Capítulo 9

12.8K 465 34
                                    

| Justin's POV |

Y pasaron y pasaron los días, estos convirtiéndose en semanas y estas convirtiéndose en meses.
Meses en los cuales todo pasó muy rápido y, ¿adivinen quién está enamorado?
Si.
Este idiota de aquí.
Caí como uno cae dormido, lentamente y luego todo de una vez, pero no me quejo, soy un gran creyente de que estar enamorado es el mejor sentimiento que uno puede sentir, y aún pienso eso.
Pero, cuando el amor no es correspondido, que aún no sé si es mi caso, debe de ser terriblemente doloroso.

- Quiero enamorarla fredo, no espantarla - suspire, llevo más de treinta minutos hablando con Alfredo del tema pero el no parece entender mis intenciones, puesto que se lo toma todo como una gran broma.

Cuando le conté lo que quería llevar a cabo, el reemplazó mi idea y propuso:

- Vean una película de terror, ella se asustará y te abrazará - negué con la cabeza y antes de que pudiera decir algo, me interrumpió.
- Déjame terminar, te abrazará y luego una cosa llevará a la otra y... - sonrió - ahí, mi querido amigo, es donde la historia comenzará.

Rodé los ojos, pensando en que la recomendación de Alfredo está - obviamente - en mi lista de No hacer.

- Si de verdad quieres esto - asentí efusivamente.
- Solo dile cosas dulces - me aconsejó.

- Algo dulce... - pensé.
- ¿Sirve si le digo que tiene hermosas...? - dejé mi palabra en el aire y seguí pensando, pero nada se me venía a la mente.
- Hermosas rodillas.

Alfredo palmeo su frente y negó con la cabeza.
Suspiré frustrado.

-No se cómo ser dulce.
- Se nota.
Lo miré mal.

- ¿Sabes? - empezó a decir.
- No pensé que tendría que acudir a esto pero... - so colocó de pie y procedió a decir:
- Ejercicios de cómo ser dulce con Alfredo, alias Cupído.
Me acomodé en el sillón en el cual me encontraba sentado y reí, viendo cómo se arreglaba los pantalones y el cabello, entrando en personaje.

- Tú serás Kailin y yo seré tú, este ejercicio te dará un ejemplo de como ser dulce.
Asentí.

- Kailin, tus ojos son como dos luceros que ilumínan mí camino... - asentí, tomando una nota mental.
- ... Anoche los cerraste y choqué con un pino.
Solté una carcajada y borre rápidamente esa nota mental.

Una vez que Alfredo se salió de personaje y volvió a sentarse a mi lado, lo miré para luego suspirar y decir:

- ¿Que puedo hacer? - cubrí mi cara con ambas manos y apoyé mis codos en mis rodillas.
Alfredo posó una mano en mi espalda y la palmeo, reconfortándome.

Mientras pensaba en como todo estaba arruinado y en como probablemente debería cambiarme de nombre y salir del país para desenamorarme de Kailin, una brillante idea llegó a mi cabeza e instantáneamente me volteé a mirar a mi amigo, quien, basado en la sonrisa en mi cara, supo de inmediato que había tenido una idea.

- Soy un puto genio - admití.

- ¿Qué harás, hermano?

- Dos palabras; Las Bahamas.

+

Antes del viaje inesperado y de último minuto que tomará el Team Bieber, debo ir a unos premios en Los Ángeles y puesto que estoy en un elaborado plan para enamorar a Kailin, planeo invitarla para así poder pasar un tiempo solos, sin Christina o Nick o quien sea, interrumpiéndonos constantemente.

Al despertar al otro día me mentalizé lo suficiente cómo para ir a su habitación en el hotel donde nos estamos quedando e invitarla.
Debo admitir que será algo difícil ya que en el evento también estará mi ex, quien no he visto desde que terminamos, y en realidad no sé cómo reaccionaré una vez que la vuelva a ver.

Suspiré y me armé de valor para tocar en la puerta de Kailin.

Aquí vamos.

