Capítulo 4: ¿Qué viste en ella?

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"¿Qué es lo que sucedió?"

"Esos dos dijeron que el otro día fueron perseguidos por policías en cubierto, y como tenían miedo de que pudieran encontrar los detalles, simplemente abandonaron el equipo y huyeron."

"¿Qué tipo de detalles?"

"Eh... que eran solo reporteros falsos..."

"¿Quién dijo que solo los reporteros tiene permitido portar una cámara de video?"

"Pero estaban usando tarjetas de identificación falsas sobre su pecho..."

"Entonces déjame preguntarte esto, ¿Cómo es que cedieron cuenta de que estaban siendo seguidos por la policía?"

"La policía no dudo en perseguirlos, y ellos entraron en pánico, así que..."

"¿Los persiguieron? Derek estaba furioso, tensando su cuerpo de leopardo sobre el sofá. "¿contrataste a un montón de cretinos? ¿Y la policía? Ellos eran ladrones y simplemente paso que querían llamarles la atención para robarles."

"¿La-la-ladrones?... ¡No es posible que eso pudiera pasar!"

"¿No es posible?" el menor cerró sus ojos e inhalo. "Así que responde, ¿en dónde está el equipo ahora? Después de que esos dos corrieran, ¿en dónde dejaron el equipo?"

La persona que estaba siendo interrogada no se atrevió a abrir la boca.

Derek se detuvo y agito su mano. "Vete ahora."
La casa se sumió en silencio y Derek presiono el puente de su nariz, repasando lo que había pasado ayer con el vestido de novia. Su mente voló a como se sintió al estar sentado en un trono lleno de esperanza, y entonces como todo siguió hasta el final.

Pensándolo bien había sido de mesiado ingenuo. Incluso si el dúo hubiera llegado a escena y logra interrumpir la boda, ¿Cómo habrían cambiado las consecuencias?

Nada, no habría pasado nada.

Al final, el padre que siempre había admirado simplemente tomaría la mano de otra mujer y volvería sobre sus pasos hacia el recinto de bodas. Y su mamá, por otra parte, aun estaría en la frialdad de su tumba. Ella seguiría muerta por culpa de su esposo, y su última sonrisa en su lecho de muerte seguiría sin cambio.

El pelinegro se quedó solo junto a la ventana contemplándola. Mamá, te extraño.

"Derek, soy tu tía. ¿Los preparativos ya están hechos? La estación de televisión está esperando. Apresúrate y envíame las cosas que necesito."

"Se ha ido."

"¿Qué se ha ido?"

"Hum, te enviare dos nuevas cintas tan pronto sea posible."

Derek colgó, y al mismo tiempo, su padre y madrastra llegaron. Esta podría ser la primera cena que compartirán como familia.

El menor comía con la cabeza agachada, pensando en sus cosas y sin hablar en todo el tiempo que transcurrió.

Alexander le dio una mirada, "¿Por qué estás tan callado?"

"¿No querías que estuviera en silencio durante la cena?"

"Hoy te permito hablar."

El menor se levantó a un lado de su silla y en posición militar respondió. "Reportando al general: no tengo nada que decir."

"jajaja..."

Una suave risa como campanilla resonó en el tranquilo comedor, casi causando que Derek se ahogara. Hablando honestamente, en los últimos diez años, nunca antes había escuchado tan sonido refrescante en su casa.

Alexander llevaba mucho tiempo acostumbrado a esto, sin cambiar su expresión facial, le entrego un pañuelo a la mujer a su lado y dijo con voz profunda, "Ten, limpia tu boca. Pareces a punto de escupir tu comida."

"Lo siento, lo siento."

Claudia reía mientras limpiaba su boca, con gran frecuencia su mirada se dirigió hacia el menor. Viendo que él nunca prestaba mucha atención de sí mismo, tomo un trozo de carpa y la coloco en su plato.

"Ten esto, come más."

Derek de nuevo fue derrotado por esta mujer.

Siempre se había preguntado por qué su padre intento encontrar otra mujer que fuese tan hermosa como su mamá. Pero viendo a la mujer frente a él, se dio cuenta de que aunque era joven y bonita, no había nada bueno en ella. Su sonrisa cargaba rastros de depravación y tenía una postura similar a la de una persona de escasos recursos.

Padre, ¿Qué abras visto en ella?

¿Podría ser que había tenido muchas delicias que comer y quiso intentar probar mierda por una vez?

"Trae mañana a tu hijo y que venga a vivir con nosotros."

Solo hizo falta una frase para que Alexander causara una atmosfera agria.

Derek permaneció en silencio, y a juzgar por la expresión del hombre mayor, él ya tenía una idea de lo que venía.

"Derek", Claudia sonrió, "Mi hijo es de la misma edad que tú, y tienen el mismo temperamento. Creo que los dos serán realmente compatibles."

"Si el viene, yo me voy."

Solo una frase pronunciada por el menor, causo que todo razonamiento de la mujer muriera.

El mayor estaba absolutamente iracundo. "En ese caso, puedes irte ahora."

Derek se puso de pie, y sus acciones fueron imitadas por Claudia.

"No pelees con tu padre", pidió la mujer. "Nunca había pensado en dejar que mi hijo viniera aquí. Él es cercano a su papá y no se acostumbraría a vivir conmigo."

Un cuarentón, una mujer divorciada y su hijo de diecisiete años. Padre, realmente sabes cómo hacerte estar cómodo. ¿Vas a abandonar a la esposa que estuvo contigo por veinte años?, pensó el menor.

"Independientemente de si viene o no, iré."

La cara del general era tan tormentosa como siempre. Sin importar que tan recto se parara, sus hombros no podían dejar de temblar.

Derek ignoro el par de ojos brillantes de enojo detrás de él. Siempre había querido irse, pero le faltaba motivación. Y ahora, finalmente tuvo la oportunidad de hacerlo.



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ADDICTED (STEREK)Where stories live. Discover now