Capitulo 23: Kieren

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No podía sentir la manos. Las tenía amarradas detrás de la espalda, junto al respaldo de la silla en la cual estaba sentado. No sabía dónde estaba Simon, no sabía dónde estaba Amy.

Después de que Zoe llegó, Simon y yo intentamos luchar contra Alex, pero no resultó nada bien. Perdí la razón y desperté en el sótano de...

"¿Dónde estoy?" Pensé
Mire al rededor y me di cuenta que no era un sótano, sino un granero. Pero la casa de Gabe no poseía ningún granero.

Entonces se abrieron las puertas, la luz de la mañana me cegó por un momento, hasta que pude distinguir la silueta de alguien. Alex se fue acercando despacio.

"¿Ya recuperaste la conciencia?" Preguntó "¿Acaso tu noviecito no te enseñó a defenderte?" Continuo con una sonrisa burlona.
De repente se aproximó rápido y me golpeó la cara a puño cerrado. Pude sentir el sabor de sangre en mi boca, misma que escupí al suelo.

"Espera un poco más de eso esta noche. Hoy es el día Kieren. Hoy es el día en que finalmente mueres y yo guío a los no muertos hacia nuestro futuro junto con el Profeta."

"¿Tu? ¿En serio?" Dije burlándome
"¿Que tiene de divertido?"
"Pues...debieron elegir a alguien un poco menos...pendejo."
En cuento sentí el segundo puñetazo, ahora en el estómago, supe que debí haber cerrado la boca. Pero no me arrepentía.

"Me eligieron a mi, porque yo fui el último en levantarme de la tierra. El Profeta lo ha dicho, los últimos serán los primeros."
"El profeta...es un idiota...con seguidores aún más idiotas."
"Eso lo veremos esta noche."
Con un último golpe en el estómago se despidió, cerrando las puertas con gran estrépito.
No sabía cómo...pero encontraría una forma de escapar.

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