WWE Imaginas Chica x Chica

DESEOS PROHIBIDOS **Smut** [Parte 4 y final] (Alexa Bliss x Sasha Banks)

Al llegar, de primeras, no pude distinguir quien era, pero conforme me iba acercando...no podía creerlo.

En el centro del ring, había una pequeña mesa baja perfectamente preparada con dos copas, vino y sushi. Y alrededor de la mesa, pétalos de rosa esparcidos.

Y apoyada sobre las cuerdas, Alexa mirándome con una gran sonrisa.

"Alexa..."

Había conseguido dejarme sin palabras. Todo aquello era increíble. Desde que ella estuviese aquí, hasta lo que había preparado sobre el ring.

"Hola Sasha. Permíteme"

Rápidamente se levantó y se acercó apoyando su cuerpo en la cuerda intermedia y con sus brazos alzando la superior, permitiéndome así el paso.

"Gracias" entré al ring y me quedé parada observando todo. Alexa se acercó, poniéndose a mi lado.

"Te gusta?"

"Me encanta" dije sinceramente "Pero...como? Y...y cuando?"

Las preguntas salían atropellada y torpemente de mi boca, algo que hizo sonreír a Alexa.

"Pues me ha costado preparar todo esto, no creas. Sobretodo cuando te he visto desnudarte y meterte en la ducha" me miró descaradamente de arriba a abajo, mientras mordía un poco su labio inferior. Me hizo sonrojar un poco. Dios, estaba irreconocible

"Cuánto llevas observándome?"

"El suficiente" respondió con una sonrisa. "Cenamos?"

"Claro"

Nos sentamos una frente a otra. Sacó un pequeño mando de sus pantalones y de fondo comenzó a sonar una música ambiental bastante agradable

"No se te escapa un detalle" afirmé sorprendida, ella se limitó a responderme con un guiño de ojo.

Empezamos a comer. Hablamos de todo y nada a la vez. Resulta que teniamos más cosas en común de las que creíamos. Fue una cena bastante agradable.

"Alexa, puedo preguntarte algo?" dije dando un último sorbo al vino

"Dispara"

"Esto es...una cita?"

Me asustaba un poco la pregunta, pero más me asustaba la respuesta. Aún asi, la hice. Necesitaba saberlo.

"Te gustaría que lo fuese?"

"Eso es trampa. Te pregunté primero" por nada del mundo iba a responder a eso primero. Me moriría si no obtenía feedback en la respuesta afirmativa que daría

"Si. Para mi lo es" dijo mirándome fijamente a los ojos. "Se que después de esto, tendrás vía libre para destrozarme, pero..."

"Por qué iba a destrozarte?"

"Porque me he enamorado de ti"

Aquella rotunda afirmación, hizo que mi corazón se desbocara. Me acerqué algo más a una Alexa que tenía agachada la cabeza, seguramente esperando un golpe emocional que ni mucho menos iba a recibir. Coloqué mis dedos suavemente en su mejilla y la obligué a mirarme

"Repite eso"

"Estoy...enamorada de ti, Sasha"

"Alexa..." sonreí y no pude más que besarla. Un beso suave, dulce. Y correspondido, a diferencia de nuestra última vez. "Yo también estoy enamorada de ti"

"Qu..que?"

"Que yo también estoy enamorada de ti" vi como una lágrima escapaba de sus hermosos ojos y me apresuré a atraparla con mis labios

"No puedo creer que esto esté pasando" dijo mirandome con una ternura increíble. "Desde nuestra última vez...aquel beso..."

