Parte 15

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Durante siguientes días, Samuel no se atrevía decirle a Carla que su mama sufre de leucemia. Se le hacía muy difícil estar con ella a solas, disfrutar en sus caricias sabiendo que pronto tendría que romperle el corazón y darle la noticia. Cada vez que Carla se acerca el dar varios pasos atrás, no puede mirarla en los ojos cuando tiene que cargar con un secreto así.

Esa noche le hizo la pregunta más extraña mientras estaban viendo una película romántica, la pregunta que trae muchos recuerdos del pasado.

-¿Cómo se sentías tu cuando tenias que guardar el secreto de Polo? – cuestiona al seguir mirando la pantalla

Carla levanta la cabeza, ve que Samuel mira película pero le hizo la pregunta y la pregunta tan extraña que siente dolor en todo el cuerpo.

Cuando nota que Samuel es más serio que nunca se siente mal, se aparta un poco de él. Samuel le mira esperando para la respuesta, no entiende su alejamiento.

-¿Por qué me lo preguntas?

-Quiero saber cómo se siente tener que cargar con un secreto, nada más.

-Pues, a mi me duele recordarlo, siempre imagine un mundo mejor donde Polo nunca había matado a Marina, Marina y Nano tuvieron el bebe y tu y yo...

-¿Tu y yo qué?

-Tú y yo estemos juntos, teniendo una relación sana y feliz para siempre.

Samuel sonríe un poco tímido.

-Mi amor, nosotros vamos a ser felices pase lo que paso, ahora que estamos juntos no haya nada que podrá destruir nuestra felicidad – le prometa

Carla sonríe pero aun se siente diferente por la pregunta que acaba de hacerle, en cuanto Samuel baja mirada se da cuenta que algo sucede, algo que no está bien y no tiene nada que ver con el futuro de esa relación.

Cuando Carla quiere tomarlo por la mano el chico se siente más extraño que nunca, le duele tener que hacerla sufrir con descubrimiento de enfermedad de su mama. Lentamente Samuel deja de tocar su mano lo que le hace aun más dolor que lo que va tener que contarle.

-A ti te pasa algo... - murmura muy seria

-Estoy de mal animo, debe ser eso.

-Samuel, no me mientes, que no me gusta cuando me mienten.

Samuel le mira, se acerca y le da un beso en la mejilla.

-Te amo, preciosa.

-Entonces, dime qué te pasa y lo resolvemos ahora mismo.

Para Samuel no es nada fácil hacerlo, a pesar de todo está pensando en felicidad de su novia, sabe que Carla es una chica frágil y cosas como esas podrían acabar con su felicidad y hacerle sentir pura tristeza.

Nadie se sentiría mejor si fuera ella, nadie podría soportar perdida de una madre aunque esa mujer sabía ser cruel y muy mala hace años. El cambio es notable pero no suficiente como para poder pelear contra leucemia.

Lo que Beatriz más lamenta es hacerle caso a Teo, hizo muchas cosas por él, demasiadas cosas que hicieron que su relación con Carla se vuelve más fría y así las dos se convirtieron en extranjeros.

Perdió los mejor años de su hija por una ambición y poder, eso le dolía mucho y sabia que no puede hacer nada para que Carla le vuelva mirar como antes.

-¿Samuel?

-No pasa nada, te dije.

-No te creo nada, te toco la mano y te pones como si quiero hacerte daño. ¿Qué te pasa conmigo, Samuel? - cuestiona con voz derrotada

Samuel siente mucha pena y culpa, no sabe cómo hacerlo, niega con cabeza y se levante de sofá.

-Vamos a dormir, mañana hablemos.

Carla le mira con ojos llenos de lágrimas, sigue creyendo que Samuel le oculta algo y que hay algo que le molesta en esa relación.

-No, te voy a pedir que te duermas en el sofá.

-Carla...

-Buenas noches, Samuel – dijo y se fue hacia habitación del castaño

En cuanto se metió en la cama podía oler aroma de Samuel, todo en esa habitación le hizo sentirse como si él estuviera allí. Samuel no podía dormir, sin embargo... decidió que mañana será el día cuando por fin le diga la verdad, tendría que hacerlo ya que Beatriz no tendrá mucho tiempo para pasarlo con su hija.

El siguiente día Carla se levanto temprano, cuando salió de habitación vio a Samuel aun dormido, quedo dormido en ropa de anoche y ella sonríe de manera más delicada, le parecía tierno y tranquilo. Camina hacia la cocina con mucho cuidado para no despertarlo pero en cuanto comenzó preparar el desayuno Samuel se despertó de repente.

Abrió los ojos y se dio cuenta que el ruido llega de cocina, primero pensaba que quizás era Guzmán porque el tenia el llave y también sabia hacer el desayuno muy temprano, algo que aprendió desde que se mudo de casa de sus padres.

Se acerco a la cocina y vio a Carla, entonces se sonríe y se acerca a ella por detrás, abrazándola.

-Buenos días, preciosa – dijo al darle beso en el cuello

Aunque ella quería estar enojada con el no podía, sonríe y da vuelta.

-No mereces ni un solo beso, Samuel.

-Te estás pasando un poco, además jamás deberías castigarme con abstinencia porque serás la primera en romper las reglas.

Carla rodea manos sobre cuello de Samuel, le besa en los labios, siente manos de Samuel cayendo sobre su cintura, tocándola, acariciándola. El desayuno pronto podría quemarse si siguen así, sin duda pero Carla quita camisa de Samuel y le besa el cuello rápidamente.

Samuel gemía, miraba ese desayuno que está casi en fuego y así se sentía el también – quemando entre caricias de Carla. Aunque sabía que dentro de pocos minutos tendrá que decirle lo que sucede decidió seguir disfrutando de esos besos suaves de su novia y un desayuno que pronto podría tirarse en la basura por falta de cuidado.

Después de ti |CARMUEL|Onde histórias criam vida. Descubra agora