LOVE OF MY LIFE ; VINNIE HACKER

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hadassah pov'

estaba bajando de un avión, en la ciudad donde viviría a partir de hoy con mis amigas, sofía o más conocida como kitty, era vegana y era la hater número uno de kanye west, del narcisista de kanye. avani y más conocida como avani, era la mamá del grupo nos cuidaba a kitty y a mi, bueno más a kitty que a mi.

nos conocíamos desde pequeñas, éramos mejores de amigas en el colegio y lo seguimos siendo hasta hoy. kitty fue la primera en venirse a los ángeles hace 5 meses y luego se fue avani, nuestra idea fue que rentáramos un apartamento para las tres, y así fue.

yo pensaba mucho en la idea de dejar a mi mamá sola con mi padre. pero eso es algo que se los contaré a medida que vaya pasando el tiempo.

por lo que sabía kitty trabajaba en un restaurante como cajera, cosa que no entendía. su padre es un empresario adinerado y su madre era psicóloga infantil. su madre era un amor, la mayoría de las veces avani y yo le decíamos mamá lucia, porque nos llevaban a todos lados como si fuéramos sus hijas. esas eran las razones por las que nos habíamos vuelto tan unidas

yo sabía todo de avani y de kitty, ellas sabían todo de mi, pero siempre estuve cerrada a ellas, tenia compañeros, si. pero no tenía amigas como ellas, eran a las que le confiaba todo.

a mi madre le encantaba nuestra amistad, a mi padre le daba muy igual. mi madre le llevaba las cuentas a un empresario asiático, con eso nos manteníamos más que bien, mi padre era mecánico, tenia su propio taller. pero lo cerró. no tuvimos graves consecuencias económicas con eso, las consecuencias recayeron en mi madre y en mí.

volviendo al ahora, esperaba a avani en la salida del aeropuerto, ella venía a buscarme, en mi mano derecha tenía una maleta grande, que había sido un suplicio buscarla, traía un bolso que lo subí al avión como equipaje de mano y en mi mano izquierda traía una maleta más grande que la de mi mano derecha.

había venido a los ángeles hace tiempo y siempre ha hecho calor, pero kitty me dijo que estaba haciendo frío, le hice caso y me traje una camisa manga larga morada. si avani no llegaba en menos de quince minutos me iba a desmayar.

al momento sonó mi celular, que estaba en mi bolsillo de atrás de mi pantalón, lo saqué y por suerte era la chica que tanto esperaba que viniera, conteste de inmediato.

—¡estoy en toda la entrada del aeropuerto, en donde estás!— preguntó.

— estoy en la salida, ava.

— ah, ya voy para allá—. colgó

luego de un minuto, tenia el auto de avani en frente y en ese momento vi la gloria.

—¡hasta que por fin te veo!— dijo antes de abrazarme.

— claro que no, nos vimos como hace dos meses— hablé mientras nos separábamos y avani tomaba una de mis maletas.

— ¿y piensas que eso es poco?

— pues no, pero... de todas formas ustedes también me hacían falta.

— pues menos mal que llegaste, ahora no comeré sola— subió las maletas al carro y yo la esperaba a un lado. cuando termino, trote hasta tomar la manecilla del carro que parecía una olla hirviendo, suponía que era el sol—. qué haces con camisa manga larga aquí en los ángeles, sasa.

— no te creas, mucha gente me vio raro hoy.

— dime quiénes fueron para patearlos— reí. durante todo el camino, estuvo actualizándome sobre cómo iba todo, que pasaba con su novio anthony, de como habían conseguido amigos nuevos.

— lo siento no te pregunté, ahorita tengo que ir a ayudar en la mudanza de un amigo. vienes conmigo o te dejo en el departamento

—¿el apartamento está solo o kitty esta allí? — me quedaría en el departamento pero no me gustaba quedarme sola, y más en el edificio, pensaba de todo.

— no, Sofía esta trabajando.

— bueno, entonces te acompaño.

— sigue sin gustarte estar sola— preguntó

— si, me da miedito— reímos, pero era cierto. era ilógico mas bien.

¿como?

silencio consciencia, no lo contaré ahora.

llegamos a un vecindario muy lindo, las casas no eran ni tan grandes ni tan pequeñas, unas tenían dos pisos otras solo tenían un gran terreno.

avani estacionó en una casa color beige de dos pisos, la puerta era marrón, nos bajamos y avani tocó la puerta.

— creo que no están aquí— hablo mientras chocaba sus nudillos con la puerta haciendo el conocido sonido "toc toc". al cabo de uno segundos, se escuchó un grito el cual decía "¡CUIDADO!"

—¡ÁBRANME O ME VOY! — grito avani tocando muchísimo más fuerte.

— no me grites avani— dijo el chico rubio que nos abrió la puerta.

nota

holita, estuve pensando mucho en hacer este cambio a la historia, no es mucho pero bueno, espero les guste esta "remodelación" si se le puede decir así, y bueno. un beso grande los quiero💞💗💞💗

yula editando.