El sonido de la puerta siendo destrabada de sus seguros me hizo saber que alguien la estaba abriendo.

- Justin - dijo Kailin, sorprendida de verme.
- Pasa - dijo abriendo un tanto más la puerta y corriendo para adentrarse en la habitación.
- Cierra la puerta por mi, por favor.

Hice exactamente lo que me pidió y luego me adentré en la pieza, solo para encontrármela ordenando todo rápidamente.
Al verme parado ahí solo río y se encogió de hombros.
- Christina es muy desordenada, lo siento - dijo y sonreí.
- ¿Que te trae por aquí, hojita? - preguntó, cuanto amo ese apodo.

- ¿Me das de un poco del tuyo, Kels? - pregunté.
Nos encontrábamos sentados en una mesa de una heladería que habíamos encontrado mientras caminábamos por el parque.
Ella escogió mi sabor favorito de helado y yo el suyo, solo para variar un poco y debo admitir que menta chips en verdad es un buen helado, pero el helado con sabor a algodón de azúcar siempre será mi favorito.

- No, ya estoy harta - dijo e inmediatamente fruncí el ceño.
¿Acaso hice algo que la molestara?
- ¿Por qué, que hice?
Ella negó con su cabeza y continuó:

- Estoy harta de no haber pensado en algún apodo para ti siendo que a la semana de conocernos a ti se te ocurrió el mío - dijo frustrada, solté un suspiro de alivio y reí.
- Llevamos ya unos tres meses conociéndonos y todavía nada se me ocurre, y he pensado en varios, créeme - reí.
-¿Que tal si te ayudo? - pregunté y dejé mi helado de lado, estaba en un vasito así que ni modo que se cayera.
- Por favor.

Asentí.

- Bueno, soy cantante.
- ¿Enserio? - fingió sorpresa, asentí riendo.
- ¿No se te ocurre ningún apodo relacionado a ello?

Pensó por algunos segundos y luego suspiro para negar con la cabeza.

- A mi tampoco, que idea más estúpida - dije, a lo que Kailin río.

- Soy canadiense...

Ella sonrió de inmediato.

- ¿Que? - cuestioné ante su repentino cambio de humor.

- ¿Cual es tu equipo de hockey favorito? - preguntó.

- Los Toronto Maple Leafs - dije y ella asintió.

- Que hacen referencia a la hoja de maple en la bandera nacional, ¿cierto? - asentí sonriendo.

- Hojita de maple - sonrió.
- Ese es el elegido.

Aún sonriendo ante el recuerdo, dije:

- Quería invitarte a... - suspiré, ¿por qué estoy tan nervioso?
Son solo unos premios.
- Es que, hay unos premios en Los Angeles mañana y en verdad quiero ir contigo - suspiré.

Ella se mantuvo en silencio y ante eso procedí a decir:
- No tendrías que gastar ni un centavo en nada, yo te compraría un bello vestido y mi estilista, Stacey, podría ayudarte con tu cara - me detuve al verla frunciendo el ceño.
- Digo, con tu maquillaje y tu cabello y esas cosas.

Ella sonrió.

- Te ves nervioso.

- Si, pero no lo estoy - mentí.
- Claro también podrías decir que no pero por favor no lo hagas - le supliqué y me miró con una cara llena de ternura.

- Nunca lo haré - dijo, ahora sin ninguna expresión, volví a suspirar.

- ¿Entonces no?
Mi corazón se rompía en pedazos.
Sabía que ella no me quería de esa manera, y que debí haber ido solo o con mi madre pero en verdad pensé que ella querría ir, puesto que des---

- No, si iré, me refería que nunca te diría que no - dijo y sonriendo se encaminó en mi dirección, al llegar a mi lado se colocó de puntitas en sus pies y plantó un beso en mi mejilla.
Sonreí.

- Te ves lindo cuando estás nervioso.


                                                            ❁ ❁ ❁ ❁ ❁

Van a ir juntos, que linda la wea <3
Se viene el drama, cabras ksjdks

:)

La Bailarina ➳ Justin BieberWhere stories live. Discover now