Besa y chupa el lóbulo de mi oreja, sus manos se posan en mi cintura haciendo que nuestros cuerpos choquen. Baja a mi cuello y se queda unos segundos ahí. Quiero negar que esas palabras no hicieron efecto en mi, pero las mariposas en mi estómago me delatan.

—Ambos sabemos que podemos funcionar, solo que tú me lo permitas y voy a enamorarte, bonita.

Lo que no sabe o se hace idiota, es que me tiene, pero me da miedo decirlo abiertamente.

No puedo pensar bien con sus labios besando y chupando mi cuello, aprieto la mano que no está lastimada, suelto un jadeo sonoro cuando se despega de mi cuello. Nos quedamos viendo unos minutos, él esperando mi respuesta y yo pensando en cómo sería volver a probar sus labios.

—Conozcámonos, bonita...

Paso mi lengua por mis labios remojándolos, sus ojos van hasta ahí y él muerde los suyos. Cualquiera que nos viera sabría qué hay tensión acumulada desde hace tiempo.

—Ashton. —susurro y me arrepiento del efecto que causa en mi

—Morgan.

Sus manos van hasta mi trasero lo aprieta haciendo que nos juntemos más sin una pizca de lejanía, jadeo cuando siento su erección presionándome el vientre. Me arrepiento de haber traído una falda sin un short debajo.

—¿Q-qué es lo que quieres?

—A ti Morgan, sabes que siempre te he querido a ti.

Confía

Confía en Ashton

De manera rápida pego mis labios a los de el, haciendo que nuestros cuerpos se junten lo más posible, no tarda mucho en seguirme el beso y suelta un sonido de satisfacción. El beso es apasionado y desesperado, como si algo en nosotros no soportara estar lejos de sí. Pongo mis manos en su cabello y tiro de el haciendo que el muerda mi labio, una de sus manos van a mi cuello y separa mis piernas con una de las de el, La humedad qué hay entre mis piernas empieza a tornarse incómoda, quiero que me toque.

Subo su playera y meto mis manos acariciando su abdomen perfectamente marcado, mis dedos trazan sus abdominales y esa perfecta V marcada. El oxígeno estaba haciéndome falta, pero sus labios eran adictivos y no que me quería separar, pero aún así lo hice. Nuestras respiraciones eran agitadas, toma mi cuello para que no me separe por completo y pega su frente con la mía.

—Si no estuviéramos en la preparatoria ya te habría follado duro contra la pared. —su voz ronca es tan sensual

Sonrío divertida, se separa un poco y noto como sus labios están inchados y rojos.

Los míos deberían de estar peor.

Me pongo de puntitas y me dirijo a su oído

—Estoy ansiosa por volver a ver esa faceta tuya.

Nos separamos cuando algunos jugadores empiezan a entrar, me coloca frente a él y frunzo el ceño

—¿Que te pas... —se presiona contra mi demostrándome que aún está duro, jadeo y muerdo mi labio. —Oh, eso te pasa...

🏈 📣

Llorar es lo único que puedo hacer en estos momentos, mis lágrimas no dejan de salir, quiero gritar y después volver a llorar más.

—¿Qué te pasa, Morgan? —visualizo a Shawn que está con el ceño fruncido

—Mataron a mi personaje favorito. —digo entre llanto.

Alza una ceja divertido.

—Si te ríes, te golpeo donde más te duele idiota —le digo antes de volver a mirar la página del libro.

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