Saisons [Minimo/Minibin]

Le début

Todos piensan que el inicio de las cosas es la primavera, por que es cuando las flores nacen para morir en el otoño. Yo siempre creí que el inicio de todo es el invierno. Por que fue en esa estación del año que te conocí, en mi estación del año favorita.

Recuerdo un invierno; tu estabas en la entrada del colegio, el frio era tanto que calaba los huesos, frotabas tus manos con la esperanza que eso te ayudara a calentarte un poco, pero no fue suficiente, tal vez que te quede viendo por mucho tiempo pues saliste corriendo para esconderte detrás de Eunsang cuando intente acercarme para ofrecerte mis guantes. 

Eras tan hermoso que hacía que mi corazón fuera lo único que no se congelaría en ese invierno del  2009  ese  en el cual yo tenía 15 y tu 12 , sabía que  eras de primer grado y yo de tercero y sabía muy bien que nunca te acercarías a mi, no lo harías por que yo no te agradaba. Ya no más.

Habías llegado a la cuidad también en un invierno;  pero fue cuando tenias cinco y yo ocho años  que me empezabas  buscar por que creías que era un chico cool  pero yo siempre te apartaba, no era por que no me agradara jugar contigo en la nieve en invierno, entre la hierva en primavera, con globos de agua en el verano ni entre las hojas secas de los arboles en el otoño,  era porque mis amigos seguro harían que te calleras o que te lastimaras. No me hubiera perdonado que tu te lastimaras por mi culpa.

Así que siempre te dije que eras una molestia, pero nunca lo pensé realmente.  

Ese día cuando tenías ocho  y yo once años  jugaba en la cancha cerca de nuestro vecindario; era verano y el calor azotaba a más no poder, habían dicho en la radio que era una de las peores sequias en la historia y que recomendaban a la población no exponerse a la radiación solar si no era estrictamente necesario.  Me dijiste que era un terco y que me acusarías con mi mamá si no me metía a mi casa y yo te conteste un " ya deja de molestar Kang"  te fuiste dando pisadas resonantes con tus tenis rojos, que apostaba te habías puesto por que querías jugar con nosotros. 

Pero lo que realmente hiciste fue pedirle a tu madre que te ayudara a preparar limonada, volviste corriendo con una gorra y nos gritaste para que fuéramos a tu casa. Estábamos sedientos y salimos corriendo detrás tuyo, esa fue la primera vez que te vi  reír hasta que tu pequeña pancita doliera. Entonces tu mamá me hizo prometer que te cuidaría en la escuela, pero eso lo llevaba haciendo desde el primer día.  

También recuerdo el otoño en que Hyeongjun llegó a tu vida y con él venia también el molesto de Eunsang, siempre detrás de ti, ese fue el único momento en que las cosas se invirtieron, ya no eras tu el que me buscaba era yo quien iba detrás de ti,  eso fue cuando recién llegabas al vecindario, tal vez fue al año de tu llegada, sí, creo que llegaste a los tres años y eras un niño escandaloso que no dejaba de gritar por todo, pero cuando cumpliste los cuatro tus padres te dejaron salir a jugar con todos los niños de la colonia, Eunsang y Hyeongjun fueron a los que mis amigos ignoraron por ser pequeños, yo insistí en que debíamos jugar con ellos, pero también me ignoraron, ese fue el primer otoño que pasamos juntos, ¿Lo recuerdas? 

 Fue muy extraño por que yo tenía siete años y estaba jugando con bebés que se podían caer y lastimar, tenia miedo de que cualquiera de ustedes tres se muriera de la risa y que yo fuera a la cárcel por no cuidarlos. Eras tu con tu risa tímida al ver que Hyeongjun era demasiado alocado y tan lleno de energía el que me hizo quedarme más tiempo con ustedes a pesar  de que    realmente odiaba jugar a las escondidas, siempre intenté encontrarte primero a ti, pero fallaba sin importar cuanto me esforzara, eras tan escurridizo y pequeño, eras más pequeño que Hyeongjun y que Eunsang. Pero tu me encontrabas tan pronto empezabas a buscarnos. Decías que dejara de hacerte ganar por que no era divertido pero nunca te dejé ganar, cuando fue el turno de Eunsang salimos corriendo sin darnos cuenta que habíamos ido por la misma dirección. Nos escondimos entre un montón de hojas secas del patio de los señores Lee, Eunsang se rindió al no encontrarnos y tu tomaste mi mano por que te daba miedo el perro de los Yoo.  

Sabía desde ese momento que debía cuidarte y te lo prometí al crecer. 

 La primavera es tu estación favorita del año por que amas las flores de cerezo, cuando tenias seis y yo nueve te gustaba que yo te llevara a la escuela en mi bicicleta, decías que era por que no tenías quien te llevara y no te gustaba caminar solo, pero después Hyeongjun me dijo que si podía llevarlo a él también, no entendí al principio y él pareció entenderlo al parecer los tres caminaban juntos pero a ti te agradaba más la idea de estar conmigo, Hyeongjun me dijo que les contabas que era yo el que se ofrecía a llevarte; reí en mis adentros y termine por negarme a su petición diciéndole que te enojarías conmigo si no te llevaba, que eras un flojo y por eso te ayudaba a llegar a la escuela.

Pero tu te enojaste conmigo por llamarte flojo, tenias seis años y tu insulto más fuerte era tonto; así me llamaste. Fue muy tierno ver como tu rostro se arrugaba al pronunciar aquellas palabras:" Eres un tonto Koo"  ¡Por dios! sigue dándome tanta ternura recordar al Minhee de seis años decir eso. Te pedí perdón y te lleve a comer helado en tu parque favorito ese donde podías ver el rio Han decorado con las flores de cerezo que tanto te gustan. 

"Eres mi tonto favorito Koo, perdón por enojarme contigo" 

Soy tu tonto favorito eso compensaba todos los berrinches del futuro.

Siempre te cuide de la manera que yo creí correcta, siempre alejándote de mi, hoy por hoy me doy cuenta que en realidad siempre fuiste tu el que cuido de mi, y que para mi tu, Kang Minhee, eres el chico de las cuatro estaciones, por que te vi crecer como una bella flor en primavera, te vi disfrutar de la vida sin preocupaciones como los días de verano, te vi quedarte sin fuerzas para continuar cual  hoja en el otoño, y te vi preparándote para iniciar de nuevo como los animales que invernan en el invierno.