"Yo tampoco pude olvidarlo" la corté. "Y me enfadé por ello. Me enfadé por no poder olvidarte. Me enfadé porque trastocaste todos los planes. Pero sobretodo me enfadé porque, por primera vez en mi vida, no quería arreglar nada de eso. No quería seguir poniendo ladrillos al muro de mi corazón. Tú has dinamitado todas mis defensas, Alexa. No te voy a mentir, tengo miedo...nunca sentí nada parecido a esto que siento contigo. Pero se que tus besos, tus abrazos, todos los momentos a tu lado, van a espantar a esos fantasmas" la cogí de la mano, estaba temblando. "Te quiero, Alexa"

"Te quiero, Sasha" esta vez, fueron las lágrimas las que llegaron primero a mis labios, y no al revés, pues no podíamos parar todo este torrente de besos, lágrimas y afloramiento de sentimientos. Y lo que era más importante: no queríamos.

Nuestras lenguas se encontraron por primera vez, dándose una calurosa bienvenida. Poco a poco, fui tumbando a Alexa sobre el ring y me coloqué encima de ella.

Dejé un pequeño beso en su nariz que la hizo sonreír, antes de comenzar a explorar suavemente su cuello, mientras sus manos acariciaban mi espalda bajo la camiseta.

Me incorporé un poco y yo misma me deshice tanto de la mía como de la suya. La volví a tumbar y bajé hasta sus pechos, sin dejarme un centímetro de piel sin besar.

Mi lengua comenzó a juguetear con sus pezones. Ella comenzó a gemir suavemente, hasta que dejé un pequeño mordisco que la hizo gritar algo más de placer, para suspirar nuevamente aliviada cuando acto seguido mi lengua volvía a hacer acto de presencia para sanar ese placentero dolor.

"Me vas...a volver loca" dijo Alexa con algo de dificultad, sin abrir los ojos ni dejar de escapar una sonrisa de sus labios.

"Eso espero" afirmé sonriente yo también

"Eres mala..." se incorporó un poco para coger mi cuello suavemente y volver a besarme, mientras ahogue en él los gemidos que salían de mi boca al sentir como mis pechos eran manoseados por sus manos, y mis pezones, pellizcados.

"Tú no es que seas...muy buena tampoco" bromeé pegando mi frente a la de ella

Su respuesta fue morder suavemente el lóbulo de mi oreja. Alcé mi cabeza, dejando vía libre a los labios de Alexa en mi cuello.

"Mhmmm...Lexi..."

"No sabes cómo echaba de menos el sabor de tu piel..."

Tragué saliva cuando esta vez fue ella quién me tumbó, no sin antes quitarme los pantalones, con ayuda de mi parte al encorvar mi cuerpo y facilitar su tarea.

Dejó pequeños besos sobre mis húmedas bragas, haciéndome desesperar

"Alexa, por favor, yo...te deseo"

"Repite eso" sonreí

"Te deseo. Te deseo. Te deseo"

Decidió entonces apiadarse de mi, quitar mis bragas y lamer lentamente cada uno de mis rincones más íntimos.

Mis gemidos reverbenaban por todo el estadio vacío de gente, pero un ring lleno de sentimientos que estaban fluyendo libremente.

"No pares...no, no pares. Dios! No pares!"

Lejos de parar, Alexa aumentaba y aumentaba el ritmo de sus embestidas. Su lengua, como actriz principal, pronto fue acompañada por unos secundarios de lujo como eran sus dedos dentro de mi. Primero, uno al escenario. A los pocos segundos, otro de ellos. Así hasta hacerme explotar. Llegué al orgasmo más profundo, más intenso de toda mi vida. Alexa sacó sus dedos con cuidado y se los lamió hasta no dejar nada de mí en ellos, antes de tumbarse a mi lado.

Nos quedamos abrazadas, mientras trataba de recuperar el aliento.

"Sabes que esto no va a quedarse así, verdad" la miré mientras acariciaba su pelo. Ella asintió.

"Lo se. Pero esta vez, no tenemos ninguna prisa. Al fin y al cabo...tenemos toda una vida para empatar"

Nos besamos una última vez antes de que nuestros ojos se cerraran, sabiendo a ciencia cierta que, cuando despertasemos, seguiríamos juntas. Y lo mejor de todo: nada ni nadie podría hacer nada por evitarlo.