CAPITULO 11 EN LA COCINA Y EN EL PARQUE

21.6K 384 27
                                    

Lucas entró en la cocina antes de irse al colegio en busca de Noah, esa sería su primer encuentro y no podía evitar que un hormigueo recorriese su cuerpo.

Lex entró en la cocina cargada con una caja de grandes dimensiones, Lucas se acercó a ella dispuesto a ayudarla.

-Déjame...- dijo Lex tajante- puedo sola.

Él hizo oídos sordos a su petición y le arrebató la caja de la manos.

-Quería hablarte de lo de ayer por la tarde...-Lucas pasó la noche entera pensando en el trato tan peyorativo que le había dado

-Creo que ayer ya me dijiste suficiente- dijo secamente dándole la espalda.- a que hora pasarás a buscarle?

-He quedado con Barbara en el parque- Lex no pudo disimular la sorpresa, su madre estaba siempre de parte de Lucas, empezaba a cansarse del favoritismo tan incondicional

-A Noah le gusta el deporte... no te veo muy preparado- le sugirió haciendo especial hincapié en su indumentaria.

-No voy a jugar a pelota...

-Estupendo, le vas a caer de maravilla!- el cinismo en sus palabras era evidente.

Lucas la siguió lentamente pasando la mano por encima de la mesa de trabajo, miró con atención la cocina, realmente estaba limpia para tener siempre tanto trabajo.

Se detuvo a unos metros de distancia, Lex sacaba verduras y pastas de diferentes tamaños de la caja y los ordenaba por grupos, al mirar a su alrededor Lucas se dio cuenta de que estaban solos.

-Y David?

-Ha bajado al despacho, deberías haberte cruzado con él. Quieres que le deje un mensaje?

-Ese tipo no me gusta - Sentenció recordando el comentario tan ordinario con el que había definido a Lex.

-Me da exactamente igual – tomó aire abstraída- a mi si que me gusta, y con eso me basta.

Lucas se quedó lastimado por sus palabras, por un momento sintió el antojo de confesarle lo que David pensaba de ella, pero se contuvo con la absoluta seguridad de que su comentario provocaría que se acercase más a él por el simple echo de castigarle.

-Bueno me voy, llego tarde...

Lex contuvo las ganas de contestarle, se sentía frustrada, Lucas había descubierto que Noah existía y reclamaba su derecho de padre, quizás eso sería bueno para el pequeño, pero cuando Noah le preguntase porque se habían separado no sabría que contestar.

Nunca tuvo pruebas fehacientes de que Lucas estuviese involucrado en su secuestro, ella simplemente dio por echo que era cómplice haciendo oídos sordos de la negativa constante del que había sido su único amor. Cuando su padre le dijo que pasaría cuatro años en prisión no se digno a visitarle, ni siquiera le pidió explicaciones, desapareció del mapa como la cobarde que era dando por echo que era culpable.

-Para que has vuelto...- susurraba abstraída moviendo el surtido de pastas de un lado a otro.- No sabías que Noah existía pero aún y así viniste en mi busca... yo jamás perdonaría algo así...

Un nudo se formó en la boca de su estómago, sentía la imperiosa necesidad de preguntarle los motivos de su vuelta pero el miedo ha ser despreciada de nuevo la frenó en seco.

Estaba tan absorta en sus pensamientos que no percibió la silueta que se acercaba a ella.

-Hola preciosa- dijo tendiéndole un vaso de café desechable- te sentará bien, se te ve cansada.

-Si bueno... pensar me agota...- dijo entre suspiros.

-Ha ocurrido algo interesante en mi ausencia? - preguntó curioso mientras daba pequeños sorbos al café humeante.

Siempre te protegeréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora