Capítulo 20

61 7 1
                                    

Una hilera de árboles se presentaban delante nuestro, éramos Anna, Catherine, James y yo, a lo lejos vimos otros grupos que también se detuvieron a ver cómo era el Bosque Oscuro.

Definitivamente era fiel a su nombre, apenas y veías las formas de los árboles, una neblina llegaba hasta la mitad de estos, y no se veía ningún tipo de luz. El silencio era sepulcral, cosa que me sorprendió, ¿cómo era posible que todo estuviera tan silencioso cuando estaban allí planeando cuando atacar?

Comencé a ver cómo todos los grupos avanzaban sigilosamente sin vacilar, y nosotros comenzamos a hacer lo mismo, aunque cuanto más nos acercábamos al comienzo del Bosque, más miedo nos daba.

Me coloqué de espaldas contra el primer árbol, y vi cómo James se colocaba al igual que yo en el árbol de alado. Miré a Catherine y Anna, pero ya habían desaparecido, seguramente se habían adentrado aún más.

De repente, el corazón me comenzó a latir con más fuerza.

— Recuerda que con cada paso que des, más cerca estás de tu familia — murmuró James, dándome fuerzas. Asentí —. No me alejaré de ti, en ningún momento. — Volví a asentir, y comencé a avanzar al Bosque.

Todo estaba aún más silencioso.

Tomé el puño de mi espada, apretándolo con fuerza mientras de reojo veía cómo James caminaba a mi lado.

— ¿Y Catherine y Anna? — Susurré. James se encogió de hombros, ambos nos distrajimos un segundo, y allí fue donde comenzó todo.

Un hombre robusto salió de la nada y tomó a James de los hombros, tirándolo al piso.

Quise ir hacia donde estaba él pero algo me hizo volar hacia atrás, varias piedras se clavaron en mi espalda, sentí cómo el dolor se hizo intenso.

Un muchacho que parecía de la edad de James, aunque de cabello y ojos negros, se paró delante de mí.

— Creo que contigo será fácil — dijo con una sonrisa irónica, haciendo bailar la espada que llevaba en la mano.

De repente entendí todo. Era una emboscada.

El muchacho alzó la espada y la bajó rápidamente, casi me la clava si no fuera porque me moví hacia un costado, hice que perdiera el equilibrio con un golpe de mis piernas en las suyas, volví a golpear y esta vez cayó hacia atrás.

Comencé a correr, pero no llegué muy lejos cuando me tiraron hacia un árbol. Perdí la respiración por un segundo. El mismo muchacho estaba frente mío, esta vez furioso, puso una mano con mi cuello e hizo presión. Por reflejo propio traté de quitar su mano, obviamente no funcionó. Al parecer tenía una fuerza sobrenatural.

La respiración comenzaba a hacerme falta, pensé que aquél sería mi fin.

Pero me fijé que no llevaba su espada, y sin embargo, yo aún tenía la mía. Con una de mis manos toqué el puño de mi espada.

El muchacho estaba tan concentrado en que yo perdiera el conocimiento que no vio la espada venir hacia su brazo.

Comenzó a gritar del dolor, se corrió hacia atrás. Y por un reflejo propio, dejé caer la espada al suelo, al ver toda la sangre que emanaba.

Volvió a mirarme con furia, estaba dispuesto a matarme esta vez. Pero en cuanto dio su primer paso, tomé el arco, saqué una flecha y la tiré directo a su pecho.

La miró y cayó de rodillas, hasta caer por completo y perder el conocimiento.

Sentí a alguien que corría detrás de mí. Tomé una flecha y apunté. Vi al mismo hombre robusto que había atacado a James, y sin dudarlo, disparé al pecho. La primera no le hizo nada, así que rápidamente, ya nerviosa, tomé otra flecha y disparé, otra vez al pecho. Pero el hombre seguía corriendo, como si aquello no le afecta para nada. Era muy tarde para hacer algo, había llegado a mí y me había tumbado al suelo. Comenzó a asfixiarme. Al parecer les gustaba la muerte lenta y dolorosa.

Fearless {TERMINADA}Where stories live. Discover now