Capítulo 8

164 31 26
                                    

Isabelle

—De qué te dejes amarrar por Lucinda, y que ella haga lo que quiera contigo.

—Lucía— Corrigió ella en automático pero impactada. Su cara era el perfecto reflejo de la perplejidad.

La sonrisa oculta de Daniel dió un cambio drástico y miró alarmado a Andy.

—No creo que...—Se vio interrumpido por él.

—No puedes decir que no— Se encojió de hombros mientras éste le reprochaba algo que no era evidente para los demás, menos para Carlos, quien al parecer entendía la situación a la perfección.

Iba a disfrutar este momento, Lucia había hecho evidente el que le atraía Daniel. Y no pude pasar desapercibido el pequeño intercambio entre los chicos.

—Bien— Dijo entre dientes, un poco reacio pero aún así divertido.

-1
-2
-3

—Uno— Al unísono.

Lucia nerviosa, y Daniel ansioso. Al parecer no era una canción la que había puesto diana, si no una lista de reproducción, con ritmos realmente eróticos, dandole al ambiente más tensión.

—Bueno, no puedo rechazar lo que Dios me puso en el camino— Bromeó Lucía.

Estaba conteniendo la risa, era realmente torpe al momento de mover las cosas. Carlos tomo una de las sillas individuales y con toda malicia del mundo ayudó a amarrar a Daniel.

—Ehhh, no quiero interrumpir su emoción— Rompió el silencio— Pero la zona de abajo está prohibida.— No lo comentó, no lo preguntó, lo afirmó de manera nerviosa, pero con rudeza.

Todos reímos por lo bajo.

—Y el semental, fue sometido— Negó con la cabeza Joa— Muy mal hecho, tienes que dominar.

Daniel se vio efímeramente afectado por esas palabras.

Lucía hizo un par de bromas hasta que Andrew se cansó y dió por finalizado el pre-momento sexual.

Alguien del público cerca de la bocina, subió el volumen con malicia.

—Falta algo— Hice acto de presencia.

—¿Qué?— Soltó fastidiado Andrew.

Reí por lo bajo y le tendí un pañuelo a Lucia, la cual me miró confundida. Los chicos empezaron a reír y Daniel se sonrojó de sobre manera.

Seguía sin entender así que tomé el pañuelo y se lo doblé.

—Vendale los ojos— Me encojí de hombros.— Para más placer— Me burle con una referencia.

Ella captó con rapidez y con una habilidad impresionante hizo un nudo detrás de su cabeza.

—No veo nada— Se quejó Daniel.

—Esa es la idea— Se burla Carlos.

—Cállate, rompes la tensión— Le reprocha Lucía, quien con emoción y dejando al lado la timidez nos hizo contar hasta tres.

Se escuchaba la respiración pesada de Daniel debido a la expectativa.

Lucía se arrodilló frente a él dándonos el suspenso más jodido.

Sus manos viajaron por los muslos de Daniel con lentitud, mientras el se removía incómodo.

—No va a durar mucho— Comentó Juan.

—Dije que... Por ahí no— Tomó una bocanada de aire en medio de la oración.

Era gracioso, la expectativa era algo fascinante y más que ser víctima de ella era el provocarla.

—Silencio, si no quieres jugar dilo, pero no jodas el ambiente—Reprochó Sofía, pero él, se quedó callando, dando a entender que también le era entretenido.

Javi hizo un sonido de burla el cual no pasó desapercibido, desatando un montón de risas que relajaron a Daniel.

—Si se siguen burlando voy a empezar a pensar que me va a meter un grillo en el pantalón.— Lloriqueó divertido.

—Quien fuera el grillo— Masculló Carlos.

—Para que un grillo si puede ser la mano— Insinué.

Lucía no podía aguantar las carcajadas—Ya pues, no me dejan hacer mi reto tranquila.— Tomó otro trago de su vaso y se levantó tambaleándose.

Cabe resaltar que desde la primera vez que ví a Lucia ella inspiraba dulzura, presenciar lo que estaba a punto de hacer me hizo darme cuenta de que las apariencias engañan. Esa chica era puro fuego.

Se sentó a horcadas sobre sus piernas acercó su rostro al de él, quien por inercia entre abrió los labios, lucía, de su boca le pasó el líquido. Daniel tragó pero tosió leve debido a la impresión. Cosa que nos hizo reír otra vez.

—Acabas de pasarme una cantidad de gérmenes impresionante.— Lloriqueó.

—Me prende cuando hablas así.— Comentó ella graciosa.

—Ya deja de quejarte y disfruta.— Fer alzó la voz.

Reímos otro poco.

Vimos cómo Lu tomaba más y dejo caer sobre su cuello gotas casi imperceptibles. Daniel por su parte se estremeció debido al frío.

Ella pegó su boca al cuello de él y le dejó varios chupetones.

—¿No debimos ponerles tiempo?— Susurró Carlos.

—¿Si, por cuánto van a hacer eso?—Le siguió Melissa con su mirada puesta en la pareja.

—¿Bueno, van a interrumpir el show? Aburridos— Me quejé.

—Cállense y dejen ver.— Pablo Masculló con un bol de palomitas, sabrá Dios de dónde lo habrá sacado.

—La hora de los niños pasó hace rato— Se burló Diana.

Lucía no había llegado a besar los labios de Daniel cuando un cambio un poco drástico pasó en su pantalón.

No se había percatado, pues a pesar de todo, seguía en sus piernas.

Las manos de ella subieron por sus hombros hasta su espalda y fue cuando lo besó, Daniel soltó un pequeño sonido de satisfacción.

-Bueno ya, hay varias habitaciones arriba por si quieren continuar- Andrew se burló.

-No se come frente a los pobres.- La queja de Fer de hizo notar.

-Técnicamente los pobres les dieron comida- Participé.

-Bueno, si quieres un poco de acción aquí estoy yo- Intentó coquetear Joa con Fer.

-Es la frase más utilizada para ser rechazado- Javi aportó.

-Si de hecho, no sé que estabas pensando, creo que ya no te podrás ligar a ninguna de nosotras.- Negó Sofi con la cabeza.

-Tampoco es como que si tuviera mucha oportunidad antes- Comenté burlona.

-Es cierto, imagínate tenerme de competencia- Emi resopló- Imposible que pudieras ligartela.

Pasó un brazo sobre los hombros de Fer quien río encantada.

-Y para que las va a querer a ustedes, si me tiene a mi como pretendiente- Carlos volteó los ojos intentando defender un poco a Joa.

-No, tu no.- Se quejó Kadi frunciendo el ceño

-Dale guapa, hay suficiente para todas- Le guiñó un ojo en modo coqueto pero burlón.

Lucía estaba quitándole la venda de los ojos a Daniel, mientras los demás mantenían una conversación.

El la miró y ella se sonrojó, después se susurraron un par de cosas, y como si no hubiesen existido, se marcharon sin dejar rastro.


Vestigio [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now