Mi Querida Policía //Sasusaku//

Preparativos.

Konoha, Tokyo.

Era jueves por la mañana cuando Sakura Haruno ingreso a la oficina de su jefe con un folio en sus manos.

El líder de la Estación dejo de leer el periódico local y levanto su cabeza, dándole a entender que tenía su atención.

Sakura abrió la boca para comenzar a hablar.

-Buenos Días. Encontré algo que tal vez le parecerá interesante. Unos miembros de una organización tendrán una reunión con el hombre al que estamos buscando en pocos días.-explico la pelirosa entregándole el folio. Minato leyó el papel interesado.

-Sera en dos días. ¿Encontraste el lugar?-pregunto este, tomando un poco de su café.

-No, pero imagino que si es una junta con semejantes personas, será en un bar de los barrios bajos o simplemente en un billar. Los criminales de esa categoría nunca concurren a lugares en donde se pueda llamar mucho la atención.

-Buena deducción, yo pensé exactamente lo mismo. -concordó el rubio mayor.- Muy buen aporte Sakura.

-Gracias.-dijo a unos metros de la puerta.- Por cierto, Naruto quiere hablar con usted.

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//Narra Sakura//

Veía como mis compañeros corrían de un lado al otro con papeles y cajas transportándolas de esquina a esquina. Seguramente algo grande estaba pasando y ellos eran los encargados de todo.

Naruto miraba divertido la escena. A esta hora estábamos libres, así que nos habíamos tomado un pequeño descanso sentándonos en la entrada del cuartel. Ahora observábamos el espectáculo que nos brindaban nuestros compañeros. 

Termine de masticar mi emparedado.

-En dos días habrá una junta en donde asistirá Uchiha.-dije. El volteo hacia mí.

-¿Qué tenemos que hacer?-pregunto, poniendo sus codos en su regazo. Naruto estaba muy emocionado con el caso.

-Infiltrarnos en esa reunión. -Respondí. Sus ojos se abrieron, haciendo que su pupila e iris se ensancharan.

-¿Nosotros?-pregunto apuntándose.- ¿Eh? ¡Pero si es una locura! ¡Terminaremos fritos!

Naruto solía exagerar las cosas, pero presentía que esta vez tenia la razón. Meternos en ese tipo de lugares era mal presagio.

-Tuve en cuenta eso, pero tenemos que entrar a como dé lugar.-dije, para nada serviría echarnos para atrás ahora que todo estaba a la mitad. En eso apareció Minato.

-Traigo noticias.-se apresuro a sentarse en el sofá de al lado.-Tengo varias cosas para decir.

-Escuchamos-Dijimos al mismo tiempo los dos.

-Un camarero de un bar nos dio información y afirmo saber que el sábado habrá un acontecimiento importante dentro del dicho bar. Ya se imaginaran de que hablo. El tema es que habrá seguridad de las dos bandas. Lo mejor sería ir camuflados. -informo.- Tendrán que llevar ropa acorde al lugar. ¿Me entienden?

-Lo que usted pretende es que nos vistamos como matones?-pregunte dudosa. Imaginaba cual sería mi vestimenta.

-Digamos que si- dijo y acomodo sus gafas de lectura.

-Entonces estaríamos yendo a capturarlos o...-pregunto Naruto haciendo énfasis en el "O".

-Si fuera así no los mandaría solos, Naruto. Tampoco creo que sean tan suicidas.-dijo parándose.- Sábado a las 7 de la mañana en el Raika Bar.

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/Narra Naruto/

Desde la ventana se veía como la noche caía, la luna estaba brillante y las estrellas se veían resplandecientes.

Sakura estaba sentada a mi lado leyendo un artículo de belleza femenina. Se veía tan tranquila...y eso que estábamos a horas del operativo. Por mi parte estaba algo nervioso. Ir hasta allí y encontrarnos con criminales no me pintaba mucha gracia, pero luego de la muerte de mi madre me había decidido por seguir los pasos de mi padre para después ser yo el Jefe de este lugar. Si bien no era lo que yo tanto había anhelado, me agradaba bastante tener que defender a las personas con menos recursos en el mundo. Ser policía significaba comprometerme con mi trabajo y compañeros para poder tener un mejor rendimiento a la hora de hacer los operativos.

Afloje dos botones de mi camisa y coloque mis piernas en mi escritorio, arriba de la pila de papeles que había revisado en el día.

La ropa para ir la teníamos. Yo iría con una musculosa blanca algo abierta y unos tejanos azul oscuro junto con unas zapatillas Vans de color negro. Sakura iría con una calza de color azul eléctrico, una blusa lila un poco ajustada, unas botas con tacón bajo y creo que su cabello lo ataría en una coleta alta. El cabello largo podía jugar una mala pasada.

-Podemos hacer lo siguiente. –Me saco de mis pensamientos su voz.-Vamos alrededor de las doce o unos minutos antes, pedimos unos tragos y aguardamos a que aparezcan. Me parece una buena idea si te colocas peluca. Eres muy conocido aquí en Konoha por ser el hijo del Jefe y podrían reconocerte rápidamente.- Ella tenía razón, mi cabello y rostro eran idénticos a los de mi padre.

-¿Te parece un azabache?-pregunte sonriendo divertido. Ella sonrió de lado y dijo:

-Como tú quieras.