¿UN PASO PARA EL AMOR U ODIO?

JUGANDO CON NOSOTROS MISMOS

JUGANDO CON NOSOTROS MISMOS

Solo nos quedaban un día para estar en el bosque, este hermoso lugar que recordaría como la mejor experiencia de mi vida claro aparte de que recibimos una gran regaño con la profesora y el director por pegarles un susto de muerte y que aparte arruináramos la actividad que el director se toma tantas molestias en poner en practica, cuando nos encontraron hablaron con Erika, la cual supuestamente había ido a avisar a alguien para que me ayudara pero según lo que nos dijeron es que ella venia muy tranquila y que no había avisado a nadie de mi supuesto “accidente”, después de todo esto Frida se enojo con ella a tal punto que estuvo de pegarle si yo no me hubiera metido, pero es que la pobre se veía tan arrepentida que me dijo que no había encontrado a ningún profesor y que estaba muy “desesperada”, y yo como buena persona le dije que no tenia de que preocuparse después de todo habíamos hecho una las pases, aunque a los otros no les gustara que yo hablara con ella en privado y ahora Saul me vigilaba mas cuando estaba cerca de ella como si temiera que por alguna razón me fuera a lastimar físicamente, aunque yo ya la notaba mas tranquila y me trataba un poco mejor.

-Saul cálmate ella no me volverá a hacer daño, esta muy arrepentida

-Lo siento Cintia pero no me acabo de creer ese cambio tan repentino

-Lo entiendo, pero si yo ya la perdone por que tu no haces lo mismo

-Cintia tu sabes lo que ella siente por mi, yo no puedo ir de la noche a la mañana a pedirle algo por que estoy seguro de que se inventara algo y…

-Saul almenos deberías perdonarla, después de todo ha sido tu amiga desde años y  una amistad asi no la puedes dejar ir de la noche a la mañana, al menos inténtalo

-Esta bien Cintia pero no ahora, al menos hasta que volvamos a casa, necesitamos decirle a mi padre que no es necesario que te mande de vuelta con el tuyo_ Tenia razón pero yo quería ver a mi padre y hablar personalmente con el de todo lo que me había pasado en su ausencia.

-Estoy segura que tu padre me aceptara pero tu madre ella…

-Ella te aprecia pero no te lo demuestra porque es muy orgullosa, claro que de ahí lo saque yo, aunque creo que tu me lo bajaste un poco.

-Eso me alegra, no quería casarme con alguien muy orgulloso y que todo se lo tome a mal

-Cintia sabes que detesto que Almir te toque aunque sea un pelo y aun asi tu permites que te abrase como si fuera lo mas normal del mundo

-Valla, te pones celoso… jajajajaja quien te viera con semejante cambio, bien dirían que el aire puro te hizo bien

-Dejemos eso que tal si me das un beso

-No_ el frunció el seño

-¿Por qué?, vamos yo se que me quieres besar tanto como yo a ti, se que tan solo con mi cercanía ya te estremeces justo como ahora_ ¡Claro que me estremezco!, como no si me besa mi cuello y sus labios tocan todo lo que mi ropa no alcanza a cubrir

-Sa…Saul basta, estamos en via publica

-Valla, la forma en que mencionaste mi nombre se oyó casi orgásmica

-¡¡Saul!!_ no pude evitar que un sonrojo se apoderara de mis mejillas

-Ahora te sonrojas valla

-Basta Saul sabes que esos temas me…me dan vergüenza_ el solto una risa que fue como música para mis oídos

-¿Cuántos años tienes?, ¿15?, ¿16?, Cintia tienes 19 es normal ya para las parejas hablar de eso y claro ponerlo en practica_ dijo con una sonrisa picara