𝐗𝐈; 𝗰𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝗼𝗻𝗰𝗲

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No sería nada raro si tú, con lo tímida y linda que eres comienzas a llevarte bien conmigo luego de insistir tanto y ser tan empalagoso. Después de todo, así fue como sucedió. ¡Ah! ¡Antes de que lo olvide! En caso de que la gente comenzará a sospechar de nuestra alianza podríamos hacerles creer que estamos saliendo, Jaja ¡ya que después de todo acabará siendo real, porque a mí me gustas mucho y no me rendiré fácil! »

En un principio, Kagami creyó que era bastante rebuscado todo y si que lo era, pero bastaba para engañar a las personas incrédulas que tenían como compañeros y a sus profesores desinteresados, pero ¿y koro-sensei? El ser extraño en ningún momento bajo la guardia con el par, aún si parecían ser en ocasiones inofensivos y si los había atrapado intercambiando miradas y sonrisas en su clase no era nada de otro mundo, solo dos jóvenes hormonales que comenzaban a enamorarse.

Y era eso, que empezaban a enamorarse, lo más aterrador ahí.

El genio que amaba golpear matones, hacer bromas pesadas y que tenía una enorme sed de sangre, parecía ser el más necesitado de la callada y calculadora, prodigio e inventora, Kagami Chisei. Y, sí juntabas las habilidades de ambos tenías por excelencia a un dúo bastante fuerte que podría ser el que lo llevará al camino de la muerte de muchas maneras.

Koro-sensei había comparado los ataques efectivos de ambos, y la coincidencia más destacada, fue que las formas listas y creativas en las que pudieron esconder (y transformar) los cuchillos anti-sensei. Ambos eran agresivos, calmados al atacar, bastante inteligentes y buenos actuando. Un reto, si tan solo fuese un humano otra vez, pero ahora que ya había dejado de serlo podría decir que lo encontraba bastante adorable.

Karma la primera vez que lo saludo,había cortado y adherido a su mano los cuchillos, también había escondido uno dentro de la manga de su camiseta. Un chico creativo, pero que tuvo una aplastante derrota en comparación del daño que causó Kagami quien le había podido arrancar más de dos tentáculos pequeños en un solo ataque, superando así al gobierno y al pequeño demonio rojo, Karma.

Un ataque que le mostró lo superior que era Kagami y que le planteó la duda en si había un infiltrado del gobierno como estudiante, esa capacidad que tenía para pasar desapercibida y camuflajearse con el entorno era algo que sin duda alguna no era normal. Ese par, Karma Akabane y Kagami Chisei, aunque está última lo negase, eran realmente parecidos y esa sed de sangre dominaba el cuerpo de ambos; el par quería ver sufrir a alguien, y ese alguien había sido Irina Jelavić, pues antes habían convencido a Nagisa para que no revelará información tan importante a su profesora, luego de convencerlo de que también era una enemiga.

Curiosamente, luego de que Kagami hubiera flaqueado y bajado la guardia, Karma utilizó aquello para hacerle creer que lo que hacía iba para ella, que el hacerle esa mala jugada a su maestra, era solo porque a ella, Kagami, tenía un odio inmenso por las formas de aquella asesina para atacar y hacer aliados; curioso pero que confirmaba un poco su teoría. Si Kagami Chisei estaba manipulandolo de una manera tan pasiva y sutil entonces su nivel debía de ser mejor que el de la mujer, algo extraño considerando que ella era una asesina profesional y Kagami solo una simple chica "tímida" .

Escondía algo, lo sabía.

Con solo observarla cuando observaba junto a él la luna y buscaba evitar mirarle a los ojos, cuando su tartamudeo se escuchaba demasiado fingido o cuando veía acciones que perdían credulidad, luego de mostrar actitudes violentas ────como el día que le lanzó un cuchillo o atacó a Koro-sensei────. Sin duda alguna él, seguía creyendo que la chica a su lado, con la que fingía estar teniendo una "cita", era más que una simple chica tímida.

𓏲 𝐑𝐔𝐍𝐀𝐖𝐀𝐘;Karma AkabaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora