Historia V

377 12 1
                                        


No podía permitir que mi padre siguiera engañado por quién era mi ex'novio, Jean, a pesar de su buen aspecto físico y buen comportamiento no era más que un tipo de mal carácter y muy tóxico.
Esa tarde debía ir a un café de la ciudad, una de las mejores de la ciudad muy prestigiosa y elegante.
Estaba muy preocupada no sabía que hacer y me sentía frustrada por todo lo que estaba pasando en mi vida personal, necesitaba hablar con alguien y hacer un plan para salvar mi vida de un tipo que una vez que me casara con él, no permitiría que fuera libre nunca más, no podría salir con mis amigas ni hablar con ellas, y tampoco hablar con nadie más, advirtió que me ahislaría de todo el mundo ya que yo, según él, coqueteo y provocó a todo el mundo.
Llegué al café y me senté en la masa de siempre junto con Mikasa.

-No sé que hacer Mikasa, mi padre quiere que me case con el idiota de Jean- dije recostandome en el sillón blanco junto al gran ventanal.

-Yo tampoco sé que hacer _________, me tomó de sorpresa igualmente que a ti. No creo que Jean lo haya convencido, el tío no tiene pintas de dejarme convencer de esa forma. -.

-No puedo permitir que mi padre haga eso, el no es así, nunca fue así. Si, sabía que mi padre quería hacer que me casara con un hombre rico y continuar con la empresa, pero con ¿Jean?-

-Dios, el tío está mal de la cabeza. Su padre solo es dueño de una empresa de mudanzas y ni si quiera está entre las mejores 3 de la ciudad.-.

-Lo sé, pero Jean es un tipo astuto, un zorro viejo como su padre, ambos quieren la empresa de papá y no quiero que eso pasé. Pero mi padre no me escucha, me ignora cuando tocó el tema, hoy en el desayuno quise tocar el tema, Mikasa, se levantó de la mesa y se fue, mamá se enojó y me prohibió rotundamente volver a hablarle del tema.-.

-El tío está ciego, lo envolvió tan bien en su juego que no quiere escuchar a nadie.- dije mirando mi taza de té.

Hablamos con Mika solo un poco más y salimos del café a caminar un poco ya que ese era el deceo de Mikasa. Caminavamos por el parque mientras de lejos nos vigilaban los guardaespaldas de mi padre.
Mientras charlábamos miraba a mi alrededor y me percaté que debajo de un puente en el lago que dividía al parque había unos hombres, vagabundos, rodeando una pequeña fogata, era invierno y el cielo como tal estaba nublado. En mi mente surgió una idea, era muy loca, tan descabellada que podría funcionar. En ese momento uno de los vagabundos se sacó su gorra dejando ver una melena dorada entre mesclada con una barba semi larga que cubría su rostro. Busqué rápidamente por todos lados los escalones para bajar y los encontré camine con tranquilidad, hasta que vi que un policía les había pedido que se retirarán de allí, los hombres se levantaron y con respeto accedieron.
Me sorprendió que accedieran tan rápido y aceleré el paso para alcanzarlos.

-SEÑOR!!! ESPERE!!! OIGA!! USTED!!!.- Dije gritando como una loca mientras Mikasa me seguía gritando que qué era lo yo estaba haciendo.

El policía tomó por el cuello al hombre y lo sostuvo tal vez habría pensado que me había echo algo y por eso estaba corriendo hacia él. Cuando llegue frente a ellos me tropecé con mis tacones poniente el pié yo solita (osea enredandome con mis propios pies) y en un movimiento rapidísimo el hombre vagabundo empujó al policía y me sostuvo antes de yo tocar el piso.
Mi corazón latían tan rápido y mi respiración estaba tan agitada que no podía mantenerme en pie y ahí estaba recargada en los brazos de un completo desconocido, él, ese completo desconocido me ayudaría a salvarme.

-¡¡________!!!, Estás bien??? Te pasó algo? Te lastimaste???- dijo Mikasa mientras se acercaba muy preocupada. -Demela por favor yo me are cargo, ¿Usted la conoce de algún lado?.-dijo Mikasa viéndolo de pies a cabeza -O le hizo alguna cosa cuestionable señor?.

|✨Armin Arlert one-shot's✨•|•Armin X Lectora•|• Para Tí •|Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang