Los chicos de mi vida- Cassiopeia Malfoy. (Completa)

Capítulo 32

Llegando a la estación me despedí de Theo y de Astoria, me encontré con mi hermano.

– Draco: No te iras a despedir de tu novio

– Cassy: No es momento Draco, vamos ahí esta madre

Caminamos directamente con nuestra madre y ella nos llenó de besos y un gran abrazo. Tomamos su brazo y aparecimos afuera de nuestra casa.

– Narcissa: Cassiopeia, Draco vayan a su habitación y no salgan hasta que los busque.

– Ambos: Esta bien madre

Draco y yo nos miramos confundidos en realidad no sabíamos nada. Lo que alcance a notar es que había una reunión en el comedor, algo tenebroso y obscuro sentía.

Los dos nos dirigimos a nuestra habitación y cuando entre a la mía había cosas de Cedric. Fotos y cartas de nosotros a lado de eso había una nota.

– Querida Cassiopeia

Encontré estas cosas en la habitación de mi hijo, pensé que te gustaría quedártelas.

Te mando un abrazo fuerte

Con amor Sra. Diggory.

Maldita sea, necesita tomar aire olvidarme de todo, pero no quería estar de nuevo como en Hogwarts y mucho menos sola ya no tenía a Fred.

Draco entro a mi habitación, sin hacer ruido y me encontró sentada con las cosas que me dio la madre de Cedric

– Draco: ¿Estas bien?

– Cassy: Claro que sí y ¿tu?

– Draco: Todo bien, lo extraño, pero sé que está bien

– Cassy: Draco, algo está pasando en nuestra casa.

– Draco: No te a madre algo nerviosa y preocupada, ¿Crees que algo malo pase?

– Cassy: Alcance a ver que tenían una reunión, pero no vi quien estaba ahí.

– Draco: Yo te voy a proteger de todo.

– Cassy: No te pongas sentimental.

– Draco: Cállate Cassio...

– Draco fue interrumpido por nuestro padre que entro a mi habitación.

– Lucius: Niños tienen que bajar ahora.

Draco y yo nos miramos algo asustados, nuestro padre tenía un aspecto horrible, estaba totalmente mal mientras que nuestra madre esta atrás de el con la mirada abajo y totalmente triste estaba casi llorando, pero también se le veía molesta.

– Narcissa: Bella solo son unos niños, ellos no deben pasar por esto Lucius piénsalo por favor.

– Bellatrix: Nuestro señor los necesita y lo ordena.

– Lucius: Ya se tomó una decisión y punto.

Draco y yo solo escuchábamos mientras bajábamos las escaleras algo estaba mal.

– Narcissa: Lucius sabes que a Cassiopeia le va a afectar

– Cassy: ¿Que me va a afectar madre?

– Lucius: Merlín Narcissa, Nada querida. Draco y Cassiopeia deben obedecer y hacer todo lo que les pidan es por el bien de la familia.

– Ambos: De acuerdo.

– Lucius: Draco tu primero

– Narcissa: Espera.

– Lucius: Ellos son los únicos que nos van a sacar de esto, no lo deben y más ella. Draco entra.

Me quede afuera con mi tía Bellatrix, trataba de no demostrar miedo.

– Bellatrix: Tranquila Sobrina todo saldrá bien es por tu bien.

Después de un rato salió mi padre me miro directamente a los ojos yo no entendía nada.

– Lucius: Es tu turno hija.

Entre al comedor, en medio estaba el. De quien todos hablaban Voldemort el que mato a Cedric. Mi miedo se hacía más grande, pero para que nos quería no somos tan importantes para complacerlo.

– Voldemort: Querida Cassiopeia acércate no te hare daño.

Me acerque y mientras más me acercaba encontraba a una persona toda deforme.

– Voldemort: Tú serás parte de mis filas, eres muy importante, juras serme totalmente leal.

Yo volteé a ver a mi padre y recordé que él nos dijo que dijéramos que si a todo, miré a mi madre ella quería llorar vi a Draco sentado al lado de mi madre sus ojos estaban cristalizados se agarraba su brazo izquierdo.

– Cassy: Claro que si mi señor.

– Voldemort: Levanta tu manga querida.

Cuando la levante el saco su varita y empezó hacer la marca, la maldita marca tenebrosa. Sentía un dolor, pero con mis pensamientos y lo que sentía se iba desvaneciendo. Tenía cerrados mis ojos y la imagen de una chica pelirroja sintiendo el mismo dolor me confundía no sabía que estaba pasando. Al terminar nos miró a Draco y a mí salió.

– Voldemort: Su primera misión es muy sencilla es matar a Dumbledore.

Draco y yo nos miramos, no podíamos hacer eso. ¿Como mataríamos al director de Hogwarts?

– Voldemort: En especial tu Draco, Espero cumplan su misión no como el holgazán de su padre.

Los dos accedimos, no sabíamos que iba a pasar, pero teníamos que matar a Dumbledore.

La reunión había terminado, Draco me tomo del brazo y nos dirigimos a su habitación. El cerro la puerta y conjuro un hechizo silenciador.

– Draco: ¿Cómo mierdas lo haremos?

– Cassy: No tengo idea

– Draco: Nadie debe saber esto, mucho menos tu novio.

– Cassy: Si, si de acuerdo.

Se me había olvidado decirle que Fred y yo ya no estábamos juntos, pero decidi no decir nada ya tenía mucho que procesar.

– Cassy: Draco puedo dormir contigo

– Draco: Claro que sí, ¿estás bien?

– Cassy: Son muchas cosas que procesar.

Draco y yo no bajamos a cenar, estábamos tan cansados y no queríamos ver a nuestro padre, no queríamos saber nada. Solo nos recostamos pude escuchar que Draco estaba llorando yo solo lo abracé y nos quedamos dormidos, ahora era mi turno de apoyarlo.