capítulo 4

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La cosa es, que Louis es sincera y secretamente atrevido, y muy fácil de calentar, y por mucho que le molesta toda esta situación misteriosa porque nunca ha sido demasiado bueno con las sorpresas y el suspenso, él realmente no puede ocultar la inminente excitación que se encuentra recorriéndolo en esos momentos.

La sola idea de utilizar un juguete sexual durante su horario laboral tan sólo por la petición de un sujeto que no conoce, pero que ha estado cortejándolo de cierta manera con regalos y flores divinas y que tiene este apodo que ciertamente suena lo suficientemente interesante como para llegar a querer pronunciarlo en ciertas circunstancias demasiado íntimas, sólo provoca que los vellos se le pongan de punta y que su piel tome esta temperatura ferviente que lo llega a dejar sin demasiado aliento.

Se relame los labios con las manos aún temblorosas y las rodillas muy débiles, su corazón continúa latiendo en su pecho con rapidez, golpe abrupto tras otro sin la aparente posibilidad de encontrar un ritmo decente mientras sus ojos vagan una y otra y otra vez por aquellas palabras, por esa petición tan indecente que lo obliga a morderse la boca y a pensar.

Quiere pensar en qué va a hacer, en cuáles son sus verdaderas opciones, en qué puede pasar si acepto, qué pasaría si no lo hace, quién será la persona detrás de todo esto y por qué se está tomando todas estas molestias tan sólo porque está supuestamente interesado en él.  Y no lo entiende, aunque quiere hacerlo no lo consigue, menos ahora que su cabeza gira y vuelve al pensamiento del anillo, y a la idea de usarlo en público y exponerse a que un desconocido lo utilice en su contra mientras trabaja o hace lo que sea que vaya a hacer mañana.

Louis jadea ante aquella consideración, y quizás el aliento se le va por otro segundo y necesita volver a jadear porque aquella travesía suena tan excitante ahora que la tiene presente, y por más que lo intenta no puede evitar pensar en sí mismo siendo algo así como torturado sexualmente por alguien que parece tener el control de la situación, dejándolo con las manos vacías pero aun así con la capacidad de decidir si van por todo o por nada.

Se tiene que pasar las manos por la cara en un gesto de frustración cuando realmente se está poniendo caliente con todo esto, se estruja incluso los ojos cuando no puede creer que en serio tiene ese cosquilleo en la parte baja de la pelvis y que su agujero se contrae de manera involuntaria en todas esas ocasiones en las que piensa en todo lo que puede suceder.

Hay una infinidad de probabilidades, y debería prestarle atención a las más importantes, pero entonces abre los ojos y tiene la mirada nublada y está esa corriente

Y ya es inevitable, lo sabe cuándo no puede tener otra cosa en la cabeza, así que chasquea la lengua y se pone de pie con un gruñido de por medio, y agradece ser un hombre joven pero adulto, capaz de tomar sus propias decisiones y de ser consciente de ellas, o por lo menos eso es lo que se dice cuando da dos pasos hacia atrás para poder agacharse delante de la cama y sacar la caja de zapatos que tiene allí de bajo.

Se muerde el labio cuando la abre y el mismo cosquilleo de hace unos segundos vuelve a pasar por su espina dorsal hasta, una vez más, llegar hacia su entrepierna, que con cada segundo se estremece contra sus calzoncillos, que se vuelve insoportable en conjunto al anhelo de su intimidad trasera que no deja de contraerse ante el anhelo de ser ocupado.

Deja escapar el aire con cierto temblor inevitable y sus orbes azules se pasean por la cantidad de juguetes que tiene allí dentro, de varios tamaños, con diferentes funciones y formas, y aunque tiene esta desesperante necesidad de utilizarlos todos hasta quedar agotado, hasta que sienta que se ha desgastado lo suficiente como para sacarse todo ese deseo que tiene enterrado por dentro.

No obstante, sabe que no puede hacerlo, que no debe ser imprudente ni dejarse llevar por el lívido hasta ese punto, que debe quedarse con el más mínimo ápice de cordura porque de lo contrario volverá a caer por ese vórtice de lujuria en el que alguna vez estuvo y que realmente no quiere volver.

Make daddy proud I ✦ daddykink! [ls] | ✓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora