Día 20

395 21 0
                                    

Bailando.

Camus estaba celoso de Aphrodite y Máscara de muerte, los veía bailando o juntos, eran tan diferentes que se complementaban, Death Mask ayudaba en todo a Aphrodite y viceversa.

En cambio el frío y serio, Camus que a vista de todos era inhumano tenía grandes inseguridades con respecto a su pareja Milo y es que temía que no estuvieran juntos por siempre y es que Camus se había abierto tanto a Milo que temía perderlo.

El pelirrojo sabía muy bien que Milo no sería capaz de traicionar su confianza y Camus sabía que si traicionaba a Milo le iría muy mal, así que nunca lo haría.

—Refrigerador con patas, enséñame a bailar, intenté bailar con el gato dorado y me fue terrible, así que manzanita ayúdame. —Camus sonrió inconscientemente, Milo siempre lo sacaba de sus melancólicos y fríos pensamientos, le daba felicidad a su vida.

—¿El gran bicho dorado, no sabe bailar? Me esperaba más de ti bicho.

—Me vas a enseñar o no, manzanita. —El pelirrojo sonrió enamorado y sin avisarle tomo a Milo de la cintura con su mano derecha y con la izquierda la mano derecha del rubio y la izquierda del rubio se sostuvo de la espalda del pelirrojo.

El francés empezó a girar en círculos, asustando a Milo, que con un paso el falso casi cae al piso, pero Camus lo sostuvo, del susto el griego soltó un grito, que Camus aprovechó para intentar besarlo, al principio no lo logró pero con un poco de perseverancia logró besarlo y Milo no tardó en corresponder le el beso a Milo.

—Bichito, para bailar solo necesitas tres importantes cosas que debes recordar para cualquier baile o al menos eso pienso yo.

—Bien dime, cuáles son.

—La sensualidad y el ritmo está en tus caderas, coordinar tus pies es importante y por sobre todo siente la música.  —Como por arte de magia, esas palabras fueron mencionadas y ambos jóvenes se dejaron llevar.

Bailaban de lo más felices, juntos, sintiendo lo hermoso de vivir juntos de estar bailando juntos y al parecer los celos de Camus desaparecieron cuando miro al cielo y vio como Acuario y Escorpio se volvían uno en el cielo, igual que ellos al bailar.

Camus comprendió que Milo era todo lo bueno que el necesitaba y deseaba, que nunca se iban a separar y descubrió que amaba bailar con Milo, era una sensación y acción nueva que estaba dispuesto a repetir.

Por otro lado Milo, era feliz con cualquier acto, acción, sentimiento o movimiento que compartiera con Camus era especial para él y siempre estaría dispuesto a repetirlos así fueran simples o aburridos, si era con Camus todo era hermoso.

Por ejemplo bailar con Camus era sublime para Milo, para Camus bailar y estar con Milo también era sublime y lo sería siempre, porque ellos dos se aman y eso es lo único que a ellos y a sus constelaciones les importaba en esa vida y puede que en las siguientes si realmente existe algo después de la muerte, de seguro estos dos seguirían juntos.

30 días con Camus y Milo. (TERMINADA)Where stories live. Discover now