bartender, mi rabia está cesando, en unas mesas están unas chicas que no dejan de verme, son bastante jóvenes, veo como la morena camina a mi mesa, se acerca y trata de hablar italiano:

—Ciao sexy! come va? —Ahora que la veo, la sexy es ella, tiene unas curvas, está con un vestido que muestra su escote, es suficiente para sentirme atraído.

Tiene una cara muy bonita, sus facciones son de latina y lo que más me gusta son sus ojos, son negros como el azabache, su actitud es risueña, no es Italiana, su acento la descubrió, decido responderle en español.

—¡Hola belleza! bien, ¿y tú? —Su mirada se vuelve tentadora, y mi miembro quiere saltar, solo con verla.

—Hablas español, que bien... Yo aquí pensando que en mi última noche podría ligarme un Italiano. —En su voz no hay una pizca de pudor.

—Tienes chance, la noche es joven, puedes levantarte y buscar a alguno. —La verdad es que no quiero que se levante, pero su comentario me molestó de sobremanera.

—No lo creo, no he tenido suerte las últimas dos semanas, mejor me quedo aquí contigo hasta que mi amiga se vaya con su acompañante. —Volteo a verla y está plácidamente hablando con el bartender que me atendió.

—¿Qué edad tienes? —Su actitud es de una niña mimada.

— 22 años, ¿y tú? Mejor no respondas, se ve que eres mayorcito. —Me está diciendo viejo, no evitó presionar mis labios.

—31 años, esa es mi edad y no me estes diciendo mayorcito.

—¡Como sea! —responde como aburrida— ¿Quieres bailar?

—¡Vamos! —Le llevó a la pista de baile, tomándole de la cintura.

Si ella pensaba que por ser mayor, no iba a saber como moverme, pues estaba equivocada. Su cuerpo se mueve sensualmente y choca en el mío, yo sé que ella siente lo duro que estoy solo al verla bailar. Su actitud es provocadora, paso mis manos por su cintura, mientras veo sus caderas moverse, aquí estoy rozando sus nalgas con mi erección y estoy seguro de que puede sentirme, Al voltear posa sus manos en mi pecho, y me mira con sus ojos azabache, mi boca se acerca a la de ella y siento sus labios que chocan con los míos, su cuerpo se tensiona. ¡Vamos! baby girl, ¿Ahora me tienes miedo?

—¿Quieres ir a otro lado más privado? —Le susurro al oído.

—Sssii...