𝑽𝑰

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Raquel

Después de seguir hablando con los chiquillos tocaron el timbre pa' volver a entrar a clases, me tuve que devolver a mi puesto ya que la Nata era la que se sentaba con él Diego.

Estábamos en tecnología sin hacer ni una wea, así que empecé a jugar en mi celular mientras la Martina estaba raja durmiendo.

Cuando estaba a punto de pasar un nivel me llegó un mensaje del Joan, me hizo perder el culiao.

bebé💘
oye cabra chica
¿nos vemos en el recreo donde siempre?
10:50 a.m

ya bebé ahí nos vemos
¿es para hablar algo importante?
10:51 a.m

no, es pa verte t extraño:(
11:05 a.m

bueno, pero me hiciste perder en mi juego>:(
11:10 a.m

en menos de 10 minutos te lo
compenso bebé🥴
11:12 a.m

A los minutos que terminé de hablar con mi bebé tocaron el timbre para salir, me demoré un poco ya que me quedé acomodando mi uniforme para verme lo mas linda posible para él.

Cuando iba saliendo me topé a la Nata en la puerta se acercó sonriendo.

-Te demoraste caleta weona, los otros dos se fueron a comprar dijeron que nos esperaban ahí- apuntó al kiosko que estaba bajando las escaleras, cuando terminó de hablar.

-Pucha Nata, voy a pasar el recreo con él Joan- apunte para el lado contrario mientras le ponía ojitos de gato triste.

-Aaaah no importa bebé anda, te tiene que estar esperando después me cuentas que pasó- me dio un beso en la mejilla y camino para donde los chiquillos.

La Nata era la que más aceptaba mi relación con él Joan ni yo entendía porque a los otros dos le disgusta aunque no lo demostraban.

Cuando llegue a donde me había citado mi bebé, el cuál era un lugar piola en el mismo piso de mi sala, donde casi nadie andaba ya que la impectora te echaba cagando de aquí.

Ahí se encontraba él sentado, apoyado mientras escuchaba música con los ojos cerrados, me acerque a él y grite pa' puro asustarlo llegó a saltar weon.

-Que eri pesa cabra chica- me "reprochó" mientras sonreía y tiraba sus brazos hasta sujetarme de la cintura para hacer que me sentará arriba de él- ahora si, saludame como corresponde po'.

Sin pensarlo dos veces me acerque hasta juntar nuestros labios, fue un beso más largo y dulce que los de siempre.

Cuando estaba con él era como si cambiará, siendo una mina más segura de si misma.

-Ya ahora dejame sentarme al lado, que si la vieja de la impectora nos cacha así va a hacer el medio show- me afirmó de nuevo la cintura para sentarme al lado de él mientras hacía puchero.

-Webea por todo esa señora- dijo poniendo los ojos en blanco- oye cabra chica, ¿porque estabai jugando en el celular si se supone que debí tomar atención a la clase?- me interrogó levantando una ceja.

𝓲𝓵𝓾𝓼𝓪  [𝒕𝒆𝒓𝒎𝒊𝒏𝒂𝒅𝒂]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora