Reglas en Zombielandia || KookV || TERMINADA

[veinticuatro]

Los días en el bosque eran casi siempre tranquilos, su mayor problema era que el mal clima los dejara con las provisiones al límite, podían hasta incluso pensar que no había zombies intentando pasar el río que los separaba, eran una gran cantidad pero en esos 9 años habían reducido su número, por lo que suponían habían más personas por el área, o por lo menos el país. Conseguir comida era el problema, hace ya varios meses que no encontraban un ser vivo, ningún venado, conejo o ave; era extraño pero no podían pedir mucho, tenían un pequeño huerto que los alimentaba, aún si repetían mucho las zanahorias y guisantes.

Taehyung revisaba la planta de tomate que había plantado hace un mes, estaba creciendo pero aún no daba ningún fruto, esperaba que pronto lo diera, escuchar las quejas de Mia y Ryujin era divertido pero también cansado.

-No porque la veas sin parpadear va a crecer más rápido -el menor alzó la vista, sonriéndole al chico frente a él, Jungkook le sonrió de vuelta.

-Prestarle atención ayuda -justificó divertido, acercándose al mayor- ¿Hubo alguna novedad?

-Nada, es como si fuéramos los únicos seres con vida -Taehyung hizo una mueca- pero encontramos un manzano -el azabache buscó entre la mochila que tenía y le dio una manzana, el menor sonrió y la tomó.

-¿Crees que crezca aquí? -el castañito buscó entre las herramientas algún cuchillo, cuando lo tenía lavo la manzana.

-Podría ser -Jungkook esperó a que el menor costará la manzana, para dividir la parte comestible de las semillas.

-¿Fueron muy lejos? -Taehyung tomó un pedazo de manzana y se lo dio al azabache, tomando otro para él y comérselo.

-Un poco, casi veíamos la carretera -Jungkook comía más de la manzana- Mia quería ir más lejos pero Hyojong no la dejo y cuando Ryujin supo...

-¡Pudieron haber encontrado más zombies y traerlos aquí! -Ambos voltearon a ver a ambas chicas pasar por ahí, Mia huía de Ryujin.

-Exagerada -Mia se detuvo al verla molesta- Era broma... ¡Ryujinnie!

Ryujin corrió detrás de Mia, Taehyung río ante la escena. Ambas chicas se habían agradado a la semana, al mes eran amigas y luego de tres meses eran inseparables, aún no sabían nada pero suponían que ellas tenían algo.

Jungkook estaba feliz por ella, Ryujin merecía ser feliz, y que mejor que con la chica completamente diferente a ella, eran agua y aceite, y quizás esa era la razón por la que se llevaban tan bien.

-Jinnie tiene razón, pudieron haberse encontrado con más zombies -Taehyung habló luego de volver a ver a las chicas, está vez parecían estar más tranquilas.

-¿Tú también serás dramático? -Jungkook le sonrió divertido.

-Lo seré si es necesario -Taehyung quiso parecer serio, cosa que no consiguió. Rieron un poco- sólo, tengan cuidado, ¿si?

El mayor asintió, tomando delicadamente al castaño de la cintura para acercarlo y atrapar sus labios en un beso. Con una sincronización que los caracterizaba continuaron su beso tan dulce e inocente, Jungkook sosteniendo su cintura y esté acariciando su mejilla mientras enredaba sus dedos en el cabello del azabache con su otra mano.

Llevaban casi diez meses juntos, y aunque se conocían desde hace años cada tiempo juntos representaba conocer algo nuevo del otro, como ahora, que Jungkook sabía que Taehyung tenía una manía con morderse el labio inferior cuando estaba estresado o que odiaba cocinar; y el menor también conocía cosas nuevas sobre él, sabía lo mucho que admiraba a Jichul y que esperaba ser como él o que le encantaba pasar tiempo cerca del río, aquellos pequeños detalles no pasaban desapercibidos para ninguno, querían conocer hasta el más mínimo y eso volvía cada día interesante.