Demons

Primer Día

P.O.V Melione

El sol aún no salía y yo yacía entrenando en el campo de combate. Mi hermanos y primos seguían en los sueños así que me mantuve enfocada en lograr mi objetivo. Hace no mucho había estado en una misión y muchas de mis heridas seguían abiertas , eso me molestaba porque no lograba entrenar como se debía.

Uno...

Dos...

Uno...

Dos...

Ese era mi ritmo, una patada y un golpe. Eso era repetidamente en cada movimiento. A pesar de que mi enfoque era claro, mi mente viajaba a otros recuerdos...

Flashback

<<los demonios salían uno a uno, esto era claramente un emboscada. Pero Nike seguía a mi lado, no parecía querer dejarme sola desde un principio, y jamás pensé que ese sería la causa de su muerte.

La iglesia que sobresalía de los árboles está pintada de un gris oscuro por los deterioro de los años. La sangre de los demonios había manchado los santos de la entrada... era aterrador.

— No lo pienses mucho— dijo Nike—corramos hasta allá y quemémoslos.—yo asentí y terminé de cortarle la cabeza al demonio.

Al llegar a la iglesia ambas encontramos una escena terrible...

En el centro de la iglesia había un círculo cerrado con la sangre de un demonio, y dentro de él estaba la reina de los lobos con un notable vientre abultado. Nike fue corriendo de inmediato a salvarla pero Alexander salió de las sombras desde donde se había mantenido escondido...

—Cayeron recónditas en mi trampa corderitos—murmuró el —como una rata en su queso...

Sonrió

Fin del flashback

Mi jodido hermano había hecho una emboscada para ambas y había matado a su gemela. Pero después fue a matar a mi abuelo y yo también estuve allí...

Flashback

Estaba escondida en una de las habitaciones de la mansión con mi abuelo mientras los cazadores trataban de matar a Alexander. Pero de un momento a otro la puerto se callo generando una explosión.

—Vaya, Vaya —se burló Alexander— que gran sorpresa Melione; pensé que la última vez había sido un pequeño descuido de mi parte haberte dejado viva, pero veo que te empeñas en morir en mis manos.

Su cara era irreconocible, no era el hermano protector y cariñosos de mi infancia. Alexander estaba serio pero con una sonrisa maliciosa , pero lo que más resaltaban eran sus ojos; antes eran cafés pero ahora tenían un brillo rojo intenso y puro dolor y maldad en el centro de su iris. Estaba en una oscuridad profunda...

—¿Cómo te atreves a amenazar a tu propia hermana?— me defendió mi abuelo—¿no te bastó con matar a Nike?

El nombre de mi hermana aún era algo intocable; pues a pesar de haber pasado los meses, mi dolor seguía siendo intenso y recurrente en el fondo de mi corazón.

—¡JA, JA, JA!—rió Alexander fuertemente—eso le sucedió por meterse en cosas que no le importaban. Y por haberle hecho caso a un viejo decrépito...

—Y qué harás ahora ? Matarme?—preguntó mi abuelo

—Haré algo mucho peor que eso—sonrió —voy a torturarla y veras como la mató lentamente quitándole parte por parte...