Esta será una serie de historias donde relatan a thomas estar atrapado en el reino canopia y conociendo a varias mujeres con poderes especiales. podrá thomas volver a casa con ayuda de las skulgirls? eso ya lo verán pronto
(Ps:esta versión en españo...
Érase una vez había un ferrocarril. Ahí vivian 4 locomotoras a vapor en un cobertizo, uno de ellos era una pequeña locomotora con el nombre de Thomas. Thomas solía refunfuñar en el cobertizo toda la noche a las demás locomotoras.
"Estoy cansado de empujar vagones, quiero ver el mundo" dijo Thomas un poco molestLas otras locomotoras no prestaban mucha atención, pero Thomas solía estar muy molesto y continuaba. No hace mucho tiempo, el debía tomar el primer tren en la gran estación, pero comenzó a arrancar antes de que lo engancharan al tren dejando a todos los pasajeros en la estación. Las demás locomotoras no podían dormir debido a que Thomas era una locomotora muy charlatana. Pero una noche otra locomotora llegó al cobertizo. El nombre de la locomotora era Edward. Era una pequeña locomotora amable y sentía pena por Thomas.
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"Thomas, tengo que llevar algunos vagones de carga mañana, Si los llevas por mi, yo empujarea los vagones de pasajeros al depósito" dijo Edward feliz.
"Gracias Edward, sería un placer! "
a la mañana siguiente, Edward y Thomas les preguntaron a sus maquinistas si podían cambiar de tareas, y cuando dijeron que sí, Thomas fue feliz a buscar los vagones de Edward. Un momento después, Thomas regresó con un último furgón de carga, el engachador acoplo a Thomas y su último vagón al en el tren. La señal bajó y mostró luz verde, el guarda Sonó su silbato y Thomas respondió de nuevo silbando y partió. Pero los vagones no estaban listos.
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"¡Ay! ¡Oh, oh! ¡Oh, ay! ¡Espera! ¡Thomas espera!"
"¡Vamos! ¡Vamos!" Dijo Thomas.
el tren salió lentamente del depósito y se fue un poco más rápido hacia la línea principal.
"¡Vamos! ¡Vamos! ¡Vamos!"
los vagones no respondieron y Thomas resopló a toda velocidad en túneles y puentes. Luego subían a una colina empinada donde una enorme locomotora se había atorado a media colina.
"Cuidado, Thomas. Con cuidado", dijo su maquinista cuando llegaron a la cima de la colina.
"¡Nos estamos deteniendo! ¡Nos estamos deteniendo!" Dijo Thomas. El maquinista dejo salir el vapor y apretó la palanca de los frenos. De repente los vagones respondieron.
