Bienvenida a tu nueva vida [Alexby y tu]

Capitulo 51: No la toques.

Me encontraba en un bar de delante de la casa de Guille, junto a Alex. Llevabamos aquí media hora, y ya se nos había olvidado lo ocurrido hacía apenas unas horas.

Era un bar con poca gente, no solía llenarse mucho puesto a que no era una marca grande. Añadiendo que no eran horas para estar en un sitio así, y la gente que había eran los que solo venían a emborracharse.

- Mañana... - Dijo Alex, con un tono bajo en la voz, sin terminar la frase.

- Me voy. - Completé la frase.

Era cierto, solo me quedaba una noche en Madrid antes de volver a Barcelona para ponerme a trabajar y conseguir venir a vivir aquí.

La promesa con Alex de irnos a vivir juntos, seguía en pie, y no iba a dejar que se derrumbase. Lo que sentía por él era demasiado fuerte, y sabía que irme a vivir con él era la decisión correcta.

Lo amaba, y él a mi. Nos amábamos más que a nada en el mundo.

- Te echaré de menos. - Dijo Alex, triste.

- Y yo a ti, pero falta poco para que vuelva para quedarme. - Le sonreí.

- Cierto. - Imitó mi gesto y se acercó a mi para besarme.

De nuevo, sus besos activaban todos mis sentidos, y me enganchaban como si de una droga se tratase.

- Te quiero. - Dije, al separarnos.

- Te amo. - Me respondió él.

Le sonreí y seguimos hablando de tonterias, como hacíamos siempre.

- Tendríamos que volver a casa, se estarán preocupando. - Dijo Alex mirando la hora en el reloj de aquél bar.

- Tienes razón, vamos.

Fuimos a pagar nuestras bebidas y nos dirigimos a la puerta.

Cuando ibamos a salir de aquel bar, algo tocó mi espalda, y me giré. Era un hombre bastante alto, que parecía que había bebido demasiado. No me daba muy buena pinta.

- Hola guapa. - Dijo el hombre cogiéndome por la muñeca.

Intenté deshacerme de su agarre, pero no pude, era demasiado fuerte.

- No la toques. - Dijo Alex.

El hombre lo miró atentamente, y me soltó, pero no apartó su mirada. En ese momento tenía miedo, mucho miedo. Deseaba que el hombre se diera media vuelta y volviera a dentro, y nosotros pudieramos volver a casa. Por desgracia, no fue asi.

- O sino, ¿que? - Le dijo retando a Alex.

- Alex, déjalo, por favor. - Dije deseando que nos fueramos.

Él golpeó al hombre en la cara, el qual retrocedió unos pasos, sorprendido.

Cogí fuerte la mano de Alex, para que viera que no quería problemas, y él lo comprendió, pero siguió en la pelea.

El hombre se volvió a acercar, y le devolvió el golpe, en la cara. Alex retrocedió y me soltó la mano.

Se quedaron los dos mirandose, y de pronto el hombre avanzó hasta Alex para darle otro puñetazo, el qual consiguió esquivar, aunque él también intentó atacar.

Y yo estaba ahí, contra la pared de un bar, viendo como un hombre extraño se peleaba con la persona que mas quería en el mundo. Me sentía inútil, ahí en medio sin poder hacer nada, así que decidí llamar a Guille, para que viniera a ayudar, aunque solo fuera a salir de ahí corriendo.

*CONVERSACIÓN TELEFÓNICA*

- ¿Si?

- ¡Guille por favor tienes que...!

-¿¡Que ha pasado?! - Me interrumpió.

- Tu sólo ven al bar de delante de tu casa, por favor. - Dije a punto de empezar a llorar, viendo como Alex se peleaba con aquél hombre.

-¿Por que? ¿Que pasa?

- Sólo ven, rápido. - Dicho esto colgué, deseando que se diera prisa.

*FIN CONVERSACIÓN TELEFÓNICA*

Guardé el movil de nuevo, y decidí que tenía que hacer algo. Sin pensarlo dos veces, fui hacia ellos dos y me puse en medio, recibiendo un golpe por parte de aquél hombre que lo había empezado todo.

- ¡_______! - Gritó Alex al ver que me había golpeado.

Él me apartó, y seguidamente le dió otro golpe al hombre.

Esta vez si, me puse a llorar, no por el golpe, sino por ver como Alex se peleaba con aquél tipo.

- ¡________! - Dos voces gritaron mi nombre y seguidamente noté unos brazos rodearme.

Me giré y vi a Guille y a Vegetta. Yo no dije nada, sólo señalé a Alex, y ellos los miraron, asombrados.

Vegetta se dirigió a la pelea, y se puso en medio, recibiendo, al igual que a mi, un golpe por parte del hombre. Aunque a él no le afectó, y le devolvió el puñetazo. Alex se sorprendió al ver a Vegetta ahí, que luego me miró a mi y vió también a Guille a mi lado, y él también fue hacia la pelea.

Finalmente, el hombre se rindió, y sin decir nada, nos fuimos hacia casa de nuevo. Yo aún estaba en shock, con lágrimas en los ojos. Alex me miró y fue a abrazarme.

Alex se había peleado para protegerme, y lo agradecía, pero por mi culpa habían terminado los tres con golpes en la cara.

Abracé con más fuerza a Alex.

- Perdona... - Susurré yo.

- ¿Por qué? - Preguntó el, confuso.

- Por mi culpa os habéis peleado los tres. - Dije, volviendo a llorar.

Alex se separó de mi, y me cogió por la barbilla, levantando mi cabeza para que le mirase. Se acercó a mi y habló.

- No ha sido culpa tuya, hay muchos imbéciles en el mundo. - Susurró, a ras de mis labios, y me besó.

Al separarnos, le sonreí, él imitó mi gesto y de nuevo seguimos el camino hacia casa de Guille.

Me alegraba de que por fin la pelea se hubiera acabado, y que los golpes no fueran muy fuertes. Ahora sólo teníamos que volver a casa y curar las heridas.

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¡Buenas!

Por favor no me matéis por no subir capitulo durante estos dias, lo siento.

Antes que nada, dar las gracias a Aurea9827, por darme ideas para mis novelas, ahora que no tenía nada de inspiración en mi cabeza -.- (Pasaros por sus novelas ;) )

Estos días he estado muy, pero que muy baja de inspiración, pero en fin, aquí tenéis otro capitulillo.

Este es larguito, asi que no os podéis quejar. ;)

¡Espero que os haya gustado y prontito subire otro capitulo!