...

129 13 4
                                    


Sería una mentira decir que no te extraño, que no me haces falta, que estoy mejor sin ti.

La verdad es que estoy hecha un desastre. La verdad es que estoy en la mismísima mierda y que mis emociones están en un remolino caótico sin fin.

Hay días en los que me despierto y siento tu ausencia tanto física como emocional. Echo de menos tu apoyo, tu cariño, tu calidez. Extraño aquellas tardes en las que salíamos a la avenida y nos sentábamos en las banquetas a conversar. Aún con mascarilla podía ver lo feliz que estabas de estar conmigo, tu sonrisa pasaba a tus ojitos. Dios santo, cómo extraño verte sonreír, cómo extraño esa sonrisa que ponías a penas me divisabas. Tus ojitos se ponían mas chinitos que de costumbre y era la vista más hermosa que podría existir.

Aún recuerdo el día que fui a sorprenderte en tu cumpleaños. Estaba súper emocionada por verte después de meses. Te preparé un pastel y lo decoré de tu color favorito, azul, le puse también fresas, una de tus frutas favoritas. Cuando abriste la puerta de tu casa te veías tan bella, te habías maquillado con brillitos y un delineado simplemente perfecto. Por un momento se me olvidó que tenía el pastel en mis manos y casi se me cae por querer abrazarte. En mi mente aún se reproduce el recuerdo de tu sonrisa y lo feliz que te veías cuando te dije que podía quedarme un rato contigo. Volver a besarte, abrazarte, sentirte, fue lo mejor que pudo haberme pasado, volver a hacerlo después de meses era como encontrar un oasis en medio del desierto.

Muchas veces me torturo la mente preguntándome por qué rayos terminé lo nuestro. Sí, no era perfecto, pero nada lo es, puede aparentar serlo mas no es así. Me siento culpable, porque ahora repasando todo lo sucedido, tienes todo el derecho de mandarme a la mismísima mierda. Quedamos en mejorar y al día siguiente decidí terminar la relación. Tomé una decisión muy precipitada y no sabes cómo me arrepiento de eso.

Te extraño y no solo lo bueno, sino todo lo que englobaba tenerte, todos tus defectos, tus virtudes. Eres una persona maravillosa, tienes un corazón tan bonito y amable. Sí, a veces explotas, pero debes aprender a manejar eso poco a poco, cosa que ya estás haciendo y de ello me siento muy orgullosa. Eres tan hermosa tanto por dentro como por fuera y me alegra que por fin te estés dando cuenta.

¿Sabes? Es chistoso, tú misma me dijiste que esto pasaría. Que me daría cuenta de mis acciones más adelante, pero que lamentablemente ya sería demasiado tarde porque tú ya habrías seguido adelante. Supongo que soy de esas personas que aprenden a la mala. Sé que no te mandaré esto, pero lo escribo imaginando que te lo estoy diciendo a ti, que estamos sentadas en tu cama conversando, nada de maquillaje, nada de cosas superficiales, solo tú y yo conversando, siendo honestas la una con la otra. Y, siguiendo el concepto de honestidad, estoy genuinamente feliz por ti y el progreso que estás logrando contigo misma, pero a la vez estoy triste, porque te extraño y sé que no volveré a tenerte. Me dejaste muy en claro que ya no sientes nada por mí y bueno, tampoco es que pueda hacer mucho al respecto. Tomaste tu decisión al igual que yo, y seguiste adelante.

Solo quiero que estés bien.

Te extraño.

Te quiero.

Te amo.

No sé qué soy. [LGTB]Där berättelser lever. Upptäck nu