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Su recuerdo más antiguo de la preparatoria era su primer día de escuela. Indudablemente. Recuerda lo orgulloso que estaba de su propio esfuerzo, había logrado entrar a Karasuno, a una preparatoria. Aquello era casi imposible por su jerarquía, pero ahí se encontraba. Tendría que esforzarse el doble si quería permanecer ahí los tres años, por lo que, buscar un club era indispensable.
Venía de una manada algo numerosa, su padre era el Alfa líder de ella y la mayor parte del tiempo no se encontraba en casa por cuestiones de trabajo, las veces que estaba en casa tan solo era para dormir, comer y en algunas ocasiones para pasar su celo con algunos de sus compañeros. Su madre era una Omega dominante, de carácter particularmente sumiso y obediente. Él era el hijo más pequeño de la segunda camada que su madre concibió y el único Omega de toda la manda. Contaba con un total de quince hermanos - en ese entonces-, siete de ellos era sus hermanos sanguíneos, siendo él el más pequeño, cuatro cachorros de la segunda pareja de su padre una Beta y por último cuatro cachorros pequeños de la última pareja de su padre un Sigma.
Entrar al club de volleyball no fue difícil, tenía algo de experiencia en cuanto a rapidez y maniobras defensivas por el tiempo en que debía de cuidar de sus hermanos menores, tomó el papel de suplente de líbero por sus capacidades.
─ Soy Kimura ___________, es un gusto conocerlos. Espero que nos llevemos bien.
Sus palabras fueron dichas con seguridad mientras se inclinaba. Podía sentir la mirada de todos los participantes sobre él, sin embargo, trataba de disimular su nerviosismo con una actitud segura.
Sabía por lo que le había dicho Shimizu que el equipo estaba conformado en su mayoría por Betas. Había cuatro Alfas: Sawamura, el líder del equipo y también de la manada misma, Azumane, un Alfa de gran tamaño quien era la estrella del Karasuno, Tsukishima, un tipo con un personalidad horrible y Kageyama, un chico de mala cara. Los únicos Sigmas de la manada era Hinata y Nishinoya.
No se sorprendió al no recibir respuesta de los integrantes del equipo, se dedicó a sonreír amablemente mientras sentía la mirada pesada de los Alfas y Betas, quienes instintivamente trataban de cuidar del Sigma de la manda. Fue entonces que Hinata saltó sobre él con gran energía.
─ ¡Whoo! ¡Eres el Omega de las clases avanzadas! Mi nombre es Hinata Shoyō.
─Es un gusto, Hinata-kun.
Le sonrió dulcemente mientras expulsaba sus feromonas moras rojas y jabuticaba. Shoyō se restregó en su cuello mientras ronroneaba, le recordó a sus hermanos pequeños cuando les arrullaba.
─Soy Sawamura Daichi, líder de la manada. Y el es Sugawara Koushi, el segundo al mando. Te damos la bienvenida al equipo de voleibol del Karasuno.
