Capítulo 20 - La casa

322 26 3
                                    

- Adam yo... - Justo cuando voy a terminar la frase, mi teléfono empieza a sonar, lo saco de uno de mis bolsillos y veo que es mi madre de nuevo, no le cojo la llamada, esperando que capte que no quiero hablar con ella en este momento, vuelvo a guardar mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón cuando éste vuelve a sonar de nuevo, esta vez, se trata de una llamada de la directora.

- Noah, ha llamado tu madre, dice que no le coges el teléfono, ¿ha pasado algo? cuando he descolgado ella estaba llorando.

- Eh, bueno... llamó anoche diciéndome que tenia que hablar conmigo de algo importante y le colgué el teléfono, supongo que será por eso.

- Esta bien, perdona las molestias. ¿Estáis ya en la casa del prado?

- Sí

- Muy bien, ¡Divertiros! - antes de que pudiera decir una palabra, la directora ya había colgado, guarde el teléfono en mi bolsillo de nuevo y di media vuelta, Adam ya no se encontraba detrás mío, suspiré, no se si se trataba de un suspiro de alivio o de decepción.

Me dirigí a la cocina donde encontré a Adam concinando, o al menos, empezando a preparar las cosas para hacer la comida, me situé detrás de él y le abracé por la cintura, ambos nos quedemos callados, a tenido un bonito detalle y yo se lo estoy poniendo todo patas arriba, noto una pizca de enfado en cada uno de sus movimientos.

Pocos segundos después, Adam da media vuelta colocándose enfrente de mí, y sin dejar de abrazarlo yo, él besa mi frente, adoro que haga ese gesto, es como si sintiera que no puede pasar nada, como si él alzara un fuerte muro a mi alrededor y nadie pudiera atravesarlo. Poco después, él levanta mi cabeza sujetándome por el mentón y ambos nos miramos a los ojos, poco a poco nuestros labios se van juntando, dando paso a un dulce y apasionado beso que, poco después se rompe por su parte.

- Quizás te he asustado un poco, entiendo que quieras ir despacio, yo solo... me he dejado llevar por el momento. - una pequeña sonrisa cubre su rostro ahora, tiene una especia de poder mental o algo, porque, de eso quería yo hablarle antes de que el teléfono nos interrumpiera.

Nos separamos el uno del otro y ambos empezamos a preparar la comida para así, acto seguido poder comer en la mesa que se encuentra en la cocina. Mientras comemos, sus ojos están clavados en mí, observando cada movimiento y tiene en su rostro esa sonrisa que tanto me gusta.

- Me gusta tu sonrisa. - Noto como mis mejillas se sonrojan y él hace lo mismo, se levanta con una pícara sonrisa y se acerca hacia donde yo me encuentro para darme la mano, haciendo así que yo me levante de mi asiento y, acto seguido, nuestros labios se juntan de nuevo, andamos por toda la casa que por parte de él, como ya he podido comprobar antes, él conoce a la perfección, sin dejar de separar nuestros labios ni un segundo, hasta que, de repente, mis pies no tocan el suelo y me encuentro con él en el sofá uno encima de otro, esta vez nada nos frena, ambos no dejamos de besarnos hasta que mi teléfono suena de nuevo, y esta vez, no es una llamada sino un mensaje de whatsapp.

Adam se levanta de donde esta y me mira con cara de pocos amigos.

- ¿Quien es ahora? - cojo mi teléfono y miro la pantalla el nombre "Samantha" cubre toda la pantalla.

- Es Sam - Adam asiente, diciendo así que mire que es lo que pasa, entro en la aplicación y leo los mensajes.

"Sam: Noah, donde estas, hay unos hombres aquí buscándote" 11:45AM

"Sam: Socorro" 12:00AM

"Sam: Nos han encerrado en una habitación, no se cuanto podré esconder mi teléfono" 12:50Am

"Sam: djdidkdxjdksiffjfkk" 13:10h

- ¿Te está tomando el pelo? Es una broma de mal gusto. - miro a Adam, y acto seguido contesto a los mensajes.

"Noah: ¿k stas diciendo? Si es una broma, no tiene gracia."

"Sam: Tu amiga esta en peligro, haz lo que te digamos o te vas a arrepentir"

Nada más leer eso, mi móvil cae de mis manos y una oleada de frío, o miedo, no se cual de los dos es exactamente, recorre todo mi cuerpo, ¿será una broma? Pero... ¿y si no lo es?. Miro a Adam que al parecer se encuentra en el mismo estado de susto que yo, ambos estamos muy asustados, ¿que hacemos?

Save MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora