-Las damas primero.- Dijo Ethan.
-Muy bien.- Dije yo poniendome en posicion, gracias a mi suerte logre meter una en uno de los agujeros.- ¡En tu cara!
-Excelente, te toca de nuevo.- Dijo Ethan sonriendome, volvi a lanzar pero esta vez no tire ninguna.- Mi turno.
-Hazlo de una vez.- Dije fastidiada, se puso en posicion para lanzar logro meter dos, maldicion.
-Cuentame Lea ¿Que se siente perder contra mi?- Dijo con una sonrisa.
-No voy a perder Shad.- Dije yo.
-Ya te dije que me llamo Ethan.- Dijo Dando otro tiro, que por cierto fue acertado.
-Se me hace mas comodo llamarte Shad.- Dije encojiendome de hombros.
-Como quieras.- Dijo serio, le faltaban dos bolas, pero falló.- Tu turno.
-¿No eres tan bueno o si?- Dije yo.
-Se que acertaras a esta y fallaras a la otra o fallaras a ambas.- Dijo encojiendose de hombros ¿Que iba a fallar? ¿Ahora es psiquico o algo? Golpee la bola blanca y salio volando de la mesa provocando la risa de todos lo hombres que había en el bar.
- Mierda...- Dije en un susurro.
-¡Juegas billar como una bebita!- Grito un hombre.
-¡Si cocinas como juegas nadie sera tu esposo!- Dijo otro ¿Que les pasa? Me di la medía vuelta para decirles que se callaran pero un viento paso a mi lado causandome una sensacion extraña, familiar y calida.
-Con que la trajiste aquí Shad..- Esa voz... Mire a mi derecha y abrí mis ojos de par en par.
-¡Teo!- Grite sorprendida y me lancé a abrazarlo.
-¿Como estas cielo?- Dijo estrechandome en sus brazos.
-Te extrañe Teo...- Dije yo.
-Y yo a ti, es mi culpa que estes aquí. No tienes que rebajarte al nivel de este sucio demonio para saber la verdad.- Dijo mirandome a los ojos.
-Me siento mal por interrumpir este "momento familiar".- Dijo haciendo comillas con los dedos.- Pero yo tengo un trato con Lea y la verdad...
Volvio a tomar su palo de billar y logro dar con las dos bolas de billar, me había ganado.
-Doble mierda...- Dije audible solo para mi.
-Acabo de ganar.- Dijo mirandome con una sonrisa.
-¿Un que...?- Dijo mirandome preocupado, yo di un suspiro... esperen. Mire a mi alrededor y no había nadie mas en el lugar, solo estabamos Teo, Ethan y yo.
-Ethan eso es injusto, es trampa que seas el mejor en este juego y no me lo hayas dicho.- Dije cruzandome de brazos.
-¿Como lo llamaste?- Dijo Teo bastante sorprendido.
-Me llamo Ethan, Teo.- Dijo caminando hacia Teo con los brazos cruzados y una sonrisa.- Pero no creas que tu puedes llamarme así, solo ella puede hacerlo.
-Tú no mereces ese nombre.- Dijo Teo apretando los puños.
-Lo tengo justamente.- Dijo Ethan riendose.
-No es cierto, eres un maldito tramposo y lo peor es que no te conformaste con eso.- Dijo Teo.
-Por favor Teo, no llores sobre la leche derramada.- Dijo Ethan.
-Jamás te lo perdonare...-Dijo Teo.
-No estoy buscando tu perdon, así que no te molestes en decirlo.- Dijo Ethan.
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Sombras del Pasado
Történelmi fikcióLea la cazadora de demonios, se encontrara con uno de los males que jamás le habian enseñado a tratar... El amor.