04. Chacha

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Aquella mañana, Seoji había despertado con unas ganas de gastar toda su energía al máximo. Se levantó de su cama con un salto, bañándose y vistiéndose con el uniforme de su escuela, al terminar bajó hasta la cocina para prepararse su desayuno. En el proceso, se encontró con su hermano ya vestido, sentado en la mesa mientras llevaba una cucharada de cereal a su boca.

A diferencia de su hermana, Seongmin había amanecido con cansancio después de haberse pasado parte de la madrugada jugando en su habitación. Con unas ligeras bolsitas negras bajo sus ojos, alzó su vista y se fijó en su radiante hermana.

—Son por estudiar—mintió, regresando su atención hacia el plato.

—No sabía que estudiabas con Taeyoung, en la madrugada, diciéndole que jugaba terrible...—dijo ella con falsa inocencia desde la cocina, abriendo la nevera para sacar la leche.

Seongmin desde su lugar suspiró derrotado, sin mediar palabra alguna continuó en silencio su desayuno.

La chica llegó a la mesa con pequeños saltitos y su plato de cereal, sentándose frente a su mano brindándole una sonrisa espontánea, para posteriormente comenzar su desayuno.

Ambos escucharon unos pasos provenientes de la escalera, su madre bajaba a la sala vestida para irse a su trabajo, sonrió al ver a sus hijos desde arriba, pero algo la detuvo al darles más atención.

Por alguna razón, Seoji parecía tener al al mismísimo sol a su lado, con nubes y arcoíris rodeándola. Frente a ella, Seongmin con una gran nube negra sobre él.

Continuó su camino hasta la cocina como si nada, buscando una botella con agua para colocarla en su bolso.

—¿Están listos? Los llevaré a la escuela.

Al llegar, Taeyoung, el amigo de Seongmin, se encontraba a unos pocos metros de la entrada, parecía esperarlo, cuando su mirada se encontró con la de Seongmin sonrió mientras lo saludaba, para después aumentar su energía y sonrisa al notar a Seoji a su lado, quien lo saludó de la misma manera alegre.

—Nos vemos—se despidió cortamente para comenzar a caminar hacia su amigo, ambos perdiéndose entre los pasillos.

Sin más qué decir, la chica comenzó a tomar camino hacia su salón de clases, aún quedaba algo de tiempo antes de que su primera clase diera inicio, por lo tanto, se detuvo unos segundos para sacar su teléfono y audífonos de su bolso, tomándolos con su mano hasta finalmente llegar. Tomó asiento y conectó los audífonos, recostando su cabeza sobre sus brazos cruzados en la mesa, descansando mientras la melodía se reproducía en sus oídos.

Miraba a varios de sus compañeros conversar con los demás, sentados sobre las mesas, riendo, otros solo se hallaban leyendo, y ciertas chicas se maquillaban ligeramente entre ellas.

Cerró sus ojos y se dejó transportar.

Sin saber cómo o cuánto tiempo llevaba fuera de sí, sintió unos dos toques en la mesa. Asustada se levantó de repente, creyendo que el profesor había llegado, sin embargo, se llevó la sorpresa de encontrarse con un sonriente Hyeop frente a ella, sentado en el asiento.

—Oh, creí que eras el profesor Jeon—confesó ella tranquilizándose, mientras paraba la música y se quitaba los audífonos.

—Me ofendes, Jiji—se llevó una mano a su pecho con una mueca exagerada, indignado.

Seoji soltó una ligera risa y miró a su alrededor, habían algunas personas fuera del salón y otras hablaban despreocupadas, le pareció extraño y no creía que había descansado tan solo unos segundos.

NOSTALGIC PIANO | Cha Junho.Where stories live. Discover now