Capítulo 19

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No había nada más difícil para mí que hacerme la idea de que en cualquier momento debería alejarme de esas personas con las que había pasado este último tiempo, con las cuales me encariñé rápidamente. Lo único que me ayudaba a seguir adelante, es que cuanto más avanzaban las horas, más cerca estaba de mi familia.

Debía acostumbrarme a que pronto me alejaría de este lugar para, finalmente, volver con las personas que conocía de toda la vida y donde pertenecía, con ellas.

Bajo el árbol de los cerezos, le conté a James la experiencia que había tenido con las sirenas y los gnomos, le hablé que cómo una de las sirenas murmuraba cosas como "¿Qué le vio James a Alison?"; de cómo al momento de peinarme todas se volvieron una y me llevaron hasta una roca para hacerse cargo de mi cabello.

Luego le conté cómo Soñador me había salvado y llevado hasta su casa donde tuve una cena y me dieron ropa nueva. James me dijo que los conocía y que no le sorprendía que hubieran sido tan amables conmigo, además de que la ropa que me habían dado me "sentaba realmente bien".

En cambio, no conocía muchos a las sirenas. Bromeé diciéndole que si algún día se acercaba lo suficiente a aquel lago, una de ellas lo tomaría de los hombros para casarse con él o hasta echarle algún hechizo para que James se enamorara de ella. Aunque se rió, sabía que decía la verdad, y lo que mejor podía hacer es mantenerse bien alejado del lago.

También hablamos de su vida cuando era pequeño, cuando su padre le había enseñado a usar la espada y el arco, al igual que James lo había hecho conmigo. Cómo él y su padre pasaban toda la tarde practicando, dijo que la primera vez que dio en el blanco con la fecha, fue tres semanas después de haber empezado con el entrenamiento, y admitió que estuvo sorprendido al ver cómo yo le tomé la mano rápidamente. Dijo que era especial.

Habló de las cenas familiares que tenían siempre, de cómo todo era tan divertido aunque con el tiempo se fue desvaneciendo.

Y aunque no nombró en ningún momento a Elizabeth, sabía que estaba en sus recuerdos.

Cuando llegó el momento de irnos, ya anocheciendo, fuimos hasta la casa a duras penas, ninguno quería moverse, deseábamos quedarnos donde estábamos, hablando y compartiendo anécdotas. Ninguno quería enfrentar la realidad.

Finalmente, nos fuimos.

Al llegar a la casa, Anna y Holly estaba esperándonos.

Fue un golpe duro al verlas a las dos allí, sabíamos que había un anuncio importante. Y nuestras sonrisas de desvanecieron rápidamente al darnos cuenta de eso. James tenía su brazo sobre mis hombros, también lo quitó. Poniéndose firme frente a ellas, como los primeros días que lo vi.

- Hasta que llegaron... - Sonrió Holly. Ninguno dijo nada, supuse que James no habló por respeto, pero en cambio, yo tenía miedo, y no sabía por qué.

- Se estaban divirtiendo, Holly - habló Anna, nuevamente su tono burlón volvió. Holly asintió.

- Tenemos una noticia importante - Holly retomó la conversación. Sentí cómo la cabeza me empezaba a dar vueltas -. La guerra será mañana. - Dijo, simplemente. Fue como un balde de agua fría cayendo sobre mi cabeza, pensé que íbamos a tener más tiempo, que podría prepararme mentalmente para todo esto, porque definitivamente no lo estaba -. Apenas salga el sol estaremos en el centro del bosque, trataremos de atacar primero. - Nadie dijo nada, mi garganta se secó -. Les recomiendo que descansen. - Pasó por mi lado seguida de Holly, ninguno me miró, sólo se fueron.

La casa de inundó con el silencio.

¿Qué era lo que iba a hacer? No tenía tiempo para absolutamente nada, ni para entrenar un poco más, ni para hablar con James sobre lo que empezábamos a tener, tampoco para aclarar la mente. Porque cuanto más pensaba en lo que iba a pasar, más me daba vueltas la cabeza.

Fearless {TERMINADA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora