Miércoles

6.1K 1K 849
                                    

—¡Tienen que ayudarme!— llegó corriendo Jake a la mesa de sus dos amigos, estos dos casi saltan de la impresión tras que alguien casi se estampara frente a ellos.

—¿Q-Qué? ¡Ah, mierda! Me asustaste— dijo HeeSeung golpeando su cabeza.

—Eso no importa, ¡ya tengo a mi modelo!

—¿Enserio, hyung?— cuestionó JungWon moviéndose un poco para que el australiano se sentara a su lado.

—Ayer...— tomó un poco de aire para recuperarse, debía hacer más ejercicio en definitiva— Ayer fui solo al parque porque HeeSeung nunca llegó y... Y vi a el chico que les he contado, ¡es perfecto! 

—¿Hablas de el chico que le da tacos a los pájaros?

Jake le dio una mala mirada para devolverle el golpe en la cabeza. JungWon soltó una carcajada.

—La da pan a las palomas, idiota.

—Ya, pero hyung, ¿acaso usted le habla? Jamás había mencionado algo de él.

Buen punto...

Y es que en ese par de meses que había observado a el chico jamás le había hablado, es decir, imaginen esto:

Observan a alguien durante un tiempo, logran describirlo como la persona más jodidamente hermosa del universo, incluso han pensado en pedirle que les ayude con su tarea, pero... ¡Esa persona ni siquiera muestra interés en ti!

Si le rechazara, no podría soportar esa clase de humillación. 

—No...

—Pues háblale y pídeselo, es fácil— habló el mayor de todos, como si en realidad lo fuera.

No era fácil hablarle, no si se trataba de Jake. Digamos que no era la persona más social de el mundo, acostumbraba a trabarse al hablar cuando no era a sus amigos y no estaba dispuesto a humillarse de esa forma.

—Podría acercarse sutilmente y luego charlar un poco, sobre sus intereses y esas cosas, es lo que yo haría— habló el menor jalando el suéter de HeeSeung por puro gusto y entretenimiento, era un milagro que este no le haya soltado un golpe. A veces HeeSeung era... Un poco raro, no sabías qué esperar de él.

No sonaba mala idea, si en verdad quería que el chico posara para él debía hacer sacrificios...

¡¿Lo ven?! Algo tan simple como hacer una propuesta le sonaba tan difícil.

Además, dejando de lado ese tema y hablando en serio, solamente tenía el día en curso y el siguiente para hacer esa sesión de fotos y presentarla el viernes.

Ahora lo que quería era llorar.





—Usted puede hyung— susurraba JungWon mientras se situaba tras de él.

—Tú puedes, imagina que charlas con alguien de nosotros— animaba HeeSeung.

Los tres individuos se encontraban en la banca de aquel parque, lucían sospechosos, pero nada fuera de lo común, sólo dos amigos apoyando a un tercero.

Jake se armó de valor, acomodó su chaqueta negra y suspiró. ¿Qué podía salir mal?

Asintió para sí mismo y comenzó a caminar a la banca de enfrente, en ella, el chico de piel pálida se encontraba con las palomas a sus pies lanzándoles pan.

Su paso era lento pero seguro, mantuvo una pequeña sonrisa y las pequeñas rocas que había en el camino crujían pacíficamente.

Todo iba bien hasta que...

No se dio cuenta de que las palomas seguían ahí, por ende siguió caminando y las aves se asustaron, elevando el vuelo inmediatamente y consiguiendo golpear su anatomía con sus alas.

Frente a él, el chico de sus sueños lo miraba curioso y poco a poco una sonrisa se posaba en sus labios cereza, al parecer le parecía gracioso.

Detrás de él, HeeSeung y JungWon se carcajeaban sin parar —sin dejar de lado la discreción—.

La suave risa de alguien frente a él hizo levantar su mirada cuando todas las palomas volaron; él.

Gracias a una desgracia para él, lo había hecho reír. Al chico de linda sonrisa.

Finalmente él sonrió también.



musa ☆ jakehoonWhere stories live. Discover now