Tentación - En proceso de corrección

34. Cerca de la Perdida.

-Me encantan las ferias. - Murmuro viendo el lugar.

Bajamos del auto y me apresure a tomar su mano, no quería soltarla nunca jamás.

Nos acercamos a un juego donde tienes que derribar unas botellas con un pelota.

-¿Puedes derribarlos todos? -Pregunto Taylor con diversión.

-¿Dudas de mi capacidad?

Se encogió de hombros con una sonrisa burlona. La mire con los ojos entrecerrados.

-Los voy a derribar todos y voy a ganar el peluche mas malditamente enorme para ti... Solo para que no dudes de mis habilidades nunca jamás nena.

Se empezó a reír y sonrei, amaba ese sonido.

Pague por un turno al muchacho que se encargaba del juego y él me dio cuatro pelotas, soy bueno en estas cosas, eso no lo dudo, pero siempre existe la posibilidad de perder, así que espero que mi suerte no este muy jodida. Cuando nos alejamos del juego, Taylor había terminado con un oso de peluche casi de su tamaño y uno pato mas pequeño pero igualmente grande que había ganado ella.

Subimos a la montaña rusa y otros juegos mecánicos que podrían hacerte vomitar, en el momento que nos acomodamos en los asientos de la rueda de la fortuna pase un brazo por encimas de sus hombros y la atraje a mi para resguardarla del frio. La rueda comenzó a moverse.

-La vista es increíble. - Murmuro viendo el panorama bajo nuestros pies.

-Es mas que increíble. -murmuré sin apartar la vista de ella.

Sus mejillas tenían un hermoso rubor rosado y su nariz estaba roja por el frio. Sus ojos cafés tenían un brillo que solo aumentaba su belleza, pero no era eso lo que mas gustaba, me miraba con una gran sonrisa que se reflejaba en sus ojos y sabia que yo había causado esa alegría.

Estire mi mano y tome su mentón, nos miramos durante unos segundos.

-Supe que te quería conmigo desde aquella vez que le partiste la cara a Mike. - Confese.

Ella sonrió de manera dulce.

-Yo lo supe desde que apostaste por mi la vez que peleé con Emily. - Contesto.

-Apostaría por ti de nuevo, sin dudar.

Dije antes de acercar mis labios a los suyos y besarla. Había extrañado sus besos, su sabor, la textura de su piel bajo mis dedos, su delicioso aroma que se queda en mi después de estar tanto tiempo abrazados.

Sus labios se sentían suaves en los mios, no era un beso cualquiera, éste transmitía todos mis sentimientos por ella, era la afirmación de lo mucho que la amaba y una disculpa por todo lo que paso antes.

-Te amo. - Susurro por encima de mis labios cuando nos separamos.

-Me encanta escuchar eso nena.

Recargo su cabeza en mi hombro y disfrutamos del momento.

-¿Puedo colarme por tu ventana? - Pregunte mientras abría la puerta del asiento trasero.

-Tal vez, será difícil que entres, de verdad me da un mini infarto cuando te veo salir o entrar por mi ventana. - Contesto pasandome los cinco conejitos de peluche, el pato que gano y en pequeño pez Betta que habíamos obtenido en un juego.

-Encontrare la forma ¿me darás ese también? - Pregunte señalándo el enorme oso en sus brazos.

Negó con la cabeza.

-No pienso soltarlo

-No sabia que eras tan sentimental gnomo.

Se encongio de hombros.

-Mi novio lo gano para mi.

Sonreí. Ella podrá ser muy ruda, patear el trasero de cualquiera y todo lo que quieras, pero no deja de ser una chica linda y tierna. En el fondo Taylor Jenner es todo ternura, puedo dar fe de eso.

-Así que vuelvo a ser tu novio ¿eh?

-Solo si me aceptas de nuevo.

Con un brazo la acerque a mi y planté un sonoro beso en su mejilla que la hizo reír.

-Acepto.

Subimos al auto y no pude borrar la enorme sonrisa en mi rostro, comencé a conducir a la casa de Taylor.

-Si hace unas horas me hubieran dicho que estaríamos juntos... Me hubiera reído mucho y para ser honesto hubiera golpeado a la persona porque con lo nuestro no se juega.- Dije mientras parábamos en un semáforo en rojo.

-Tranquilo chico grande...- Comenzó a decir con una sonrisa que se borro inmediatamente.

Una luz llamó mi atención y mire a mi lado, fuera había una luz blanca que se acercaba de manera rápida.

Entonces todo ocurrió en cámara lenta, gire el volante por impulso, escuché un ruido horrible cuando el otro auto impacto con nosotros, nos movimos bruscamente y chocamos con un poste, los cristales se rompieron y senti dolor en mi hombro y mi cabeza, mire a Taylor, tenia los ojos cerrados y había un hilo de sangre corriendo por si frente. Quería estirarme y tocarla pero no pude, me pesaba demasiado el brazo, todo me pesaba, incluso los párpados.

Antes de que la inconsiensia me llamara lo único que pude pensar fue: Ella no.

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Volví!!!  (8

Oh dios... No se si este capitulo les gusto.

Comenten que les pareció.

Probablemente el próximo capítulo sea el epilogo.

Regalenme un VOTO!!! :')

hasta la próxima.

-Laura Sànchez.