¡Cómo la quería!

91 9 1
                                    

Ella era todo para mi, señora. La amaba como nadie amó a ninguna otra persona,
pero se fue.
Me abandonó y yo no supe que hacer, dígame usted ¿¡que pude haber hecho!? Dejarla ir, señora, eso fue lo que hice.
¡Pero esto no termina aquí! Pues yo, como buen hombre, iba a luchar por ella.
Resulta que había llegado este malnacido, un aparecido de alguna comarca cercana,
y yo pensé "este infeliz no se llevará mi vida."

¡Como la quería!
Pero ella a mi no me amaba. ¿Qué si la traté de reconquistar? ¡Por supuesto, señora! Ya le he dicho yo que no soy de los que se rinden fácilmente.
Esa noche me acerqué con sigilo a su casa, como el amante secreto que quería ser,
lancé un centenar de piedrillas a su ventana y a la ciento uno, ella abrió.
¡Me sentía feliz, señora! Estaba viendo a mi amada por primera vez en mucho tiempo.
Ella me dijo "vete" y yo solo me alejé con mis sentimientos anclados en la garganta.

¡Como la quería!
Al día siguiente se iba a casar con el infeliz forastero y yo simplemente no podía permitirlo, ¡no podía!
Llegué a la iglesia, con la pistola en la mano y mi corazón en la otra.
Miré a todos en la capilla y sonreí, sonreí porque mi amada me veía a los ojos.
"Como te quería" le dije y, con un movimiento rápido puse el cañón de la pistola en mi sien.
Apreté el gatillo.

Poemas de una chica sin vozWhere stories live. Discover now