Mi Elección Más Caótica

A veces mi mayor deseo es morir...

Lo había conseguido, había provocado a T/N lo suficiente como para que ella me besara. Y entonces...¿Por qué no se sentía tan bien como me lo imaginé?. 

2 de Enero
Hogwarts
8:30 am 

El lunes por la mañana no deseaba otra cosa más que seguir durmiendo hasta que la muerte venga por mí, pero me levanté y luego de hacer mi rutina diaria bajé hacia el GC. 

Con mi porte y elegancia al caminar, ninguna chica podía evitar mirarme sin que se le cayera la baba al hacerlo. 

- ¡Draco! - escuché la vos ronca de mi amigo Blaise

Lo vi sentado en la mesa de Slytherin junto con Crabbe y Goyl, fui hacia ellos y me senté al lado de Zabini y enfrente de los grandotes. 

- ¿qué cuentan? - pregunté para sacar un tema de conversación irrelevante, en realidad no me importaba para nada lo que tuvieran para decirme 

- estábamos hablando de que hoy tenemos clases con los Gryffindor - respondió Crabbe

- genial - rodé mis ojos y me encontré con la mirada penetrante de cierta Sytherin 

- ¿qué pasa, Draco? - preguntó interesado Blaise 

- nada - dije mientras apartaba la mirada de T/N al mismo tiempo que ella la apartaba de mí 

- pasa algo con T/N - me volvió a preguntar 

- claro que no - fruncí las cejas 

La primera clase era Pociones con Slughorn, la cual fue sumamente aburrida ya que solo hicimos repaso de pociones que ya todos conocíamos. 

La última clase del día era Cuidado de Criaturas Mágicas con Gryffindor. Vi como T/N se acercaba a Granger y Weasley para no estar sola, aunque hace unas horas atrás la había visto hablando muy animadamente con otra chica de Slytherin. 

- hoy estudiaremos a los Dragones - Hablaba Hagrid muy animadamente, como lo solía hacer, se volvía cansador por momentos 

- los vi - me susurró Blaise en el oído 

 - ¿qué? - pregunté desconcertado 

- los vi, a ti y a T/N en la sala común a media noche, lo vi todo - volvió a repetir 

Tomé el brazo de Zabini y lo llevé a un lugar más apartado del bosque prohibido para que nadie nos pudiera oír. 

- ¿qué tanto viste? - pregunté preocupado 

- todo, ya te dije - contestó sonriente 

- ¿qué vas hacer al respecto? - pregunté 

- nada, soy tu amigo, viejo - contestó y me golpeó suavemente en mi brazo  

- genial - suspiré 

- ya lo lograste - dijo 

- ¿qué? - pregunté desconcertado 

- ya lograste engatusarla, en cualquier momento le terminará a Potter - sonrió con superioridad 

- no sé si quiero que termine con Potter - susurré 

- ¿qué? pero ese era el "juego" - replicó 

- lo sé, pero no me creo capaz de lastimarla, no de esa forma - hablé mientras la miraba

Ella estaba de espaldas a mí y se veía jodidamente sexy concentrada en la clase. 

- te estas enamorando, amigo - dijo con voz melosa