— No dudo que tú vivo serías un completo gallina que no soporta a un fantasma inofensivo. 

— ¿Quién dijo que soy inofensivo?

— Lo único que intentaste para hacer que me vaya es decirme "vete", mucha amenaza no veo. 

Sakusa juraría que estaba a un paso de gruñirle por la frustración.

— Bueno, parece que vamos a tener que convivir por un tiempo hasta que decidas irte.

— Yo ya te dije que pagué por estar aquí, tú eres el que no aporta nada y que debería irse.

El rubio frunció su ceño, alzando sus manos como si estuviera a punto de decir lo más obvio del mundo.

— Morí aquí, no pienso irme de mi casa.

— Qué asco no quiero ni que me cuentes de cómo moriste, me imagino que no fue nada higiénico.

— Qué poco sensible eres con un muerto.

— Sí, sí, una pena.

Mordió su lengua con levedad. No tenía nada personal en contra de su nuevo compañero, Sakusa simplemente tenía un problema con lo brusco que era con todos a la hora de relacionarse. Sabía que debía empezar a cambiar eso antes de que siguiera estando completamente solo. Antes de que más gente llegase a abandonarle por lo mal amigo que era...

— ¿Cómo te llamas?

— ¿Eh?

— Si no tenemos más opción que estar juntos aquí dime tu nombre.—El fantasma se recostó literalmente su televisor. Si no supiera que no podía botarlo ya le habría gritado.— Yo soy Atsumu Miya.

Estuvo a punto de decirle que ya lo sabía, pero no iba a dar explicaciones tan rápido.

— Kiyoomi Sakusa.

— ¿Tus amigos te dicen de alguna forma? A mí mis cercanos me dicen Tsumu.

— No tengo amigos.

— Todos tienen amigos.

— Yo no.

— ¡Yo seré tu amigo entonces! 

— No necesito de un fantasma para que sea mi amigo.

— Yo creo todo lo contrario.

— ¿Te puedes bajar de mi televisión?

— Siempre quise estar en la tele, ahora puedo estarlo literalmente.—Dijo Atsumu soltando una risa, pasando por el televisor para jugar.— Tiene sus ventajas estar muerto.

— Yo quiero estarlo en este momento.

— Qué aburrido si esperas la muerte, ¡tienes que vivir!

— Lo decía porque no quería estar aquí contigo.

— Ah.

Lo peculiar de Atsumu que empezó a notar era que a pesar de que por momentos parecía enojado por las cosas que le decía poco tardaba en buscar nuevas conversaciones y temas para poder conocerle un poco más. 

Ya hasta le había logrado sacar la información de que trabajaba como bailarín contemporáneo profesional, que hacía ballet y un poco de patinaje artístico en su tiempo libre. Le dijo que le gustaban los perros que no tendría un animal por todo el cuidado que hay que tener. Que no tenía mucho tiempo para leer pero que disfrutaba de hacerlo. Y también que su comida favorita eran las que tenían gran cantidad de verduras.

Todo eso en las horas que tardó en desempacar todo.

Suponía que había pasado el suficiente tiempo por su cuenta sin tener a nadie con quién hablar que ahora que había alguien que no se asustaba de su condición de fantasma, quería aprovechar de ello.

Us || SakuAtsu Fluff WeekWhere stories live. Discover now