CAPITULO 61🔫

607 63 6
                                    

Tomando una corbata color azul marino de la cajonera de roble instalada a lado de mi cama, la envuelvo en el cuello de mi camisa y la ajusto de modo que quede derecha

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Tomando una corbata color azul marino de la cajonera de roble instalada a lado de mi cama, la envuelvo en el cuello de mi camisa y la ajusto de modo que quede derecha.

-¿Estás listo? –me llama Verónica desde la sala.

Dando por terminada mi tarea me miro unos segundos en el espejo para después salir a su encuentro.

-Listo –anuncio de inmediato mientras ella toma su bolso y salimos del departamento para encaminarnos hacia la limosina.

Una vez instalados y en movimiento ella saca su maquillaje y se comienza a dar retoques.

-¿Tienes todo estudiado? –le pregunto antes de servirme tequila en un caballito y beberlo de un solo trago.

-Sí, tú y yo estamos juntos desde hace medio año ya que nuestros mayores están considerando una posible alianza con un matrimonio, por lo que decidimos viajar a este magnífico lugar para conocernos y tener más privacidad –repite por milésima vez en todo el día.

Guardando su maquillaje me observa con atención mientras vuelvo a servirme otro tequila.

-Bien, recuerda que él es el jefe aquí y que es uno de los más allegados de George, así que nada debe de salir mal –reitero.

-Bueno, si no dejas de tomar caballitos lo más seguro es que todo se vaya a la basura, Montero –refuta con hostilidad antes de acomodar su vestido rojo en el área de sus pechos para que estos sobresalgan más. -¿O es que tienes miedo?

Mirándola mal solo me rio. –Verónica, no seas tonta, yo ¿tener miedo? Inténtalo.

Sin mirarme solo se encoje de hombros mientras observa los edificios que vamos dejando atrás. -¿Entonces por qué estás tan inquieto?

Frunciendo el ceño llevo mi atención a mi reloj y checo la hora, media para las ocho, sí llegamos a tiempo. –No lo sé, desde hace unos días llevo una inquietud puesta sobre mí –digo de manera desinteresada.

-Bien.

Profundizando mi desconcierto la observo mientras ella no se percata de mi mirada, comprobando que algo anda mal. -¿Y tú, qué traes?

No contesta.

-Verónica...

Girándose bruscamente hacia mí me mira con disgusto.

¿Y ahora que hice?

Está a nada de decir algo pero en eso el chofer habla por los intercomunicadores y nos anuncia que estamos a dos minutos de llegar al restaurante. Sin perder tiempo me acomodo mi traje negro y Verónica se ve por última vez al espejo.

En cuanto llegamos bajamos y entrelazamos nuestros brazos.

-Goodnight. Do you have a dinner reservation? –pregunta el encargado del restaurante.-Yes, it is in the name of Damian Leandro Montero –respondo mientras miro al interior, buscando de manera discreta a Lemiur Deg, nuestro socio.-Pgferfect, I'll take them to your table.

EL SECRETO DE LA MAFIA (1)Where stories live. Discover now