Una posibilidad

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En Cuanto llegaron a Qinghe Nie, un grupo personas compuesto por sanadores y médicos esperaba la llegada del herido, el enviado por MingJue había sido realmente eficiente.

En cuanto se detuvo el carruaje este grupo que esperaba de al menos una docena de personas se aproximó a la parte trasera, por un momento quedaron en shock al ver la escena, Nie MingJue con los ojos inyectado de rojo con un rostro histérico y manteniendo en un firme y a la vez cuidadoso agarre al líder de la secta Jiang, que si no fuera por su atuendo sería irreconocible, ya no había color en su rostro, lucia como una exquisita estatua de mármol, sin embargo con un gesto de dolor congelado y eso sumado a que ya casi no había atisbos de su túnica morada, todo era rojo y más rojo. Con un sobre esfuerzo salieron de su estupor y se aproximaron mientras otro par esperaba con una camilla, intentaron alargar sus manos para tomar al herido, pero tuvieron que retroceder al instante, pues MingJue estaba en un estado muy extraño, una especie de trance, pues al ver que aquellos hombres intentaron acercarse reacciono como una bestia enfurecida dispuesta a matar, en ese momento no era el usual general con balance perfecto entre templanza y actitud estricta, era otro ser dispuesto a matar si alguien tocara aquello que quería proteger.

Fue solo por unos segundos, pero de inmediato reaccionó, su instinto estaba tan alerta que en ese instante percibiría a cualquiera como un enemigo. Ignorando a la camilla, el mismo cargo en sus brazos hasta adentro a FengMian, donde estaba todo listo y dispuesto para él, lo deposito en la cama preparada y sin demora el cuerpo del líder Jiang fue rodeado por todos los sanadores y médicos.

- Todo aquel que no sea indispensable, debe salir ahora mismo - habló severo el jefe de los médicos.

MingJue apretó su mano en un puño y salió sin decir una palabra, en conjunto, varios otros médicos y sanadores que aún no eras indispensables, pues lo primero era estabilizar al paciente o mejor dicho, reanimar sus signos vitales.

A fuera de la habitación de donde lo atendían Mingjue se instaló inamovible, pero su cuerpo gritaba por desplomarse sus piernas no temblaban, pero sentía la debilidad, nada tenía que ver con la batalla, la verdad de todo es que tenía un manojo de sentimientos y desesperación que no sabía cómo proyectar, y es que si FengMian llegase a morir, entonces... ¿qué pasaría con él?

Había pasado alrededor de media hora y aun no aparecía nadie a darle noticias, pero no sabía que era peor... la incertidumbre o entrar y confirmar lo peor, así que buscó en todo su ser un atisbo de paciencia para no entrar echando la puerta afuera y exigiendo resultados.

En tanto se esforzaba por calmar no notó que alguien se acercaba, solo reaccionó cuando oyó el inconfundible sonido de un abanico cerrándose de golpe.

- Acabo... de enterarme de lo sucedido. – comenzó a hablar HuaiSang.

MingJue le sostuvo la mirada un instante y luego miró el piso, como si hasta la vista le pesara.

Nie HuaiSang intentó leer el ambiente lo mejor que pudo y habló con suma prudencia.

- No hay mucho alboroto dentro, lo que significa que están concentrado y han logrado darle tratamiento.

Esas palabras parecieron dar aliento al general Nie y en conjunto a ello sintió una fuerza renovada, poso su mano en el hombro de su hermano menor, un gesto que significo un simple y puro "gracias".

En vista de la clara prioridad de su Hermano, Nie HuaiSang decidió ocuparse del alboroto que surgió en Qinghe, se ordenó que dejaran de especular rumores y que se mantuviera en secreto el estado y ubicación de FengMian, en tanto además de ello el menor de los Nie interrogo a los soldados para averiguar exactamente lo que había sucedido, ya era un hecho claro que la directiva Lan había iniciado una especie de guerra, que iban rumbo a Yunmeng, horas antes Lan XiChen había llegado ahí anunciando todo y pidiendo ayuda, además de informar que la directiva deseaba asesinar a Wei WuXian a FengMian y quien sabe a quienes más. Pero... ¿por qué? Había demasiados cabos sueltos y para Nie HuaiSang eso era inadmisible, podía pensar que tal vez Wei WuXian estaba a salvo, según la cronología de los hechos, Lan WangJi fue por el y tuvo bastante tiempo de ventaja para llevarlo lejos, luego de que su hermano interceptara a la directiva Lan y sus seguidores, lograron ganar más tiempo aun, sin embargo a pesar de que triunfaron, tres de los miembros de la directiva habían conseguido escapar, y de hecho algunos soldados Nie fueron tras ellos, pero aún no habían regresado.

Wei WuXian, el omega más deseado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora