37. Recogiendo pedazos

72 9 0
                                    

Van dos semanas desde ese día que decidí despedirme sola, una vez te dije que cuando realmente quiero irme lo hago sin hacer ruido, a lo que tu solo reíste y me dijiste: Sé que nunca te irías sin despedirte de mi. Pero eso lo decías porque no me creías capaz de alejarme...Pero ya lo hice.

No diré que estos días sin ti han sido fáciles, porque nunca te había alejado tanto. Han sido muy dolorosos y he tenido la necesidad de gritar desgarradoramente por el hueco que habita en mi corazón desde que te fuiste.

Pero estoy sanando, y se que estoy sanando porque ahora sonrió y ya no siento que me ahogo.

Las redes sociales joden mucho a la gente, y es un método de tortura camuflado al que todos accedemos, así que bloqueé todo lo que podría relacionarse contigo, eso me ha ayudado, tómenlo de consejo.

Dos personas me ayudaron con sus palabras sabias y su recorridos pensamientos.

Fui a ver a tu madre y ella vio como me desmoronaba con solo mencionarte, estaba cansada de hablar de lo mismo, pero ella lo único que me dijo fue: Él no te valora, pero cuando se de cuenta que no te tiene va a sentir como si hubiera perdido una extremidad y ahí va a buscarte de nuevo.

Esa noche en la que lloraba de dolor acompañada de mi madre, sus palabras tan sabias se quedaron en mi mente: Nunca florecerás con alguien que te riega de vez en cuando, ese día lo entendí. 

Entendí que está bien estar mal, que yo amé bien pero tu no tan bien, que no puedo permitir que apagues mi brillo, que está bien si mi corazón necesita mas tiempo para aceptar lo que mi mente ya sabe.

Mi corazón ya lo comprendía, así que recogió el desastre que hiciste y decidió empezar a arreglar el lugar.

Pensamientos ObsesivosWhere stories live. Discover now