Sombras del Pasado

Capitulo 15:

*No es necesario que escuchen la canción, la use para inspírame y quería compartirla :)*

Sentí como algo golpeaba fuerte contra el suelo a lo lejos, corrí lo más rápido que pude, había estado buscando a Lea después de que oí  que había salido corriendo lejos de Jack y Teo, es demasiado peligroso estar sola en este bosque. Unos minutos después vi a Lea tirada inconsciente, estaba preguntándome que le había pasado pero entonces no lo dude más. Junto ella estaba él, llevaba siglos sin verlo pero jamás podría olvidar esa sonrisa burlona y ojos rojos que parecen inyectados en sangre.

-Vaya, vaya.- Llevo la daga con la que había atacado a Lea a su boca y lamió la sangre que goteaba en ella.

Que desagradable.

Me agaché para tomar a Lea en mis brazos, respiraba con dificultad, es mejor que me la lleve a mi casa pronto para curar su herida.

-No tengo ningún asunto que tratar contigo así que me retiro.-

No quiero problemas justo ahora, no estoy de ánimos de darle una paliza a alguien.

-¿Así tratas a tu mejor amigo? Que frialdad la tuya Sha~dow.- Separó las silabas como si se estuviera burlando de mí.

-No tengo tiempo para ti Daemon, déjame en paz.- Lo mire desafiante, estar con él lo único que hará será traerme dificultades.

Sonrió como si acabará de resolver el problema mas difícil de mundo, parecía muy satisfecho, esto no pinta nada bien.

-Esta bien, como quieras. Pero si me necesitas, y se que lo harás, ya sabes donde encontrarme.- Guardo la daga en su funda y desaparecío tan rápido como llegó.

Apenas lo hizo comencé a correr a mi casa, había dejado mi auto lejos de este lugar y no podía usar mis sombras para desaparecer porque en las condiciones que estaba Lea podrían matarla. No podía parecer preocupado enfrente de Daemon, es demasiado peligroso, no para mi sino para Lea. Ese tipo tiene algo raro en la cabeza y nunca se sabe que locuras puede llegar a hacer, más aun siendo un demonio tan poderoso como lo es él.

En mi casa puse a Lea en mi cama y la cubrí con la mantas, abrí el ropero que tenía lleno de medicinas y otro tipo de cosas que vienen del mundo no-mortal, eso hará que se cure más rápido.

Puse unas hojas de un árbol Khvne en donde tenía la herida, es un árbol muy raro con sorprendentes cualidades curativas, se retorció un poco cuando toque la herida con las hojas pero inmediatamente pude ver que unos segundos después comenzó a sentir un gran alivio. 

Le dí algo de agua para que le bajara la temperatura que estaba por los cielos, aún parecía muy aturdida por lo que había pasado. Sus palabras seguían retumbando en mi cabeza...

"No te entiendo"  Lea parecía estar apunto de romper en llanto. "Eres malo y luego bueno, pero después eres malo otra vez."

Soy emocionalmente inestable... No es del todo mentira, hay momentos en los que siento que quiero matarlos a todos, pero al enfrentarme a su mirada, esa mirada que me llena de una sensación dolorosa, esa mirada firme y llena de fuerza, esa mirada que hoy estuvo apunto de quebrarse por el llanto. Me hace querer arrancarme el cabello algunas veces, no puedo creer que esto me este pasando, no puedo dejar que esto continué así, para ella no soy nadie digno de confianza, no debería serlo, ni siquiera puedo serlo para mi mismo.

Necesito un trago.

Me levante de la cama, no puedo pensar claramente cuando estoy a su lado, un poco de whisky calmara mis nervios. 

Nos hay una sola luz prendida, todo esta oscuro, la luz de la luna apenas pasa entre las cortina negras de mi ventana. Hoy hay luna llena, respiro profundo, todo esta en silencio. No puedo oír nada además de la tenue respiración de Lea que viene de la habitación, no puedo oír los latidos de mi corazón, aunque hace muchos siglos deje de oírlos y la verdad lo más seguro es que ya ni siquiera este funcionando más.

Estoy muerto.

La vitalidad que había en mí desaparecío muchas lunas atrás, inhalo el aire pero no lo siento, la comida mortal no hacen nada por mí, el calor no me afecta, el frío no me congela, el agua no me ahoga.

Muchos desean este poder, mortales que desean ser eternos y no morir jamás, lo único que aún puedo sentir es dolor. Es como si el infierno me persiguiera, pero ¿Por que no lo haría? Soy un demonio, de ahí es de donde viene mi poder, es lo que me mantiene en este mundo, pero no me hace sentir vivo. 

Mi vaso ya estaba vacío, tomé un gran trago de la botella y respire hondo. Volví a entrar a la habitación en la que se encontraba Lea, su respiración era rápida y parecía consternada. Sus ojos estaban abiertos de par en par, parecía soportar un gran dolor. 

Levante las mantas, la herida no estaba sanando correctamente. Como lo supuse Daemon es un jugador sucio, la daga debío de tener algo, veneno quizás. Ese imbécil me las va a pagar con intereses, tomé un cuchillo que tenía en el cajón y corte mi mano. La sangre oscura comenzó a brotar, frote con mi mano con cuidado en su herida pero aún así grito muy fuerte.

La herida comenzó a cerrarse con rapidez, esta solo será una solución temporal hasta que consiga el antídoto con Daemon, Lea comenzó a recuperar la consciencia y al verme se alejo.

-¿Donde estoy?- Dirigió su mirada a mi mano, aun estaba manchada con sangre pero mi herida ya había sanado. El terror en su mirada oscureció sus ojos, sentí un dolor en el pecho ¿Me temía?

-En mi casa, Lea yo...- Me acerque a ella pero cuando estuve apunto de tocarla se alejo hasta la puerta.

-No me toques, no se que me hiciste y no quiero saberlo.- Se inclino y tomó sus zapatos, iba a salir corriendo, últimamente es lo único que hace cuando estoy cerca.

-Has lo que quieras.- Aparte mi mirada, no quiero que vea mi rostro en este momento.

Corrío a la puerta principal y se fue, patee la mesa de noche con fuerza. Trozos de madera volaron por la habitación.

-¿Que actitud es esa?- Esa maldita risa, quiero arrancarle la cabeza.

-¿Que es o que quieres ahora?- Mire a Daemon con la mirada llena de desprecio.

-¿Que es lo que quiero yo o lo que tú quieres?- El antídoto, por un segundo olvide que Lea aun no esta recuperada.

-No se de que hablas.- Me hice el desentendido.

- Vamos Shady, no soy tan tonto como crees, tampoco ciego. Te daré el antídoto para Lea si me respondes una pregunta muy simple.- Sacó una pequeña botellita de su bolsillo.

-Siempre y cuando sea rápida no me importa.- Me encogí de hombros.

-¿Que es esa mujer para tí?- Preguntó mirando desinteresadamente la pequeña botellita.

¿Que es Lea para mi? ¿Acaso es importa? No significa nada... Aun que ya no se si estoy tan seguro...

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Buuuuuum! ¿Que les parecío el capitulo? Si les gusto no olviden dejar su voto ;) Y por supuesto su comentario para saber que opinan de como se va desarrollando la historia y los personajes, gracias por leer y los veré pronto.

AlexaBlack