Fearless {TERMINADA}

Capítulo 15

- ¿Qué? - Preguntó James separándose de mí, mirándome totalmente confundido.

- Que la persona que vi en el suelo era mi abuela - expliqué, pero al parecer James seguía sin entender.

- ¿Cómo es eso posible? - Me quedé pensando unos minutos, hasta que recordé que había algo que no le había dicho.

- ¿Recuerdas cuando ayer te dije que como mi abuela era bruja también podía serlo yo? - James asintió -. Bueno, cuando te fuiste hice crecer una flor y cambié de color otra que hay en la casa - mientras más hablaba, más comprendía todo -. Tal vez fue el darme cuenta qué soy que hizo que soñara eso...

- Pero era un sueño... - Me interrumpió. Lo miré con impaciencia, sin entender cómo no comprendía lo que quería decir.

- Tal vez se manifestó así porque quería saber qué había pasado en la guerra. Tal vez yo no veo el futuro como lo hace Anna, sino el pasado. En donde no estuve. - James pareció, finalmente, entender todo.

- Sin embargo no pudiste ver quién era la persona que mataba a tu abuela. - Aquello me decepcionó un poco, pero tenía razón.

- Tal vez debo trabajar un poco en eso - me encogí de hombros, sin saber qué más decir. Estaba nerviosa por el hecho que había descubierto algo que no sabía de mí, y que era completamente extraño. Y lo peor de todo, me revelaba algo por la mitad.

Al parecer James se dio cuenta de mi preocupación, ya que apoyó una mano sobre mi hombro.

- Lo averiguaremos - dijo, tratando de consolarme. Yo asentí.

- Lo sé, ¿pero cuánto tardaremos?

- Podemos hacerlo ahora mismo.

- ¿No debemos entrenar o algo de eso? - James asintió.

- Sí, pero puede esperar. Quiero ver cómo haces crecer una flor - reí y lo abracé.

- Gracias - dije. Él sólo acarició mi cabello sin decir más.

Nos quedamos unos minutos así, abrazados, en silencio, era perfecto. Y nunca me había sentido tan cómoda desde que había llegado a aquel lugar.

James besó mi cabeza.

- Vamos - tomó mi mano y nos dirigimos a un lugar donde había una cascada, no había estado nunca allí, era totalmente hermoso y sólo se oía el ruido del agua.

- ¿Qué hacemos? - Pregunté mientras nos sentábamos en una de las rocas que había cerca de la cascada.

- Me mostrarás tus poderes de bruja. Pero por favor no me lastimes - bromeó, ambos reímos y me concentré en el agua.

Levanté la mano derecha, y concentrándome logré formar una bola de agua, la atraje hasta donde estábamos, colocándola entre nosotros. James tenía los ojos abiertos como naranjas, no podía diferenciar entre su miedo y la sorpresa que tenía al verme haciendo semejante cosa.

- ¿Qué te parece? - Pregunté.

- Es asombroso - dijo mirando el agua en el aire con pura admiración -. ¿Cómo es que lo haces? - Me encogí de hombros.

- Sólo me concentro. - Contesté. Llevé la bola de agua hasta arriba de la cabeza de James e hice que explotara, haciendo que James se mojara.

- Esto no es gracioso - dijo seriamente. Yo comencé a reír.

- La verdad es que sí lo es, ¿sabes lo que es estar en este lugar sin ninguna compañía? - Pregunté, aún divertida. James también rió.

- Me tienes a mí - dijo sonriendo.