Estaba terminando de bañarme y comienzo a ponerme la ropa que Leroy me prestó. Un short deportivo y una playera casual.
Tomo su cepillo para deshenredar mi cabello y salgo del baño, con mi ropa y zapatos sucios hechos una bolita.
Bajo las escaleras y escucho ruidos desde la cocina.
-¿Qué estás cocinando? -le digo mientras entro por la puerta de la cocina
-Es una sorpresa -dice con una sonrisa -Si quieres puedes lavar tu ropa aquí, así te la puedes llevar limpia a tu departamento
-No quiero abusar de tu hospitalidad...
-Para nada, está en la última puerta, cerca del patio trasero
-De acuerdo, gracias
Voy hasta el cuarto de lavado y me sorprende lo ordenado que está todo, definitivamente Leroy era muy organizado y eso me gustaba.
Meto a lavar mi ropa y lavo mis tenis a mano con un cepillo especial para el calzado.
Cuando término regreso a la cocina, pero Leroy me llama desde el comedor
-Ya está la cena
Camino hasta un comedor de madera, de estilo moderno haciendo juego como toda la casa.
-Por favor -dice mientras abre la silla acojinada
Tomo asiento y me recorre con facilidad.
-No tardo mucho
Y efectivamente, entra a los segundos con dos platos con una pasta de aroma increíble, también llevó de postre unos vasitos de cheesecake con zarzamora y fresa. Para acompañar la pasta nos sirvió una copa de vino.
-Eres todo un encanto -le digo mientras lo miro -No puedo creer que seas real
Sonríe y me mira
-Tengo muchos defectos Dagny, no tengas tus expectativas tan altas conmigo
-Hasta donde te conozco, no he visto ni un solo defecto, tienes una casa maravillosa, ordenada y limpia, conduces a la perfección, eres inteligente, cocinas de maravilla, eres muy caballeroso y además eres muy guapo
-¿Crees que soy guapo?
Mis mejillas se sonrojan en segundos y bajo la mirada.
-Si y lo sabes perfectamente
-La belleza no lo es todo
-Por supuesto que no, pero como ya mencioné eres muy inteligente lo que te hace aún más atractivo
-Tengo muchos defectos Dagny, no soy perfecto
-Nadie es perfecto
-Tu lo eres
-No, tengo muchos defectos
-Menciona uno
-Suelo mentir con mucha facilidad
-Eso es una gran habilidad
-Depende de la perspectiva de las personas
-De acuerdo, tomemoslo como una virtud, ¿Qué otro defecto tienes?
-Mi instinto sobreprotector, quiero proteger a todo el mundo, sobre todo a los que son importantes para mi, por eso me afecta tanto que las personas se sacrifiquen por mi
-Entiendo
-¿Y cuáles son tus defectos? -le pregunto mientras sigo comiendo
-No tengo límites, suelo sobrepensar mucho las cosas, una y otra y otra vez
-¿Eres indeciso?
-No se si se puede decir que soy indeciso, es más bien que tomo una decisión firmemente pero lo pienso una y otra vez, no para cambiar de opción sino más bien viendo las posibles variables de las consecuencias que va a atraer
-Eso es de cierta forma bueno, abarcas todas las posibilidades
-Si, espero lo que sea de todos
-¿Qué otro defecto tienes? -le pregunto mientras lo miro
-En ocasiones suelo portarme frío y distante, como si no tuviera sentimientos
-A mi no me lo parece
-Bueno, porque tu eres especial para mi
-¿Especial?
Asiente y no deja de mirarme a los ojos.
Son tan hermosos y la forma tan dulce en la que me mira, hace que me ponga a temblar, jamás nadie me había mirado de mi esa manera.
Después de terminar con nuestra cena seguimos con el delicioso postre.
-Déjame ayudarte a limpiar los platos -le digo mientras recojo
-De ninguna manera, yo lo hago
-No, tu preparaste la cena, yo puedo limpiar
-No
-Si -le digo mientras recojo los platos y voy casi corriendo a la cocina
Leroy entra dispuesto a quitarme, cuando le propongo algo.
-¿Qué te parece si yo los lavo, tú los secas y los acomodas?
-¿Qué tal si yo hago todo?
-No, por favor déjame ayudarte para no sentirme inútil, odio sentirme de esa manera
-Está bien -dice resignado
-Gracias -me acerco y le doy un beso en su mejilla
Fue algo tan espontáneo que nació de mi interior, que no solo sorprendí a Leroy, sino que también me sorprendí a mi misma.
Comencé a enjabonar la esponja y a pasarla por las copas, cuando sentí que Leroy se ponía detrás de mi.
-Debo de confesarte que esa playera te queda mucho mejor a ti, que a mi -me susurra
Un escalofrío me recorre por la espina dorsal y me provoca un aceleramiento de corazón.
-¿Tú crees? -susurro con la voz ahogada
-Sí y por mucho
Trato de concentrarme en los trastes y de ignorar el hecho de que Leroy me está poniendo nerviosa.
Siento que comienza a acariciar mi brazo con la punta de sus dedos. Con la otra mano me toma de la cintura y me da un giro para quedar uno frente al otro, con muy poco espacio entre nosotros
-Tengo... jabón en las manos -susurro
-Eso se arregla -dice seductoramente
Me gira y abre la llave para que caiga el chorro de agua, comienza a acariciar mis manos debajo del chorro de agua, limpiando cualquier rastro de jabón. Después toma una toalla de manos y comienza a sacarlas con gran delicadeza.
-Listo -dice mientras me toma de la cintura y termina con la distancia que nos separa
Deja solamente una mano en mi cintura y con la otra acaricia lentamente mi rostro. Cierro mis ojos, dejándome llevar por la sensación tan linda y reconfortante.
-¿Qué es lo que estas haciendo conmigo? -me susurra con la voz ronca
Abro mis ojos y puedo ver sus hermosos ojos grises con destellos detallados finamente de color azul.
-No es nada intencional -susurro refiriéndome a su pregunta
-Eso lo hace aun más fuerte -dice mientras mira mis labios -Te juro que en este momento no deseo nada más que besarte -dice mientras acaricia lentamente mis labios con su pulgar
-Hazlo -le digo en susurro
Comienza a acercarse pero mi celular comienza a timbrar a todo volumen, interrumpiendo nuestro momento
-Malditos celulares -dice riendo y alejándose de mi
Respiro entrecortadamente y atiendo sin mirar la pantalla siquiera, porque no creo que sea capaz de recordar como se lee. Mi mente solo esta concentrada en el hecho de que estuve a punto de besar a Leroy.
YOU ARE READING
En las garras del asesino
General FictionDagny es una de las mejores detectives del estado, entregada por completo a su trabajo y con su objetivo principal que es terminar con todos aquellos que matan, torturan, abusan o golpean a las personas indefensas. Pero tuvo que alejarse de toda la...