El Avatar y la Maestra Agua

CAP 30 - Plan Arriesgado

Los chicos se habían divertido mucho en la playa y todavía tenían que cruzar el mítico bosque, así que llegaron exhaustos a la casa.
El  día siguiente ya era tarde y todavía no se levantaban.

Aang: Hey chicos ya levantense holgazanes - les dijo desde afuera de las puertas

Sokka: ¿Q... Qué? - preguntó muy modorro

Aang abrió la puerta y entró.

Sokka: Qué quieres cabeza de aire? - preguntó aún dormido y acostado

Aang: Qué ya te levantes holgazán - sonrió

Sokka: Aún es temprano y estoy cansado - roncó

Aang: ¿De qué rayos estás hablando? - preguntó - Ya es la una de la tarde - dijo

Sokka: Bien, mientras ve a levantar al maestro fuego - dijo aún acostado

Aang: Bueno, si no te levantas cuando vuelva voy a traer a Suki eh - se volteó - Por sierto, linda pijama - se burló

Sokka: Oye, es una pijama muy... Muy... - no sabía que decir

Aang: Tierna? - preguntó burlón

Sokka: Bah ya vete -

Aang: Jaja jaja - se burló - Bien ya levántate, me voy a salir y nos vamos en el comedor - se salió

Aang se dirigió a la puerta de Zuko.

Aang: Sifu calor - lo llamó

Zuko: Ya estoy levantado - abrió la puerta y sonrió

Aang: Bueno, hay que levantar a las chicas - dijo

Zuko: No creo que eso sea necesario - sonrió

Aang: Por? - preguntó

Zuko: Sólo huele el ambiente -

Aang: Es cierto, huele delicioso - dijo

Zuko y Aang bajaron y vieron a las chicas cocinando.

Aang: Puf, eso huele bien rico - sonrió mientras aparecía

Suki: Sí, estamos haciendo el almuerzo - sonrió

Sokka: Toph ¿Porqué tú no les ayuda? - preguntó - aunque sea deberías arrimar los vasos - le dijo

Toph: Buena idea, que la niña ciega lleve nos vasos de vidrio a la mesa - sonrió

Sokka: Oh, lo siento - se rascó la cabeza y se rió nervioso

Katara: Ya está esto ¿chicos me pueden ayudar con esta olla? - preguntó amablemente

Zuko: Yo te ayudo - sonrió

Azula: Uf, alguien anda muy amable hoy - volteó a ver a Zuko

Toph: Sí - sonrió

Sokka: Hablas de Zuko y mi hermana? - preguntó confundido

Katara: Ya basta por favor - respondió un poco molesta

Aang: Ya Katara, no lo niegues - sonrió

Katara miró a Aang confundida ¿Cómo rayos le podía decir eso? Que acaso no le daban algo de celos? Por otro lado Aang estaba hirviendo de celos, pero tenía que fingir.

Katara: Noooo - dijo

Zuko: Ya basta chicos, no es correcto hacer esto - dijo serio y ruborizado por la vergüenza

Sokka: Neh, mi hermana con Zuko no se llevan - hizo una mueca

Katara: Gracias Sokka - suspiró

Sokka: Sin embargo Aang con Katara sí quedan - sonrió

Aang y Katara se voltearon a ver y hablaron al mismo tiempo.

Katara/Aang: NOOOOOOOO! - respondieron molestos

Azula: Bien, tranquilos sólo era una broma - dijo tranquílamente

Toph: Ya vamos a comer, me estoy muriendo de hambre - cruzó los brazos

Zuko: Tiene razón, ya es tarde y hay que comer - se sentó

Las chicas arrimar on los platos, los chicos las caserolas, se sentaron y empezaron a comer tranquilos.

Azula: Oigan, como saben nos toca hacer los planes para hoy a nosotras - dijo

Zuko: Ajá, ¿que tienen planeado? - preguntó

Azula: Planeabamos ir al bosque - dijo

Sokka: ¿Al bosque? - preguntó - no sería algo arriesgado? - preguntó preocupado

Azula: Bien, si tienen miedo podemos ir al pueblo a ver juguetes artesanales comprar conchitas y caracoles e ir a la playa por todo el mes - respondió sarcástica

Aang: El bosque no tiene nada de arriesgado - dijo

Katara: No lo sé, corren muchos rumores sobre el - respondió

Sokka: Yo estoy con Aang, hemos pasado por el bosque y no ha pasado nada interesante - dijo

Toph: Ese bosque no es como los demás, la tierra no se siente para nada igual a la de los demás -

Aang: Bien, si quieren perder el tiempo en ver un bosque inútil pueden hacerlo - dijo

Suki: Aang -

Aang: Bien, vamos, no tengo nada en contra de él plan, pero les aseguro que ese bosque no tiene nada de especial - argumentó

Suki: La leyenda dice que el peligro empieza después del atardecer, es por eso que nosotros regresamos más temprano, Aang dice que son puros mitos, pero de todas maneras hay que tener cuidado - dijo

Azula: Bien, de aquí a las... ¿a las seis que empieza a caer el sol? - preguntó

Katara: más o menos - dijo

Azula: Empacamos lo necesario por cualquier situación, comemos y nos llevamos un poco de provisiones - dijo

Zuko: Pero no vamos a pasar la noche ahí o sí? - preguntó

Azula: Después del atardecer - rodó los ojos - implica noche y casas de campaña - dijo

Zuko: Tienes razón - dijo

Katara: También hay que llevar lámparas - dijo

Azula: Es cierto, no todos son maestros fuego - dijo un poco altiva

Toph: Y un buen de agua - dijo

Katara: Sí -

Aang: Bueno, entonces ya está? ¿Eso es lo que haremos? - preguntó

Azula: Sí - afirmó

Aang: Bien, vamos a acabar de comer, vamos a descansar un poco y vamos a preparar las mochilas para irnos a las seis, pero hay que repartir los trabajos para acabar más rápido - sugirió

Suki: Sí, yo puedo guardar la comida - dijo

Katara: Si quieren yo puedo arrimar el agua y meterla en las bolsas para cada quien, sólo necesito que me las den - aclaró

Zuko: Claro, Azula y yo podemos arreglar las linternas y llenarlas de aceite - sonrió

Aang: Yo llevaré las tiendas para acampar - dijo

Suki: Bien, eso es todo - dijo

Sokka: Y Toph y yo que haremos? - preguntó

Aang: Bueno, tú podrías llevar la leña y Toph puede llebar las armas no? - preguntó

Toph: Sí, ¿Porqué no? - dijo

Sokka: Está bien - dijo

Aang: Bien, por ahora acabemos de comer, descansemos hasta las 4 y ya después empezamos a arreglar las cosas para irnos - sonrió

Todos: Sí - afirmaron

Los chicos se iban a arriesgar a ir al bosque, donde iban a poder ver sus más oscuros deseos, sus ilusiones y parte de sus futuros.