Wendy Howland es una joven la cual se mete a una aventura con los Pevensie, y esto marcaría su vida hasta que acabara...pero sus planes no incluían descubrir un mundo tras el ropero, ni enamorarse de cierto azabache.
Los personajes pertenecen a C.S...
Salí de mi cama en cuanto desperté, tomé mi ropa, la cual más bien parecía uniforme y luego me hice una coleta baja, y ya lista bajé para ayudar a acomodar la mesa y poder dar inicio al desayuno.
-¿Quiere que le ayude en algo más sta. Macready? - pregunté ya ansiosa por comer.
-Solo déjales saber a los Pevensie que ya está el desayuno, y diles que bajen.- me dijo con un tono de enojo.
Me dirigí al cuarto de los Pevensie y toque la puerta 4 o 5 veces pero nadie contestaba.
-Oigan el desayuno está listo, ya pueden bajar.
-Está bien, en seguida bajamos- contestó Peter con una voz un poco ronca, parece que apenas se despertó.
Bajé por fin a desayunar, y muy feliz porque ya no comería sola, ya que la Sta.Macready siempre comía fuera o con el profesor Kirke, ya saben, hablando de cosas de adultos.
-Buenos días- escuché decir a Lucy con una sonrisa gentil.
-Buenos días pequeña- dije también con una sonrisa.
-Oye Wendy, ¿Te gustan los libros?- me preguntó Susan.
-¿Bromeas? Los amo- dije bastante entusiasmada ya que tendría una amiga que lee libros al igual que yo.
-¿Me podrías mostrar donde hay algunos?- preguntó con una sonrisa triunfante.
-Claro que sí, después de desayunar iremos por unos- Dije con una enorme sonrisa.
Todos terminamos de desayunar y fuimos directo a la sala, Susan y yo con libros en la mano para no aburrirnos, y saldríamos a caminar un rato al jardín, y tal vez luego al bosque.
-Wendy, tu abuelo tiene bastantes libros en esa sala- dice Susan con los libros en la mano.
-Así es, es igual de aficionado que yo cuándo de libros se trata- reí suavemente.
-y ¿A dónde iremos?- pregunta Susan.
-Al bosque, si es que quieres- dije.
-Oh si claro, lo olvide, ¿Puedo llevar a mis hermanos?- pregunta Susan.
-Claro que sí-dije como si fuera la respuesta más obvia- ire por las galletas qué acabo de cocinar, mientras tú ve por tus hermanos- le dije mientras caminaba hacía la cocina
Llegue al jardín en dónde seguramente ya estarían los hermanos Pevensie , pero como no fue así me sente en un arbol a esperarlos, y después de 5 minutos llegaron.
-Perdón por la tardanza Wendy, es qué algunos- dijo recalcando la ultima palabra- no querían venir- dijo Susan volteando a ver a Edmund el cuál solo torcio los ojos.
-No se preocupen solo fueron 5 minutos, vengan- dije algo triste porqué siento que a Ed no le agrado, o simplemente es así con todos, pero no me quiero llevar mal con él.
Los guié al lugar en el que siempre estoy, en serio lo amo, me ayuda a relajarme y ahí he estado casi toda mi vida.
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-Aqui es- había preparado un pequeño picnic para pasar el rato.
-Es, bastante hermoso- dijo Lucy encantada de el paisaje.
-he preparado algo de merienda por si tenían hambre- dije viendo la cara de felicidad de todos, hasta de Edmund, al parecer el si tenía hambre.
Empezamos a hablar y conocernos mientras comíamos y contemplabamos la hermosa vista.
-Oigan he olvidado mi sudadera en la mansión- dijo Pet- y está empezando a hacer algo de frío.
-Igual yo- contesta Susan.
-y yo- dice Lu
-Pero no esta haciendo frio- dijimos Ed y yo al unísono, nos volteamos a ver con cara de confusión.
-Bueno, entonces vendremos enseguida- dijo Pet mientras caminaba hacía la mansión con sus hermanas.
Se formo un ambiente tenso al quedar Ed y yo solos, supongo que era normal ya que no nos conocíamos y el era bastante cerrado.
-Ed cuentame cuántos años tienes- dije rompiendo el tenso silencio.
-Um, 13...13 años- dijo algo distraído.
-En serio?- dije asombrada.- yo igual.
Ed hizo una pequeña sonrisa apenas visible.
-Bueno empezare desde el principio,- aclare la voz para empezar a hablar- Mi nombre es Wendy, Wendy Saphira Howland- dije.
-Con Wendy me basta- dijo Ed.
Yo solo lo veía esperando su respuesta, el al notarlo empezó a hablar
-Yo soy Edmund Pevensie- dijo.
-Bueno, es un placer-dije
-igualmente- me contestó.
-Bueno, cuándo llegue aquí tenía 7 años, ya que mis padres me dejaron con mi abuelo, el profesor, y aquí he estado viviendo toda mi vida, en especial en este lugar ya que amo estar en paz por así decirlo y disfrutar de la naturaleza, pero no todo es ventaja, la sta.Macready es irritable casi siempre, pero es una excelente ama de llaves, pero aveces mi abuelo dice..
-Dios, las chicas hablan demasiado- dijo Ed.
-Exacto! Eso dijo, las chicas hablan dema.....mhm?- dije entendiendo a lo que se refería- oh.
En ese momento llegaron los hermanos bien abrigados.
-Wendy no mencione que te quedaron bastante ricas las galletas verdad?- dijo Lucy
-Muchas gracias Lu, la repostería es una de mis habilidades, tal vez luego podamos cocinar algo juntas- le dije a lo que ella con una sonrisa asintió.
En ese momento sono la campana de la sta.Macready indicandonos que era hora de ir a comer.
Y ya en la noche fui al cuarto de los Pevensie para asegurarme de que no les faltara nada y a platicar un rato.
